Año 14 No. 601 Mayo 18 de 2015 • Publicación Semanal

Xalapa • Veracruz • México

LGID, una buena opción para estudiar: egresados

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Los universitarios provienen de zonas marginadas

"Los docentes dan seguimiento al desarrollo profesional de los egresados y los apoyan incondicionalmente”: Alma Hidalgo Alvarado

«Los docentes dan seguimiento al desarrollo profesional de los egresados y los apoyan incondicionalmente”:
Alma Hidalgo Alvarado

UVI-Huasteca.- Egresados de la Licenciatura en Gestión Intercultural para el Desarrollo (LGID) de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI) sede Huasteca (ubicada en Ixhuatlán de Madero), compartieron sus expectativas sobre su preparación profesional, sus familias y la institución en la que se formaron.

En entrevista comentaron las estrategias para cursar posgrados de Calidad en México y en el extranjero. Alma Hidalgo Alvarado, Faustina Hernández Meza y Santiago Bautista Cabrera expresaron las circunstancias que vivieron para lograr sostenerse en su carrera dentro de la Universidad Veracruzana (UV) y la UVI: situaciones de marginación, el apoyo de sus familias, y el trabajo del profesorado para ofrecerles un seguimiento académico con sensibilidad a sus lenguas y culturas.

En este sentido, desde la UVI, la Universidad Veracruzana pone todo su empeño para que los jóvenes alcancen sus metas y con una formación pertinente estén en condiciones favorables para aportar al desarrollo de sus regiones y comunidades.

Alma Hidalgo recientemente finalizó la Maestría en Trabajo Social en la UV y se desempeña como administradora pedagógica en la UVI-Huasteca. Por su parte, Faustina Hernández colaboró en la misma sede como docente de las experiencias educativas Diversidad Cultural, Lengua Local, y Lenguas Nacionales. A diferencia de Faustina, quien fue aceptada en el Programa de Becas de Posgrado para Indígenas (Probepi/CIESAS-Conacyt-CDI) y decidió viajar a Bolivia para cursar una maestría, Santiago Bautista, egresado de la primera generación de la LGID, colaboró en el Laboratorio Multimedia de esta misma sede al igual que Alma, quien actualmente estudia el posgrado en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Decisiones que se toman pronto: Alma Hidalgo Alvarado ¿Qué te motivó para estudiar en la universidad? Fueron las situaciones que observaba a mi alrededor. Ingenuamente desde muy pequeña me propuse concluir una profesión que me permitiera desarrollarme como persona y como profesionista, que pudiera ser un apoyo para mi familia y sobre todo para mis hermanos más pequeños. Como hermana mayor tenía –y tengo– la responsabilidad de apoyarlos, y ellos saben que conmigo pueden contar. Hasta la fecha se los he demostrado.

Para ti, como egresada, ¿qué significa la UVI?
He llegado a la conclusión que la UVI es una buena institución. Los docentes dan seguimiento al desarrollo profesional de los egresados y los apoyan incondicionalmente. Hemos tenido la oportunidad de desarrollarnos como profesionistas en distintos ámbitos, ya que los docentes te motivan para seguir adelante; muchos de nosotros sólo necesitamos unas buenas palabras de motivación. Para mí, en lo personal, eso es muy satisfactorio.

Eres una egresada universitaria ¿Cómo te consideras?
Soy una persona con un desempeño laboral y académico muy eficiente. Siempre me he destacado por ser una persona responsable, dedicada y comprometida con cada una de las actividades que se me delegan. Desarrollo competencias de creatividad, sobre todo habilidades y aptitudes para ser una buena facilitadora para la transmisión del aprendizaje y contenidos, donde demuestro responsabilidad y eficacia.

Me siento muy orgullosa de haber estudiado en la UVI porque me ayudó a buscar mi propia vocación”: Faustina Hernández Meza

Me siento muy orgullosa de haber estudiado en la UVI porque me ayudó a buscar mi propia vocación”:
Faustina Hernández Meza

¿Qué decisiones tuviste que tomar para cursar la Maestría en Trabajo Social?
Tuve que tomar una decisión muy complicada, ya que la cuestión económica de mi familia no estaba del todo bien. Me habían proporcionado una beca para colaborar en el Laboratorio Multimedia de la UVI-Huasteca, pero al realizar los trámites de la maestría me comprometí conmigo misma y con las demás personas; además, el posgrado era escolarizado. A pesar de toda la situación que vivía opté por estudiar el posgrado.

Supe que fui aceptada en la maestría en diciembre de 2012 y tuve tiempo para realizar un reporte de todas las actividades realizadas en el Laboratorio Multimedia porque las clases empezaron en febrero de 2013. Comuniqué mi decisión al coordinador de la sede y a los responsables del laboratorio, quienes entendieron la situación y me felicitaron por la decisión que tomé, brindándome su apoyo.

Becaria del Probepi: Faustina Hernández Meza
¿Cuál es el papel de las mujeres en las comunidades indígenas de Ixhuatlán de Madero?

En las comunidades indígenas ser mujer implica tener mucha responsabilidad como ama de casa y madre. Las mujeres también son las encargadas de enseñar a los hijos y educarlos. No hay tanto apoyo para salir adelante porque las mujeres sólo sirven para casarse y tener hijos. En la cabecera municipal de Ixhuatlán de Madero las mujeres ya tienen oportunidades de seguir estudiando.

