• Alumnos que realizan investigación en torno a los primates, mencionaron que la incertidumbre laboral y la obtención de recursos, son otras cuestiones para superar 

La mesa de discusión se realizó en el segundo día de actividades del Foro de Primatología 2025 de la UV

Carlos Hugo Hermida Rosales 

Fotógrafo: César Pisil Ramos 

03/10/2025. Xalapa, Ver. Alumnos de diversas instituciones de educación superior que desarrollan proyectos en torno a los primates, coincidieron en que el trabajo de campo es uno de los principales retos a vencer, al participar en la mesa de discusión “La voz de los estudiantes en la primatología”, realizada en el auditorio de la Dirección General de Investigaciones (DGI) de la Universidad Veracruzana (UV). 

El evento ocurrió en el marco del Foro de Primatología 2025 organizado por el Instituto de Neuroetología, y fue moderado por Ariadna Rangel Negrín, catedrática de la entidad académica.  

Cristina Jasso del Toro, de la Universidad Nacional Autónoma de México, declaró que el trabajo de campo puede representar mucho esfuerzo, pues pasar horas en condiciones extremas para vigilar a los primates es algo que requiere energía.  

“Si no cuentas con un grupo que te aliente en los días difíciles, la situación se vuelve complicada”, enfatizó.  

La estudiante comentó que la actualización es fundamental en esta labor, porque las nuevas herramientas permiten procesar los datos colectados y obtener información útil con menos financiamiento.

Los estudiantes abordaron diversos retos que implica la investigación antropológica

“La tecnología nos da la oportunidad de generar vínculos con expertos de otras entidades, lo cual es valioso”, expresó. 

En su intervención, Víctor Beltrán Francés, del Instituto de Neuroetología, expresó que la primatología es un área importante que exige autoconocimiento, para saber dónde se encuentran nuestros límites. 

El estudiante afirmó que el trabajo de campo puede ser una experiencia bastante ruda, en la que si no te sientes acompañado por un equipo la situación se complica.  

“La red de colaboración es esencial para sentirse reconocido y escuchado, porque por cuestiones emocionales y sentimentales muchos abandonan su proyecto, aunque sea el sueño de su vida”, manifestó.  

Verónica Torres Solórzano, de la misma entidad académica, explicó que, pese a que cada época tuvo retos distintos, los primatólogos de la vieja escuela se encargaron de formar líneas base, por lo cual a las nuevas generaciones les toca innovarlas.

El evento fue presenciado por numerosos docentes y alumnos

“Ya no solo se trata de abordar el análisis de la conducta, sino combinarlo con fisiología y otras áreas en una labor multidisciplinaria”, dijo. 

La joven mencionó que las tecnologías ayudan en gran medida a las investigaciones, pero las generaciones anteriores deben acceder a utilizarlas. 

“La obtención de recursos es otro reto enorme que superar, y para ello es indispensable manejar la presión y fundamentar el proyecto de una manera óptima”, agregó. 

Finalmente, Natalia Romero Santiago, de la Facultad de Biología, enfatizó que el balance entre trabajo de campo y preocupaciones personales es primordial al momento de incursionar en el área de primatología.  

“La interacción es básica, y si bien encontrar a aliados adecuados que te acerquen a tu objetivo es complicado, no es algo descabellado imposible de lograr”, aseguró.