José Agustín Castellanos
Las piezas ofrecidas fueron creadas por los estudiantes
Más de 20 estudiantes de la Facultad de Artes Plásticas realizaron el Bazar de Artes con piezas de producción propia y talleres de encuadernación, cerámica y monotipo, impartidos por ellos mismos, los días 10 y 11 de diciembre de 2015 en la Unidad de Artes.
Esta actividad retomó una práctica que inició hace más de 30 años en la antigua sede de esta entidad académica, ubicada en la calle Diego Leño donde actualmente está el Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales, informó Carlos Torralba, director de la Facultad.
La idea del bazar, añadió, surgió en el Taller de Grabado. Las piezas se exponían en la Galería AP, que básicamente eran los pasillos del edificio. Cuando la Facultad se trasladó a la Unidad de Artes, hace 21 años, esta dinámica continuó aunque con algunas pausas.
Sin embargo, la intención es que de aquí en adelante se lleve a cabo de forma ininterrumpida. La edición 2015 fue un regreso a los principios básicos del bazar, la venta de piezas creadas por estudiantes y la impartición de talleres. Entre los objetivos, destacan la difusión, crear vínculos entre creadores y generar experiencias para incorporarlos al mundo laboral.
Al respecto, Víctor Gibrán Tanos, estudiante de Artes Visuales y coordinador del bazar, comentó: “En varias ocasiones escuché a maestros referirse a un bazar anual que se realizaba en las antiguas instalaciones de la Facultad y que contaba con cierto prestigio en la comunidad xalapeña.
Muchas escuelas de arte tienen eventos donde exhiben el trabajo de los alumnos y nuestra Facultad había perdido esa costumbre a pesar de su importancia.
Fue así que realicé la propuesta a Carlos Torralba y se retomó el proyecto”. Luis Javier García, estudiante de Artes Plásticas que participó con la venta de acrílicos y óleos en formatos pequeños, expresó: “Es la primera vez que participo en una dinámica así, me interesa la propuesta ya que muy pocas veces se nos brinda la oportunidad de ofrecer nuestros trabajos y darnos a conocer.
Los precios que manejamos son bastante accesibles. En general, esta actividad representa un beneficio para nosotros como artistas, pues mostramos nuestro trabajo y tenemos un acercamiento con el mercado”. Víctor agregó que el bazar representó un esfuerzo exclusivo de los estudiantes, quienes aportaron obras y se ocuparon de la gestión y desarrollo del mismo.
También recibieron apoyo de la Dirección de la Facultad para la difusión del evento. Aunque no está establecida la periodicidad de este evento, Carlos Torralba compartió que la intención es hacerlo cada semestre, por lo cual es probable que se lleve a cabo dos veces al año.