La agrupación tiene un amplio y renovado repertorio
Son cultivadores de un estilo novedoso que despierta admiración en las más diversas latitudes
Jorge Vázquez Pacheco
Los integrantes del grupo Tlen Huicani Maderas, adscrito a la Dirección General de Difusión Cultural, indicaron que la conjunción de estilos en su listado interpretativo se debe a las exigencias del público y a la universalidad que ha cobrado la interpretación de la marimba, instrumento que partió de los renglones puramente folklóricos para alcanzar las salas de concierto y que ha llamado la atención de muchos compositores de la “música académica”.
El organismo musical está integrado por los hermanos Barranco García (Jaime, Ezequiel, Joel y Jorge), así como otros músicos, y son poseedores de un repertorio renovado.
“Nuestro padre fue marimbista de banqueta y nosotros lo acompañamos en muchísimas jornadas”, indicó el saxofonista Joel Barranco. “Eso nos enorgullece porque la calle es un escenario muy especial y una formidable maestra; de ello aprendimos que el público es cambiante y, por lo mismo, tiene gustos heterogéneos. Eso nos ayudó a tratar de satisfacer las exigencias de los escuchas”.
Las reseñas periodísticas en sus diversas presentaciones señalan a Tlen Huicani Maderas como cultivador de un novedoso estilo en la música para marimba, por su concepto artístico intrépido y colmado de propuestas innovadoras.
Como conjunto que se desplaza por diversos puntos del planeta, la demanda del público en cada uno de los lugares que visitan es distinta, lo que les compromete a abordar temas que van desde la música chiapaneca y veracruzana hasta jazz y temas clásicos, siempre con reacciones de lo más inesperado.
Una anécdota interesante es que durante una presentación en Suecia, el instrumento que más llamó la atención del público fue el güiro. Conscientes de que nunca sabrán qué es lo que la gente de otras latitudes espera de ellos, en la programación que estructuran funciona la parte intuitiva, algo aprendido de una prolongada serie de experiencias como músicos callejeros, que nunca soslayan y de lo cual afirman haber capitalizado muchísimas enseñanzas.
Parte de la diversidad antes mencionada les ha conducido a tocar con diversos músicos invitados como el arpista y jaranero Alberto de la Rosa, el tecladista de jazz Édgar Dorantes, el guitarrista Humberto León y muchos más. Recientemente se ha unido a ellos el percusionista Jorge Colorado, de amplia experiencia en los renglones de la música afroantillana.
Una actividad importante es su labor en la promoción y difusión hacia las diversas facultades de la Universidad; además, dedican tiempo para la enseñanza y cuentan con una sede cercana al Teatro del Estado, en donde atienden a alumnos interesados en aprender la ejecución de la marimba.
La diversidad de instrumentos –entre los cuales se incluyen percusiones, bajo eléctrico y demás–, así como el número de integrantes, compromete al conjunto a la unidad de ideas y asumir la diversidad de propuestas. En ello se ubican gran parte de sus aciertos.