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Justicia restaurativa, alternativa ante cultura punitivista

  • Francisca Lozano presentó prácticas restaurativas aplicadas en España y su pertinencia en contextos como México y América Latina 
  • Propone una visión centrada en la reparación del daño y la participación de víctimas y ofensores 

 

Francisca Lozano Espina, profesora del Grado en Criminología de la Universidad “Francisco de Vitoria”

 

Paola Cortés Pérez 

Fotos: Omar Portilla Palacios 

05/08/2025, Xalapa, Ver.- La justicia restaurativa propone un paradigma complementario e innovador frente al sistema penal tradicional, al poner el foco en el daño provocado por el delito y en su reparación, en lugar de centrarse únicamente en el castigo, así lo expresó Francisca Lozano Espina, profesora del Grado en Criminología de la Universidad “Francisco de Vitoria”, Madrid, España, al dictar la conferencia “Justicia restaurativa: Prácticas comunes”. 

La actividad académica fue organizada por el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Veracruzana (UV), en colaboración con la Universidad Anáhuac de Xalapa, y tuvo como propósito difundir las prácticas más comunes de justicia restaurativa aplicadas en España, así como generar un espacio de reflexión sobre su pertinencia en contextos como el mexicano y latinoamericano. 

Lozano Espina subrayó que tanto en México como en España predomina una cultura punitiva, por lo que es urgente abrir espacios que permitan sensibilizar a la ciudadanía, y en especial a la comunidad universitaria, sobre formas alternativas de gestionar el delito. 

“Es importante transmitir esta idea y abrir las mentes, así que en un contexto universitario es esencial, porque los futuros profesionales tienen la responsabilidad de difundir la justicia restaurativa”, enfatizó.

 

Arturo Miguel Chípuli Castillo, director del IIJ, dio la bienvenida a la académica española a la UV

 

Explicó que este enfoque permite devolver protagonismo a las personas involucradas en el conflicto –víctimas y ofensores– y posibilita que el daño causado se repare; por ello, llamó a quienes estudian derecho o se dedican a la gestión del delito a asumir el compromiso de impulsar cambios legislativos e institucionales. 

“Si no cambiamos las leyes es muy difícil que pueda haber una verdadera incorporación de la justicia restaurativa en el sistema judicial”, advirtió. 

Asimismo, abordó algunas de las prácticas más extendidas sobre justicia restaurativa en su país, como la mediación penal, también conocida como mediación víctima-ofensor; y mediación penitenciaria, implementada desde 2005 en cárceles españolas, donde se promueve la resolución de conflictos entre personas privadas de la libertad. 

Destacó que estas prácticas también han comenzado a desarrollarse en nuestro país, especialmente en el Estado de México. 

También habló de experiencias más excepcionales, como los encuentros restaurativos entre víctimas y exintegrantes del grupo Euskadi Ta Askatasuna (ETA), que buscaron facilitar el diálogo y la reparación emocional tras acciones de violencia extrema. 

 

Francisca Lozano habló de las prácticas restaurativas que se implementan en España

 

Otra práctica que compartió fue el programa “Restauravidas: integración en el país de origen”, que involucra a personas españolas encarceladas en el extranjero –incluido México–, y que desde 2018 se implementa en dos prisiones de Madrid, una de ellas exclusivamente para mujeres. 

Este proyecto, explicó, trabaja con personas detenidas por delitos relacionados con el tráfico de drogas y que han sido repatriadas a España después de cumplir condenas en países como Brasil, Perú o Malta. El enfoque del programa combina cuatro ejes: el restaurativo, el psicológico (coordinado por la propia Francisca Lozano), el jurídico y el reinsertador. 

Francisca Lozano concluyó que, si bien la justicia restaurativa no pretende sustituir completamente el sistema penal tradicional, sí ofrece alternativas más humanas, centradas en la reparación del daño y en la construcción de una justicia más inclusiva y participativa. 

“Cuantos más profesionales jurídicos estén sensibilizados con esta visión, más posibilidades habrá de transformar el sistema”, finalizó.