Universidad Veracruzana

Kaniwá

Bibliotecas, Información y Conocimiento



Zotero vs. Mendeley

Apuntes para elegir un gestor bibliográfico.

Elsevier ha adoptado como gestor de referencias bibliográficas la aplicación Mendeley. Zotero se ha mantenido como un gestor bibliográfico independiente. Ambos cumplen a cabalidad la función principal de integrar colecciones de referencias bibliográficas, lo cual es una necesidad permanente en cualquier flujo de trabajo académico (conjunto de actividades típicas de docentes, investigadores o estudiantes).

Dado que ambos gestores emplean formatos estándar para la integración (e importación y exportación) de las referencias bibliográficas, la información agregada en cualquiera de ellos es posible migrarla al gestor alterno.

Esto es de gran importancia en el momento actual (tercer trimestre de 2022), en virtud de que la disponibilidad de la suite de Office tanto para el personal académico, como administrativo, en nuestra casa de estudios, así como de las extensiones de Mendeley para dicha plataforma están experimentando algunas inconsistencias* que dificultan la explotación completa de las funciones del gestor mencionado.

De manera alternativa, Zotero puede recibir las referencias exportadas desde Mendeley, para llevar adelante tareas como la selección de un estilo bibliográfico específico para generar una lista de referencias, interactuar con el procesador de palabras, etc.


ACTIVIDADES DEL FLUJO DE TRABAJO ACADÉMICO

Antes de ir a los gestores, enmarquemos el apoyo que nos brindan en lo que pudiera denominarse flujo de trabajo académico o flujo de trabajo de investigación. Las tareas se comentan a continuación, no en un orden rígido, la investigación tiene mucho de carácter exploratorio, fortuito, recursivo, pero el consenso parece ser que se realizan todas las tareas siguientes:

Buscar

Los aspectos críticos de la búsqueda de información consisten en saber qué buscar, dónde buscar y cómo buscar. Aquí aplica la máxima del poeta persa, Rumi, para quien «el arte de saber consiste en saber qué ignorar».

Recopilar o colectar

Es importante que el académico establezca un sistema que le permita coleccionar documentos y referencias usando etiquetas o carpetas para darles un orden lógico y temático, lo cual garantizará que pueda volver a localizar los documentos referidos con facilidad.

Analizar

El análisis de la información implica el uso de diversos enfoques que pueden ser cuantitativos, cualitativos, lingüísticos, históricos, hermenéuticos, filosóficos, filológicos, sociales, económicos, etc. La lista es tan extensa como las disciplinas que estén relacionadas con el objeto de estudio. Un análisis común en las ciencias económico-administrativas, puede ser el análisis PESTEL (considera el entorno Político, Económico, Social, Tecnológico, Ambiental y Legal de cualquier problema o idea), que permite tener una visión panorámica sobre un tema. Un enfoque completamente holístico de los problemas lo puede brindar el análisis integral (subjetivo individual, objetivo individual, subjetivo colectivo, objetivo colectivo) de Ken Wilber, aunque también existen enfoques fenomenológicos, críticos, histórico-dialécticos, además de los propios de cada disciplina.

Escribir o redactar

Quizá una de las tareas de mayor dificultad, es la escritura y redacción de textos en el ámbito académico. La bibliografía existente sobre el tema es profusa, y toma en cuenta aspectos de forma y de fondo, ortográficos, sintácticos, e incluso de estructura editorial. Conviene revisar la literatura especializada al respecto.

Comunicar hallazgos

Este es uno de los momentos decisivos de la investigación científica. De qué sirve un hallazgo crucial si no se informa sobre ello. En el ciclco de la información, los bibliotecarios podemos actuar como divulgadores en algunas áreas del conocimiento. Eso evitaría que aportaciones como la de Gregorio Mendel, para la comprensión de la herencia biológica, pasaran décadas acumulando polvo en las estanterías. En las estanterías virtuales de la WWW, es importante identificar los mejores medios de difusión del conocimiento, los formatos idóneos y hacer uso consistente de los mismos.

Organizar

La organización de información y conocimiento durante la investigación, puede hacer la diferencia entre el éxito y el fracaso de la misma. El investigador debe establecer jerarquías informativas, taxonomías de conocimiento, sistemas de categorías que le permitan agrupar, identificar, recuperar y localizar con sencillez datos cruciales para la investigación. Esto puede depender de la naturaleza de los datos que se recopilan para la investigación: datos crudos, sin analizar, datos organizados, datos analizados, por orden geográfico, por orden cronológico, de lo general a lo particular, de acuerdo a una escala de valoración, un orden causal, un orden complejo, ordenar por el nivel de conocimiento existente, desde lo establecido con mayor certeza hacia las áreas o temas inciertos, será el académico quien determine la utilidad o importancia que asigna a determinados documentos; distinguir los tipos de fuentes (primarias, secundarias, terciarias) puede ayudar a filtrar y seleccionar la mejor información para la investigación, exposición o publicación.

