• “A lo largo de 42 años han sido innumerables las anécdotas, pero lo más importante fue la retroalimentación profesor-estudiante” 
• El reto principal de las nuevas generaciones es generar un nuevo código civil para el estado de Veracruz 

Daniel del Ángel Pérez laboró como profesor en la Facultad de Derecho durante 42 años

Paola Cortés Pérez 

Fotos: Omar Portilla Palacios 

25/01/2023, Xalapa, Ver.- Después de 42 años, el viernes 20 de enero el profesor Daniel del Ángel Pérez impartió su última clase en la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana (UV) pues tomó la decisión de jubilarse. 

En entrevista, el profesor recordó que hace más de medio siglo ingresó a la entidad académica como estudiante, donde tuvo la fortuna de tener como maestra a Mercedes Gayosso y Navarrete, fundadora del Seminario de Derecho Romano y Derechos Indígenas en la Facultad. 

“Nos invitó a algunos de sus alumnos a formar parte del seminario, entre ellos estuvieron Socorro Moncayo Rodríguez –quien recientemente se jubiló– y un servidor. Desde entonces estudiamos el derecho romano”, remembró. 

Después, como resultado de las relaciones académicas iniciadas con Gayosso y Navarrete, tuvo la oportunidad de contactar con el profesor Pierre Angelo Catalano, quien ofreció cinco becas para hacer un posgrado en Italia, específicamente en la Escuela de Perfeccionamiento de Derecho Civil. 

“Fui uno de los alumnos que tuvo la oportunidad de estudiar en Italia durante tres años. Al regresar, unos se incorporaron al Instituto de Investigaciones y a otros nos solicitaron incorporarnos como docentes en la Facultad, porque varios profesores se jubilaron.” 

Recomendó a las nuevas generaciones ponerle mucha pasión a sus estudios y a su desempeño profesional

Vengo de familia de maestros 

Daniel del Ángel viene de una familia de maestros; su madre fue profesora de educación primaria por más de 40 años. “No pedí dar clases, el camino profesional me llevó hacia la docencia», expresó. 

El 15 de marzo de 1980 comenzó a dar clases en la Facultad de Derecho de esta casa de estudios y a lo largo de 42 años han sido innumerables las anécdotas y las experiencias, pero lo más significativo fue la retroalimentación profesor-estudiante. 

“Lo más importante como maestro es el interés que muestran los alumnos, es una retroalimentación para nosotros. Convivir con ellos diariamente en clases, el saber que podemos abrirles caminos y ser útiles para ellos, es lo que más nos satisface.” 

Con respecto a la enseñanza que se ofrece en la Facultad, Del Ángel Pérez comentó que el plan de estudios se ha modificado para formar profesionales en el derecho acorde a las necesidades de la sociedad e instituciones del siglo XXI.

El pasado 20 de enero dictó la última cátedra, precisamente en el Seminario de Derecho Romano y Derechos Indígenas, a invitación del profesor José Luis cuevas Gayosso, donde hace más 50 años inició su formación y su vida como abogado. 

Ha formado a 42 generaciones de profesionales en la disciplina, y aunque podía jubilarse desde hace 10 años prolongó su estancia porque le gusta dar clases y además se siente bien física e intelectualmente. 

“Siempre he pensado que uno debe retirarse a tiempo, no me gustaría impartir alguna materia o clase y que se me olviden las cosas, no tener la lucidez de pensamiento que se requiere para dar una buena exposición. Llegó el momento de dar el paso a las generaciones jóvenes, hay muy buenos profesores en esta Facultad.” 

Su última catedra la dictó en el Seminario de Derecho Romano y Derechos Indígenas, donde inició su vida profesional

Derecho, la mejor carrera del mundo 

Para Daniel del Ángel, la carrera de Derecho es la mejor del mundo porque permite perseguir un altísimo valor que es la justicia. Además, el abogado –ya sea en una universidad, empresa, dependencia o en cualquier institución– es una persona que debe dar lo mejor de sí mismo en beneficio de la sociedad, a la que se debe. 

“Es una carrera extraordinaria y si volviera a nacer, la volvería a estudiar.” 

Comentó que en los últimos años la docencia ha tenido cambios importantes no sólo en esta disciplina, particularmente el derecho romano ha funcionado mejor en el derecho civil, que es lo más importante. 

“A mis alumnos siempre les decía que si quisiéramos graficar nuestro sistema jurídico y ponerlo en una pirámide, la base debe ser el derecho civil. Las personas, la personalidad jurídica, capacidad, nombre, domicilio, no sólo se utiliza en el derecho civil, sino en todas las ramas del derecho.

José Luis Cuevas, Daniel del Ángel, Araceli Reyes y Bertha Alicia Ramírez

”No comprenderíamos a plenitud la estructura y la función de nuestras instituciones jurídicas en derecho civil si no entendemos el derecho romano.” 

Del Ángel Pérez compartió que se ha trabajado arduamente para que el derecho romano no sea una materia árida, por el contrario, que sea funcional y sirva a las nuevas generaciones de abogados. 

Dijo que la vida ha cambiado con la presencia de nuevas tecnologías, por lo que el derecho tiene un gran reto: generar un nuevo código civil para el estado de Veracruz, ya que el documento actual tiene muchas lagunas y deficiencias. 

“A la Facultad le debo todo lo que soy, primero me formó profesionalmente y luego me dio la oportunidad de impartir clases” y agregó que es la mejor escuela en la formación de abogados, sin restar méritos al resto de las universidades y facultades públicas y privadas. 

Por último, dijo que con su mentora, Mercedes Gayosso y Navarrete, tiene una deuda moral que espera saldar ahora que ya se jubiló: elaborar un Manual de Derecho Romano y de Derecho Civil. A las nuevas generaciones les recomendó estudiar el derecho con pasión y ponerle mucho amor a su profesión.

Directivos, académicos y estudiantes celebraron al profesor por sus 42 años como docente