Ciencia

Docente estudia alternativas terapéuticas para encefalopatía hepática

  • Marcos Fernando Ocaña estudió el Doctorado en Ciencias Biomédicas e imparte clases en la Facultad de Química Farmacéutica Biológica de la UV 
  • La encefalopatía hepática es un trastorno neuropsiquiátrico asociado principalmente a la cirrosis hepática, que provoca la acumulación de amoniaco en la sangre 

 

Marcos Fernando Ocaña, egresado del Doctorado en Ciencias Biomédicas

Marcos Fernando Ocaña, egresado del Doctorado en Ciencias Biomédicas

 

Paola Cortés Pérez 

Fotos: Omar Portilla Palacios

02/06/2025, Xalapa, Ver.- Marcos Fernando Ocaña Sánchez, docente de la Facultad de Química Farmacéutica Biológica (QFB) y egresado del Doctorado en Ciencias Biomédicas del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Veracruzana (UV), desarrolla una investigación que busca alternativas terapéuticas para la encefalopatía hepática mediante el uso de plantas medicinales y herramientas de quimiometría. 

La encefalopatía hepática es un trastorno neuropsiquiátrico asociado principalmente a la cirrosis hepática. “Al haber una afectación en el hígado, se acumula amoniaco en la sangre, que atraviesa la barrera hematoencefálica y produce alteraciones a nivel neuronal y cognitivo”, explicó. 

En la actualidad no existen tratamientos curativos para esta enfermedad, solo opciones paliativas, por lo que el equipo de investigación en el que participó se propuso explorar opciones basadas en la medicina tradicional. 

A partir de entrevistas etnográficas en comunidades de Xalapa y la zona conurbada, identificaron tres plantas con uso tradicional para afecciones hepáticas: Cuscuta spp. (pelo de ángel), Artemisia ludoviciana (estafiate) y Commelina erecta (hierba del pollo). 

De estas, eligieron la Commelina erecta de flor azul para realizar infusiones acuosas y alcohólicas, replicando el uso tradicional. Las muestras fueron sometidas a análisis de resonancia magnética de protón para identificar perfiles metabólicos, y posteriormente se aplicó quimiometría, una técnica estadística que permite asociar señales químicas con efectos biológicos.

Durante cinco años consecutivos ha recibido el reconocimiento al desempeño docente

Durante cinco años consecutivos ha recibido el reconocimiento al desempeño docente

 

“Utilizamos variables como niveles de transaminasas y conteo neuronal en corteza prefrontal para evaluar el efecto de la planta. Gracias a este enfoque se detectó que ciertos flavonoides derivados de la chaconina podrían estar relacionados con efectos benéficos en modelos animales”, indicó Ocaña Sánchez. 

En los modelos animales, el investigador y docente universitario observó disminución de enzimas hepáticas, reducción de daño neuronal y mejoría en pruebas de memoria a corto plazo. 

“La encefalopatía hepática en humanos también se asocia con alteraciones en la memoria, y en nuestros modelos vimos que hubo una recuperación al suministrarle la planta probada y con silimarina, un hepatoprotector conocido”, detalló. 

Cabe mencionar que la silimarina es el compuesto natural más utilizado en todo el mundo para el tratamiento de enfermedades del hígado, debido a sus actividades antioxidantes, antiinflamatorias y antifibróticas. 

Actualmente la investigación continúa: “Queremos probar otras plantas, aislar metabolitos y enfocarnos también en el eje intestino-microbiota-hígado-cerebro, ya que muchas alteraciones están relacionadas con la producción intestinal de amoniaco”, adelantó Marcos Fernando Ocaña.

Marcos Fernando Ocaña investiga alternativas terapéuticas para la encefalopatía hepática mediante el uso de plantas medicinales

Marcos Fernando Ocaña investiga alternativas terapéuticas para la encefalopatía hepática mediante el uso de plantas medicinales

 

Además de su labor en el desarrollo de investigación de primer nivel, Ocaña Sánchez ha mantenido su compromiso con la docencia: “Mientras cursaba el doctorado, seguí dando clases en la facultad y recibí el reconocimiento al desempeño docente durante cinco años consecutivos”, compartió.