• Lucero García, responsable de Desarrollo Humano y Capacitación en el Hospital Regional “Luis F. Nachón”, dio plática a estudiantes de Medicina UV 

• Destacó la importancia de atender en el personal de salud sentimientos como tristeza y miedo a través de la salud mental 

Se realizó el Segundo Foro de Salud Mental “Del silencio a la voz”, comenzando con la ponencia de Lucero Espinosa del Hospital Regional “Luis F. Nachón”

David Sandoval Rodríguez 

Fotos: César Pisil Ramos 

11/11/2025, Xalapa, Ver.- Quienes se están formando en las ciencias de la salud deben aprender a conocer y gestionar sus emociones, para evitar condiciones de estrés y poder atender de manera adecuada a sus pacientes, puntualizó Lucero García Espinosa, responsable del Departamento de Desarrollo Humano y Capacitación del Hospital Regional “Luis F. Nachón”. 

La psicóloga, con estudios en psicoterapia y tanatología, impartió la primera conferencia del Segundo Foro de Salud Mental “Del silencio a la voz”, que es organizado por el Comité de Salud de la Universidad Veracruzana (Comsa UV), organización estudiantil de la Facultad de Medicina. 

En el Aula Magna de la Unidad de Ciencias de la Salud, el director de la Facultad, Manuel Iván Covarrubias Díaz de la Vega,  expresó que “este tipo de eventos es necesario que se realicen de manera periódica dado que la salud mental muchas veces no era tomada en cuenta y hemos visto que conforme vamos avanzando evolucionamos como sociedad, pero esta parte de la salud mental nos empieza a dar señales que debemos tomar en cuenta”. 

El director de la Facultad de Medicina, Manuel Iván Covarrubias Díaz, reconoció la labor del Comité de Salud de la Universidad Veracruzana (Comsa UV) para organizar el encuentro

Reconoció además la labor del comité de investigación de Comsa UV por su preocupación e interés de acercar a los especialistas en este tema con los estudiantes, brindando conocimientos a partir de sus experiencias e incidiendo en su formación profesional. 

“Siento que si tomamos en cuenta la salud mental y sabemos pedir ayuda saldremos favorecidos, contrario a si los enfrentamos de manera solitaria”, agregó. 

A continuación, inició la ponencia “Nutre tu mente, nutre tu vida: la salud mental importa”, en la que Espinosa García invitó a las y los presentes a reflexionar, tanto personalmente como con respecto a sus futuros pacientes, cuando son residentes o profesionales para que ejerzan con ética y siempre tengan presente la salud mental de las personas. 

Las y los estudiantes de Medicina atendieron a la primera ponencia del evento

Y agregó que “la salud mental no es sólo del paciente, sino de la familia, del sistema y de su contexto mental; porque cuando atendemos a un paciente en realidad estamos atendiendo todo su contexto; puede que “tú ves a una sola persona, pero en realidad atiendes también a su mamá, su papá, sus hijos, quienes están muy preocupados por él o ella que está en tus manos”. 

Explicó que, con base en la Organización Mundial de la Salud (OMS), en décadas recientes han incrementado los casos de ideación suicida y síntomas de depresión en edades cada vez menores, generando así registros de depresión en niños y adolescentes, lo que conlleva su atención psicológica y psiquiátrica. 

Por ello, recalcó la importancia de conocer las situaciones que detonan el estrés, dado que esta condición de alerta en nuestra persona se ha normalizado y sus consecuencias en nuestro organismo son una baja en el sistema inmunológico, en un deterioro cognitivo y corporal, así como conductas violentas o riesgosas, algunas de ellas relacionadas con las adicciones. 

La psicóloga Lucero Espinosa destacó la importancia de la resiliencia para gestionar emociones y atender las condiciones de estrés

Describió a la salud mental como una condición de bienestar en donde la persona conoce sus recursos personales y los utiliza, los afronta y es resiliente. 

“Esto no quiere decir que la persona tenga conflictos en casa, en el estudio o en el trabajo, en realidad los tiene, pero también posee la capacidad para confrontarlos y resolverlos o adaptarse a la situación cuando no puede resolverlos”. 

El trastorno mental sería lo opuesto, “en donde no hay esa capacidad para responder ante el conflicto de una manera saludable, equilibrada y que de alguna manera no sobrepase a la persona; básicamente, esto sería también la diferencia, la resiliencia que pueda tener la persona”.