Universidad Veracruzana

Kaniwá

Bibliotecas, Información y Conocimiento



La biblioteca universitaria al servicio de la comunidad

¿Siente que su hijo sabe mucho de computación? ¿Le hace preguntas sobre Internet que no sabe cómo responder?
Me es muy grato comunicarles a todos nuestros lectores que, como parte de la preocupación permanente de los bibliotecarios por contribuir al bienestar social, al desarrollo cultural y a la distribución social del conocimiento -que es un leit motiv de la educación superior a nivel mundial- la Dirección General de Bibliotecas está emprendiendo una actividad de largo aliento, para brindar cursos gratuitos dirigidos a sectores particularmente sensibles de nuestra sociedad veracruzana y xalapeña, en particular.
Por lo anterior, los días 16, 20, 23, 27 y 30 de julio de los corrientes, se impartirá un curso-taller dirigido a amas de casa (y padres de familia), con la finalidad de que conozcan las generalidades que necesitan saber acerca de las herramientas informáticas, el uso básico del correo electrónico, la búsqueda de información en Internet y algunos recursos de información que consideramos que serán de su interés.
La invitación está abierta, pues, para esos cinco días del mes próximo. El curso-taller se realizará con un horario de las 10 a 12 horas del día. La invitación es extensiva tanto a madres como padres de familia con nociones mínimas elementales de computación.
Nos importa mucho la asistencia de madres de familia. Nos vemos en el Módulo de Servicios Informáticos ubicado en el Primer Nivel de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) de Xalapa.
Por cuestiones de espacio y equipamiento existe un número límite de asistentes al curso-taller, por lo que rogamos confirmar con anticipación su participación en el curso, o inscribiéndose a otros cursos semejantes en los meses siguientes, llamando al teléfono 8-42-17-00, extensión 12126, con nuestra compañera Nora Olivares. Favor de llamar en un horario de 10 de la mañana a 6 de la tarde.



Riesgo de involución antidemocrática

El asesinato o ejecución de candidatos a los diversos cargos de elección popular, en actos de campaña o al cierre de los mismos, debe enviar una señal sumamente preocupante a todo el cuerpo social: la posibilidad de hacer cambios favorables para la sociedad desde procesos electorales, está amenazada; los intereses que representan los candidatos no son los de los ciudadanos, son los de las mafias, o son los de los ciudadanos, pero no los de las mafias.
Así, continuarán las medidas de choque en lo económico, lo social, lo cultural y lo social. Se desatenderá, como hasta ahora, el rubro de la educación, propiciando con su estancamiento precisamente las condiciones que prohijan la cultura de la violencia, el abuso de enervantes, la corrupción en todos los niveles de la vida social. Se seguirá desangrando la economía de millones de familias, elevando los precios de servicios básicos (electricidad, agua, gas). Seguirán colapsándose las pequeñas empresas y se ahuyentará aún más a los inversionistas. Miles de millones de dólares seguirán saliendo sin control del país. No habrá paliativos de ningún tipo, salvo spots televisivos sobre alguna supuesta celebración. Continuará el papel de los medios masivos de comunicación, de disuasión, de enajenación abierta y descarada, hoy con fútbol y propaganda triunfalista de un Centenario y de un Bicentenario que en los hechos se presentan con su espectro de violencia, asesinatos y derramamientos de sangre.
Se dejaron las instituciones en manos inexpertas, de personas más atentas a sus beneficios que a las necesidades del país, irresponsables o aviesas, y se han acumulado tantos errores de estrategia y de táctica, unos sobre otros, hasta llevarnos a este punto en el que las únicas medidas de que pueden echar mano los autores del caos y del desorden nacional, no se distinguirán en nada de las medidas que en su momento han tomado dictaduras de corte fascista en otras partes del mundo.
El hecho es que si buscamos responsabilidades, todos somos responsables, por nuestro analfabetismo político. Como lo señaló en su tiempo Bertolt Brecht: «El peor analfabeto es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio de los frijoles, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. El analfabeto político es tan estúpido que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales».