La sociedad actual en medio de una crisis estructural generalizada enfrenta retos y amenazas y demanda cambios que nos obligan a replantear objetivos que lleven a nuestras instituciones de educación superior a una transformación que debe traducirse en procesos profundos que respondan a las necesidades actuales y cambiantes de una sociedad inequitativa y desigual, donde no podemos sustraernos a la influencia de dos fenómenos: la globalización y la sociedad del conocimiento, que en estos tiempos se agrava por la crisis económica que impacta en todo el planeta y donde la crisis de valores interroga a las instituciones educativas y hace impostergable una nueva visión del mundo y del futuro de la especie humana. En este contexto la Universidades y sobre todo las públicas tienen el compromiso y la responsabilidad de producir conocimientos para su distribución social y planear su desarrollo con un nuevo orden de ideas.
La Universidad pública es una institución que emerge de la sociedad y en la que se forman recursos humanos capaces de conocer y plantear soluciones a los problemas sociales con el fin de mejorar la calidad de vida de las comunidades en un marco de valores que hace que sean vistas como instituciones confiables y donde se genera conocimiento cuya distribución social es una esperanza de solución a la compleja problemática actual en una sociedad inequitativa, e injusta y donde puede vislumbrarse una sociedad mejor no lograda pero posible.
Con ella inicia un camino de búsqueda permanente para crear condiciones que permitan la formación integral de los estudiantes y profesores, adecuando sus planes y programas de estudio a las demandas históricas de profesionales altamente capacitados en las distintas áreas del conocimiento atendiendo a una formación en valores que lo comprometan como persona, ciudadano y profesional. Teniendo en cuenta esta misión y fines la Universidad Veracruzana emprende en 1998 una transformación gradual pero profunda a un nuevo modelo educativo integral y flexible sustentado en el aprendizaje, en procesos de innovación curricular y en una administración escolar que apoyada en un sistema de red, que se adapta, para hacer más eficiente el proceso educativo. En esta dirección se plantea hoy las reformas de la segunda generación que tienen por objeto mejorar los procesos educativos con una optimización de los recursos humanos y materiales en beneficio de los programas de Facultades e Institutos y con ello consolidar cuerpos académicos que desarrollen proyectos de investigación que generen conocimientos socialmente útiles.
En este contexto en trabajo colegiado presentamos el Plan de Desarrollo de la Facultad de Bioanálisis 2010-2013 que siguiendo las líneas estratégicas del Plan de Desarrollo de la propia Universidad da respuesta a las necesidades de la sociedad y trabaje con el fin de un aseguramiento continuo de la calidad como programa educativo que genere el recurso humano capaz de atender los problemas de los laboratorios clínicos en sus diferentes modalidades, laboratorios de investigación, y desarrolle actividades en el ámbito de la docencia la investigación y la extensión de los servicios. . . . .
Pladea 2009 – 2013 Completo (PDF)