¿Cuál fue el principal motivo que te impulsó a seguir con tus estudios? 
Siempre creí que las mujeres pueden seguir estudiando, y sobre todo mi mamá me motivó aun cuando mi papá se oponía. Estudiar la secundaria fue un reto por tener que desafiar a mi papá y decir: “Sin tu apoyo voy a seguir estudiando”. Y aun así hubo muchas condiciones, como sacar buenas calificaciones y notas.

¿Qué obstáculos enfrentaste para seguir tus estudios en el contexto en el que te encontrabas?
Mi papá a veces me decía que como no teníamos recursos económicos no debíamos estudiar sino trabajar, y yo decía lo contrario, que si no teníamos dinero ni los recursos debíamos prepararnos para de alguna manera poder trabajar y ayudar

¿Cuáles fueron las alternativas o soluciones que apoyaron tu desarrollo académico y profesional?
Cuando estudiaba la prepa una tarde pasó un muchacho del Conafe y le pregunté cómo podía entrar porque yo quería seguir estudiando, y me dio toda la información. Hice mi propuesta para ingresar al programa de educación a comunidades indígenas y le dije al muchacho que metiera mi solicitud. Cuando fui aceptada le dije a mis papás que me iría a Álamo a capacitarme para ser instructora.

Mi papá me dijo que no me podían apoyar con dinero, pero sí moralmente. Ésa fue la primera vez que sentí el apoyo de mi papá. Entonces les dije que iba a capacitarme y luego me mandarían a comunidades a dar clases. Y así fue, me mandaron a cuatro comunidades con problemas diferentes.

Con todo este esfuerzo y dedicación, ¿por qué decidiste abandonar tu sueño de ser profesora?

Los límites los pone uno mismo: el cambio y la renovación llegan cuando abrimos las puertas al aprendizaje”:  Santiago Bautista Cabrera

Los límites los pone uno mismo: el cambio y la renovación llegan cuando abrimos las puertas al aprendizaje”:
Santiago Bautista Cabrera

Siempre dije que iba a estudiar pedagogía para contribuir en la educación. El primer semestre me gustó la carrera pero luego me di cuenta que no era para mí, que debía dejarla y seguir buscando lo que yo quería en realidad.

¿Cómo decidiste ingresar a la UVI?
Un día vine a ver a mi mamá y le dije que ya no quería seguir estudiando. Después mi papá me dijo sobre la UVI y regresé a Ixhuatlán. Ahí me encontré con la secretaria y el administrador, quienes me platicaron acerca de la forma de trabajar en la UVI y su plan de estudios. Así fue como me enamoré de la universidad.

Les conté a mis papás y me dijeron que si quería estudiar en la universidad contara con su apoyo moral, pero no económico. Ése fue siempre el obstáculo.

¿Cómo han cambiado las formas de pensar de tu familia y la tuya propia tras estudiar en la UVI?
Mi papá y mi familia también han cambiado mucho. Ya las mujeres somos más comprometidas y nos hemos ganado el respeto de la comunidad. Ahora me ven como una persona de la comunidad y me toman en cuenta en las decisiones que acontecen en las reuniones con las personas mayores. Me siento muy orgullosa de haber estudiado en la UVI porque me ayudó a buscar mi propia vocación y el sueño que antes no imaginaba poder llevar a cabo.

Tú eliges el camino: Santiago Bautista Cabrera
¿Cuál es tu formación profesional?

Desde el séptimo semestre de la LGID en la UVI-Huasteca comencé a desempeñarme como promotor cultural, colaborando en la presentación de grupos culturales en Cumbre Tajín, de 2008 hasta 2012. Visité algunas comunidades de los municipios de Ixhuatlán de Madero y Chicontepec para organizar la participación de danzantes, artesanos, lauderos y músicos huapangueros.

En 2011 me desempeñé como auxiliar en la Casa de Cultura del Ayuntamiento de Ixhuatlán de Madero. En 2012 colaboré como becario en la UVI-Huasteca desempeñando tareas relacionadas con la producción audiovisual dentro del Laboratorio Multimedia, oportunidad que me permitió conocer el trabajo docente desde el interior de la universidad.

Actualmente estudio la Maestría en Estudios Mesoamericanos en la UNAM, dentro del campo de conocimiento antropología de los pueblos indígenas, atendiendo la línea de investigación “Historia de los pueblos indígenas”.

¿Cómo te consideras como ser humano?
Siempre he sido una persona emprendedora y dispuesta a tomar retos en la vida, en primera instancia para corresponder a mis esfuerzos personales, pero también para celebrar cada logro con mi familia y amigos. A quien debo más en esta vida es a mi madre, que de manera acertada siempre me ha inculcado buscar la superación y dar gracias a Dios por cada paso dado.

¿Cómo ha sido tu trayectoria personal?
Sin duda estas oportunidades que la vida me ha dado, y que he atendido cabalmente, me han permitido llegar tan lejos como lo he soñado. Ahora mismo puedo mirar atrás y sonreír al descubrir que el camino no es y no ha sido fácil. Reconozco que una sólida determinación y la confianza en uno mismo es lo que marca la diferencia en el resultado final.

Es verdad aquello de que los límites los pone uno mismo: el cambio y la renovación llegan cuando abrimos las puertas al aprendizaje. Es ahí, en esos momentos de creación, cuando el pensamiento se torna lúcido y la vida se dinamiza permitiéndonos valorar lo que somos a partir de lo que hemos sido antes.

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