Jorge Vázquez Pacheco
Con la presencia de la violista Hara van Amersfoort y el director invitado Roberto Beltrán Zavala, la Orquesta Sinfónica de Xalapa (OSX) interpretará obras de Igor Stravinsky, Bohuslav Martinu y Johannes Brahms, el viernes 22 de abril en la sala de conciertos Tlaqná a las 20:30 horas.
La velada iniciará con la Sinfonía para instrumentos de aliento de Stravinsky, la Rapsodia-Concierto para viola y orquesta de Martinu, para cerrar con la Sinfonía número 4 de Brahms. Amersfoort es originaria de Holanda y ha trabajado al lado de figuras como Richard Young y Shmuel Ashkenasi (integrantes del Cuarteto Vermeer), Martin Lovett (del Cuarteto Amadeus) e Isabel Carisio (del Cuarteto Alban Berg), así como en las filas de orquestas importantes y bajo la dirección de maestros como Valery Gergiev, Frans Brüggen y Tugán Sokiev.
Desde 2007 es viola principal en la Filarmónica de Rotterdam. Beltrán Zavala es un músico mexicano-holandés que se desempeña actualmente como titular en la Sinfónica de la Universidad de Guanajuato y su estilo ha sido calificado como “electrizante” por la crítica europea.
Es director artístico de la Orquesta de Cámara de Rotterdam, y en su labor al frente de organismos sinfónicos ha impresionado gratamente por sus ejecuciones a la creatividad de Mahler, Bartók, Messiaen y Varèse, entre otros autores importantes. Ha trabajado en los Países Bajos, Alemania, Rumania, Polonia, Suiza y México. También es titular del AKOM Ensemble, grupo de música contemporánea con sede en los Países Bajos.
La Cuarta sinfonía en Mi menor, opus 98, de Johannes Brahms (1833-1897) es considerada la apoteosis del romanticismo musical y fue creada entre 1884 y 1885, en las cercanías de Viena. Se estrenó en Meiningen, en octubre de 1885, con la orquesta bajo la dirección del compositor. Esta obra comparte con sus tres compañeras de catálogo la inclinación del autor por los temas de apariencia intrascendente, que cobran su verdadera significación gracias a un complejo tratamiento.
Los tres primeros movimientos fueron organizados de acuerdo a la forma sonata, pero para el fragmento final optó por un tratamiento apoyado en una forma aparentemente arcaica: la Chacona. Este fragmento ha sido motivo de muchos análisis, ya que al utilizar un motivo procedente del barroco (guarda enorme semejanza con un tema de la Cantata 150 de Bach), la repetición de una frase que se cierra cada ocho compases podría generar una atmósfera pasiva.
Pero este inconveniente fue superado gracias a la sorprendente capacidad de Brahms en el dominio de la forma sonata. Además, el ámbito pesimista y hasta trágico contrasta notoriamente con el tercer movimiento, un Allegro giocoso de afirmativo y optimista empuje.
En esta suerte de “Canto del cisne”, el compositor nacido en Hamburgo se negó a sí mismo una conclusión triunfal y adoptó un carácter severo y adusto, aunque de profunda belleza lírica. Para este acontecimiento, los boletos tendrán costos de 120 y 80 pesos, con promoción especial a estudiantes con credencial vigente, cuyo boleto costará sólo 30 pesos. Para más informes al respecto, llamar al teléfono (228) 8182150, extensiones 107 y 108.