- A través del Centro de Investigación en Micro y Nanotecnología (Microna), de la región Veracruz
- El investigador Luis Zamora Peredo habló de la implementación de un sustrato SERS, que permite la detección de biomarcadores para identificar padecimientos cancerígenos
- Buscan fabricar un biosensor que, a partir de una gota de sangre, pueda identificar moléculas asociadas a esta enfermedad

Luis Zamora Peredo, investigador en el Centro de Investigación en Micro y Nanotecnología de la UV
Jorge Vázquez Pacheco
Fotos: Luis Fernando Fernández Carrillo y cortesía Centro de Investigación en Nanotecnología UV
02/12/2025, Xalapa, Ver.- La Universidad Veracruzana (UV), a través del Centro de Investigación en Micro y Nanotecnología (Microna), incide en la detección temprana de cáncer, específicamente en el tracto digestivo, dio a conocer Luis Zamora Peredo, investigador de esta entidad de la región Veracruz, y una de las diez instituciones nacionales que avanzan sistemática y firmemente en el estudio de esta ciencia y su aplicación en la medicina.
Al considerar la técnica SERS (del inglés Surface-Enhanced Raman Scattering: Dispersión Raman Mejorada por Superficie), que emplea nanoestructuras metálicas para amplificar la señal de espectroscopía Raman, es posible detectar y cuantificar moléculas en concentraciones muy bajas. Sus aplicaciones se dan en diagnóstico médico, detección química y monitorización ambiental.
¿Desde qué ángulo se estudia en Microna de Boca del Río?
La nanotecnología, aunque compleja de entender porque manipula materiales a tamaños solo visibles mediante microscopios potentes, es ampliamente utilizada en dispositivos cotidianos como las pruebas de embarazo y las pruebas de anticuerpos para COVID-19, que se valen de la misma para un análisis rápido de pequeñas muestras de sangre. Nuestro proyecto se enfoca hacia la fabricación de un biosensor que, a partir de una gota de sangre, pueda identificar moléculas asociadas al cáncer.

El equipo humano en la investigación sobre nanotecnología en Microna
A diferencia de los análisis clínicos tradicionales que utilizan equipos costosos y complejos para detectar estas moléculas ya conocidas en el ámbito médico (como la glucosa en la diabetes, donde niveles superiores a 120 indican un problema, o niveles específicos que señalan el inicio de cáncer), nuestro objetivo es diseñar un dispositivo más práctico y fácil de usar, similar a un glucómetro o una prueba de embarazo. La especificidad de este biosensor es crucial para evitar diagnósticos erróneos o falsos positivos.
¿Desde cuándo se investiga y trabaja?
No es un campo nuevo. Existen indicios de su uso desde los años sesenta, aunque en dispositivos costosos y de uso nada común. Microna se fundó en 2005 y desde sus inicios incluyó la micro y nanotecnología como áreas clave.
¿Por qué centrarse en el tracto digestivo?
Ello obedece a una colaboración estratégica. Inicialmente, el centro fabricaba nanomateriales sin una aplicación clara y carecía de la experiencia biológica necesaria para abordar el cáncer. Por ello, nos asociamos con los investigadores Enrique Juárez Aguilar, del Instituto de Ciencias de la Salud y quien es especialista en el tema; José María Remes Troche, gastroenterólogo y quien está adscrito al Instituto de Investigaciones Médico Biológicas; Pablo Thomas Dupont e Irma Yadira Izaguirre Hernández, expertos en el área biológica.

Esquema del proyecto para desarrollar un biosensor SERS con nanomateriales
Remes Troche sugirió enfocarse en el tracto digestivo, área de su dominio, y la colaboración fue formalizada en 2023, con aprobación y financiamiento procedente del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Por otra parte, en el posicionamiento importante de la UV a nivel nacional se destaca el apoyo para mantenimiento de equipos costosos, lo cual es un privilegio que otras universidades no tienen.
Los antecedentes indican que usted ha sido tutor de tesis sobre el tema.
Hemos registrado trabajos exitosos; el año pasado, una tesis doctoral sobre nanomateriales y la molécula C125, asociada al cáncer de ovario, ganó un premio a la mejor tesis doctoral; este año, y a nivel maestría, otra tesis sobre la molécula CA 15-3, asociada al cáncer de mama, también fue premiada. Estas investigaciones involucraron la colaboración de expertos como Enrique Juárez Aguilar y Pablo Thomas Dupont.

Los bionsensores útiles para la detección de diversas formas de cáncer
Entendemos que se trata de un asunto sinuoso. ¿Qué habrá de venir?
El desarrollo tecnológico es un proceso largo y complejo. Actualmente, registramos avances a nivel de laboratorio y la siguiente etapa es realizar pruebas con suero o muestras de personas ya diagnosticadas con otras técnicas estandarizadas para comparar resultados. Si se busca comercializar el biosensor, el proceso de patentado es otro paso lento y normativo. Aunque el objetivo es tener un biosensor comercializable, se reconoce que es un proyecto a muy largo plazo, con aproximadamente siete etapas antes de llegar al mercado.
¿Se contempla un panorama prometedor?
Pese a la limitada inversión para desarrollo tecnológico en México, el equipo se mantiene optimista. La investigación es costosa en parte por los equipos y químicos especializados.
Nuestras investigaciones y descubrimientos han sido publicados en artículos de revistas internacionales especializadas, lo que nos permite validar nuestro trabajo y proyectarnos globalmente. Esto es crucial para los estudiantes de maestría y doctorado, ya que brinda oportunidades laborales y de desarrollo profesional.

Cómo se integra un sustrato SERS
El investigador Zamora Peredo enfatizó la importancia de la difusión científica, incluso para niños; explicar conceptos como nanopartículas o nanomateriales puede parecer complejo, pero esto funciona admirablemente para estimular la fértil imaginación de los pequeños.
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