Anotar

Ateniéndonos al antiguo dicho de que «vale más la tinta más tenue sobre el papel más humilde, que la más prodigiosa memoria», el académico está tomando constantemente apuntes. Cómo lo hace y cómo procesa posteriormente dichas notas es un asunto crucial. Sin un sistema adecuado de referencias, el volumen de datos puede volverse una especie de malabarismo imposible, como aquellos armarios adonde no cabe un objeto más y al abrirlos brota de ellos todo lo que hay en su interior. Las notas pueden hacerse, dependiendo de las circunstancias en cualquier fragmento de papel disponible o en aplicaciones digitales. Un ejemplo interesante de aplicación para anotar es Keep, de Google, si no se es quisquilloso con que las notas estén en la nube. Zotero y Mendeley permiten crear anotaciones sobre referencias específicas lo cual contribuye a mantener reunidos los apuntes pertinentes con cada documento. Alguien puede optar por el uso de una libreta común, adonde cronológicamente a manera de bitácora entran todas las notaciones y, revisiones periódicas posteriores permiten transcribir únicamente lo más relevante a libretas dedicadas a subtemas o actividades específicas.

Citar

¿Estilo MLA o APA? Esta parece una elección simple, no obstante, existen miles de estilos bibliográficos y dependiendo de la publicación de destino (de los artículos), el académico debe adaptarse a la norma editorial de la casa. En las entidades académicas, típicamente facultades y centros de investigación, se establecen acuerdos con relación al estilo que debe utilizarse, la versión o cualquier otro pormenor relacionado, para que los productos editoriales se ciñan a dicha norma. Una vez elegido el estilo bibliográfico, su aplicación tanto al citar como al integrar la bibliografía es un procedimiento relativamente mecánico. Zotero y Mendeley ayudan en el proceso de citar y de integrar las referencias bibliográficas en casi cualquier estilo bibliográfico existente.

Reflexionar

A este respecto, toda la bibliografía sobre la naturaleza de la mente humana y sus procesos de razonamiento y pensamiento apenas rascan la superficie del prodigioso acontecimiento que es reflexionar. Sólo cabe decir que los poderes de reflexión de los seres humanos son sorprendentes, y sin embargo personas como Edward de Bono aún sugieren que es posible potenciar y optimizar de manera sencilla y práctica los procesos de pensamiento, él introdujo la idea del pensamiento lateral y la estrategia de los seis sombreros de colores para pensar. El pensamiento rápido y el lento, por otro lado han sido objeto de reflexión por parte de un premio Nobel de Economía.

Archivar

Una tarea que se quisiera evitar, pero a dónde van a estar estos documentos dentro de dos, cuatro, ocho años. De ello depende que el conocimiento se mantenga disponible y en buena medida útil.

Compartir

Los repositorios digitales y las bibliotecas virtuales, las redes sociales y las plataformas de publicación autónoma en manos de académicos son el medio idóneo para que los resultados de la investigación entren al ciclo global de la información y revelen su pertinencia, utilidad e impacto.

Soporte técnico y documentación de Zotero
https://www.zotero.org/support/
Soporte técnico y documentación de Mendeley
https://service.elsevier.com/app/home/supporthub/mendeley/

* A continuación, una lista de las inconsistencias observadas.
  1. Mendeley está realizando algunos cambios en su software.
  2. En la red UV, no se instalan en la pestaña de Referencias de Word, las opciones relativas a citar y a gestionar colecciones de referencias, crear bibliografías, etc. En caso de que los resultados sean mejores al usar Mendeley fuera de la red institucional, sería muy grato saberlo, por favor escriban: casanchez@uv.mx.
  3. La versión web de Mendeley tiene una funcionalidad básica, y hasta cierto punto limitada.
  4. No tenemos en este momento una idea precisa de en qué momento Mendeley será una herramienta 100% funcional otra vez.

 



Crear un mashup personalizado con Netvibes no cuesta

Con Netvibes, es posible integrar un entorno personalizado de información, usuando tableros (dashboards), pestañas (tabs) y módulos flexibles (apps), dentro de un navegador.

Arriba a la izquierda: Selector del tipo de vista (modo de edición y modo de lista de lectura y en texto gris el nombre del tablero cuyo contenido aparece a la derecha. All feeds muestra la fuente y los encabezados de las noticias publicadas en orden descendente: las más actuales arriba y hacia abajo las más antiguas. A la derecha arriba aparece el selector de tableros, cada usuario puede contar con el número de tableros que necesite en función de sus intereses.

