Año 15 No. 639 Mayo 23 de 2016 • Publicación Semanal

Xalapa • Veracruz • México

Ansiedad y depresión, problemas de gran incidencia mundial

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León Jesús Germán Ponciano

León Jesús Germán Ponciano

 

Carlos Hugo Hermida Rosales

La ansiedad y la depresión constituyen las psicopatologías de mayor prevalencia a nivel mundial; la primera, con afectaciones al 15 por ciento de la población; la segunda, con cifras que alcanzan hasta el 25 por ciento de la misma.

Así lo declaró León Jesús Germán Ponciano, estudiante del Doctorado en Neuroetología, al impartir la ponencia “Ansiedad y depresión: estudios experimentales y perspectivas farmacológicas”.

El universitario participó el 13 de mayo en el 4° Simposium en Ciencias Biomédicas, organizado por la Facultad de Química Farmacéutica Biológica (QFB), en Xalapa.

El joven doctorante explicó los estudios que el Instituto de Neuroetología lleva a cabo sobre estas patologías: “Dentro del laboratorio estudiamos posibles alternativas farmacológicas de manera experimental, con el objetivo de abordarlas en un futuro a nivel clínico en las personas con estos padecimientos, para así mejorar su calidad de vida”, mencionó León Germán.

El también Maestro en Ciencias enunció que sus trabajos retoman investigaciones realizadas en institutos brasileños y argentinos relacionadas con flavonoides, específicamente crisina y genisteína, los cuales tienen efectos ansiolíticos y antidepresivos y, a su vez, carecen de las reacciones secundarias de otros fármacos usados para tratar la depresión y la ansiedad.

Germán Ponciano manifestó que pese a que los resultados de estos experimentos son alentadores, para abordarlos en humanos a nivel clínico deben estar 100 por ciento seguros de cuál será el mecanismo exacto de estas sustancias a nivel bioquímico, para así mejorar su especificidad antes de usarlas en pacientes.

El universitario resaltó la importancia que estos estudios tienen para quienes padecen ansiedad o depresión: “Aunque en ocasiones creemos que las personas inventan estos padecimientos, muchas veces llegan a ser incontrolables y no basta con la terapia psicológica; se requieren nuevos fármacos que mejoren la vida de los pacientes al controlar los síntomas sin daños secundarios”.

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