Netvibes.com es, por tanto, un sistema que puede personalizarse a partir de diversas fuentes de información, enlaces, noticias, etc., algo conocido como un mashup.

La rutina del usuario típico de la WWW es que al abrir el navegador aparece un buscador genérico como Google o Bing. Algunos usuarios predefinen sitios específicos para empezar a navegar. Algunos otros, pero quizás los menos, precargan colecciones de pestañas al inicio, de modo que simplemente moviéndose entre pestañas ya obtienen la información que desean. Conforme los intereses del usuario se van desplegando, es posible que abra nuevas ventanas o nuevas pestañas para continuar su exploración por separado. Suele ocurrir que al final, el usuario ha abierto decenas o incluso centenas de enlaces y al final solamente quedará registro de ello en el archivo Historial, del navegador.

Netvibes es distinto. Siempre y cuando la fuente de información cuente con una fuente RSS o ATOM, de noticias sindicadas, es posible suscribirse en Netvibes en un panel dentro de una pestaña, dentro de un tablero -esos son los tres niveles de estructura en orden jerárquico ascendente- permitiendo crear una o varias pantallas de consulta «todo en uno», lo cual permite un considerable ahorro de tiempo al usuario, evita la sobrecarga visual por anuncios y publicidad no deseada, en suma: parece que Netvibes permite realizar todo lo que la WWW prometió ser alguna vez. Por esa característica de agregar de manera personalizada las fuentes RSS o ATOM, Netvibes va más allá del software llamado agregador de noticias, que manejan de manera eficaz las suscripciones del usuario.

Con Netvibes, cada usuario tiene control sobre la cantidad y la jerarquía de las pestañas en su cuenta del portal -que es gratuita-, los nombres de identificación de las mismas, y sobre la configuración visual de los módulos en cada panel o tablero. La cantidad de variantes de personalización, únicamente depende de las necesidades o intereses del usuario.

Netvibes ofrece además, un tablero público, que contiene los recursos que el usuario haya elegido compartir, así como compartir los recursos que otros usuarios hayan compartido también.



Crece el interés por este blog (con gratitud)

Nos da gusto compartir con ustedes el análisis que hace Google de las visitas a nuestra página -esto a partir de que se activó ese módulo de estadísticas, enero de 2022-. Y pinta muy bien.

Y eso es posible únicamente gracias a nuestros lectores. Como pueden observar en los meses transcurridos hasta abril, hubo más de 2000 personas que tuvieron la amabilidad de dedicar tiempo a revisar nuestro contenido. Eso nos compromete a mejorar la calidad del contenido, y abrir nuestros oídos y ojos a los intereses de la comunidad lectora, en este caso principalmente, pero no exclusivamente, la comunidad universitaria UV.

Esperamos que el flujo de lectores continúe y se acreciente, gracias sobre todo a la utilidad de la información de la que damos cuenta. Este y otros blogs universitarios representan un esfuerzo de comunicación y de diálogo con todos los universitarios, así que esperamos su retroalimentación, específicamente pueden enviarnos mensajes al correo: casanchez@uv.mx, donde tendremos mucho gusto en leerlos y saber de sus intereses, dudas y sugerencias. También es posible que nos hagan favor de dejar sus comentarios en la entrada correspondiente a su interés.

Una forma simple y eficaz de apoyarnos a dar a conocer el contenido de este blog, es a través de los botones de Compartir en redes sociales que aparecen al final de esta entrada. Gracias.

El editor.

Mayo 27 de 2022.



Pandemia, bibliotecas y sustentabilidad

Las bibliotecas de todo tipo han recibido un gran impacto desfavorable, causado por la pandemia de COVID-19. El impacto es apreciable en la reducción evidente de la circulación física de los acervos. Los usuarios, preocupados más por su salud, se han alejado de espacios como las bibliotecas, aunque se hayan establecido filtros sanitarios, termómetros y desinfectante en el acceso de las mismas. Cabe mencionar que en muchas se han implementado medidas para mantener la distancia social recomendada por las autoridades sanitarias.

Otros efectos lamentables en las bibliotecas se relacionan con la disminución de acciones presenciales de alfabetización informacional y de fomento a la lectura. Las bibliotecas o sistemas bibliotecarios que poseen sistemas y servicios de información y formación en línea han podido compensar dicho efecto aunque es previsible que sólo de forma relativa.

Las restricciones de movilidad, distanciamiento social y llamados a evitar la asistencia a espacios de uso compartido, para reducir la posibilidad del contagio, ha reducido drásticamente el número de usuarios de las bibliotecas.

La pandemia de Covid-19 obligó a plantearse la pregunta acerca de la viabilidad de que el papel de los libros mismo, fuera portador de particulares virales y pudiera tener un efecto negativo potencial en la salud.

La pandemia obligó a las bibliotecas a establecer lineamientos de bioseguridad al interior de las mismas, a reorganizar la asistencia del personal, a establecer mecanismos de trabajo a distancia, mediante el uso de las TICs, ante el riesgo potencial que representaban los materiales bibliográficos que eran devueltos por los usuarios, recursos provenientes de condiciones sanitarias totalmente inciertas.

Se revisó la literatura científica que se iba generando progresivamente sobre los riesgos de superficies plásticas y de papel, hasta que finalmente se decidió que un plazo de cuarentena de una semana -para los libros devueltos- brindaba un margen de seguridad suficiente para que las particulares virales desaparecieran del papel.

Los espacios bibliotecarios requieren mantenimiento continuo, por lo que los servicios de agua y eléctrico continuaron con pocas adecuaciones, elevando el costo total de propiedad de estas organizaciones.

Las actividades relacionadas con la organización de las colecciones continuaron, aunque a un paso menor. En algunos casos, el desarrollo de colecciones y las adquisiciones de recursos documentales se detuvieron.

Las restricciones económicas que impuso la pandemia y la suspensión de eventos como las Ferias del Libro Universitario, entre otras, también supusieron una disminución en la adquisición de recursos documentales para su incorporación a las colecciones.

Aunque las bibliotecas son espacios donde se ha privilegiado desde siempre la provisión racional de recursos y la máxima reutilización de las colecciones, pueden contribuir de maneras elocuentes y con una amplia difusión al desarrollo de una cultura de la sustentabilidad.

Acciones concernientes al ahorro de agua, luz y manejo de residuos son viables y tiene un efecto inmediato en el entorno bibliotecario.

Con relación a ideas, proyectos y resultados de acciones orientadas a la sustentabilidad en bibliotecas, vale revisar -en especial, el caso de la Universidad Veracruzana- en: Sustentabilidad en el entorno bibliotecarios y de la información (2016).

Sería muy interesante analizar el contenido de las contribuciones publicadas en dicha obra, y compararlas con los drásticos cambios que han tenido que aplicarse para que la pandemia de Covid-19 se desarrollara con las pautas que lo ha hecho.

  

MBE y Pico ¿de qué van?

Estas evidencias abarcan todo el espectro de la documentación sobre un padecimiento desde cuestionarios, resultados de laboratorio, diversas pruebas experimentales, sobre metodologías, o grupos de métodos aplicados, estudios cuantitativos y cualitativos, guías prácticas, posicionamientos de grupos clínicos, reseñas críticas, programas de evaluación y mejora, reportes de caso y la opinión de expertos nacionales ampliamente reconocidos sobre el estado más avanzado del saber científico.

La medicina basada en evidencias consta de una serie de criterios organizados en niveles para asegurar la mejor pertinencia, calidad y fiabilidad de los datos empleados en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades.

Pico es una estrategia de consulta de bancos de información o bases de datos médicas, que busca optimizar la correlación entre los conocimientos requeridos y la disponibilidad de dichos conocimientos. Pico busca lograr la mayor eficiencia en el proceso de enriquecer las evidencias en el trabajo de investigación e intervención en la salud.

  

Si es padre de familia, le importa saber lo que dice el reporte de Bark para 2021

Descargue y lea el reporte aquí. Algunos extractos:

Se elevó un 25% la frecuencia con que los niños entre 12 y 18 años piensan en autolesionarse o incluso el suicidio, con relación a 2020.

40% de los púberes y casi 75% de los jóvenes se vieron envueltos en situaciones de autolesiones o suicidio.

En Estados Unidos el suicidio es la segunda causa de muerte entre las edades de 10 a 24 horas. Lamentablemente, de acuerdo con datos publicados por la Universidad de Guadalajara, en México también.

Todos los días en los Estados Unidos hay casi 4 mil intentos de suicidio entre la población escolar.

69% de los niños de 9 a 12 años y 90.73 de 13 a 18 años hacen búsquedas o reciben contenido de desnudos o de naturaleza sexual.

Las alertas por casos de ansiedad se presentaron entre niños de 15 años.

Aproximadamente un 20% de los menores de entre 9 y 12 años expresaron su ansiedad. 42% de los de 13 a 18 también lo hicieron.

Se incrementó un incremento del 21% en las alertas sobre uso de alcohol o drogas, con relación a 2020.

75% de los menores de entre 9 y 12 años y 93.3% de los de 13 a 18 participan en conversaciones concernientes al uso de alcohol y drogas.

Y las cifras siguen.

https://www.bark.us/annual-report-2021/

Más información y comentarios.

https://www.11alive.com/article/news/local/drugs-sex-violence-and-more-what-kids-encounter-online/85-055fb538-54a5-4c78-a2d4-701749c30d4a