Ciencia

UV colabora con U. de Cádiz en estudios de cuidadores de niños con TEA

  • Francisco Javier Rosas Santiago compartió experiencias sobre un estudio enfocado en cuidadores de niños con autismo 
  • También participa Lisbeth Vázquez Rocha, alumna del Doctorado en Psicología 

 

Francisco Javier Rosas Santiago, investigador del IIIP-UV, realiza una estancia en la Universidad de Cádiz, España

 

Claudia Peralta Vázquez 

Fotos: Cortesía Francisco Javier Rosas 

30/01/2023, Xalapa, Ver.- Francisco Javier Rosas Santiago, investigador del Instituto de Investigaciones Psicológicas (IIP) de la Universidad Veracruzana (UV), realiza una estancia en la Universidad de Cádiz, en España, para el intercambio de conocimientos respecto a una investigación enfocada en el bienestar de cuidadores de niños con trastorno del espectro autista (TEA). 

Desde el 25 de noviembre y hasta el 15 de enero, el investigador interactuó con estudiantes y pares del grupo de trabajo “Neuropsicología y psicología experimental”, así como del Instituto Universitario de Investigación para el Desarrollo Social Sostenible, específicamente con José Miguel Mestre Navas y Gabriel González de la Torre Benítez, encargado de la gestión de investigación, y vicedecano de la Facultad de Ciencias de la Educación, respectivamente. 

En esta estancia participa también Lisbeth Vázquez Rocha, alumna del Doctorado en Psicología, a quien Rosas Santiago dirige en un estudio derivado de dicha investigación. Ella se forma en técnicas de análisis cuantitativo más detalladas. 

El contacto surgió en el marco de un convenio que la UV tiene con la Universidad de Cádiz, y del cual han surgido diferentes intercambios. 

La primera aproximación se dio en 2018, cuando Rosas Santiago viajó a ese país para el intercambio de datos cualitativos sobre una investigación basada en mujeres cuidadoras de niños con algún tipo de discapacidad. 

Actualmente, en lo que va de la estancia, se han enfocado en el análisis de datos y discusión de hallazgos con una perspectiva interdisciplinaria. También, han hecho énfasis en las similitudes de las consecuencias del trabajo informal de cuidadoras y cuidadores, tanto de México como de la región de Andalucía. 

“Nos hemos dado cuenta que en ambos países sí hay valores culturales que median el desgaste, la cultura provee de ciertos mecanismos que hacen que las mujeres asuman el rol de cuidadoras de menores que tienen algún padecimiento o grado de dependencia.” 

Los especialistas de la UV también se han entrenado en algunas técnicas para realizar análisis especializados en el ámbito de las intervenciones psicológicas. 

A la par, llevan a cabo gestiones para el desarrollo de una capacitación de educación continua entre catedráticos españoles y mexicanos, para el abordaje de temas relacionados con la psicología clínica y de la salud. 

 

Junto con sus pares de ese país, Rosas Santiago intercambia conocimientos sobre investigación de cuidadores de niños con TEA

 

IIP-UV realizó intervención para cuidadores de niños con TEA 

Francisco Javier Rosas dio a conocer que durante la pandemia iniciaron la investigación consistente en evaluar el bienestar psicológico de personas que cuidaban en casa a un niño con TEA. 

De ello derivó una intervención psicológica en línea bajo el enfoque cognitivo conductual, la cual ayudó a 60 mujeres mexicanas a disminuir su nivel de sobrecarga, ansiedad, depresión, estrés y mejorar su calidad de vida. 

Se trata de un estudio experimental en el que se tuvo un grupo control y otro al que se le dio la intervención. Luego de esto se dio un seguimiento de seis meses. 

El investigador destacó el resultado, pues se logró determinar que este tipo de intervenciones son de utilidad tanto para cuidadores de personas con algún problema psiquiátrico, como de TEA.

“Este estudio abona a favor de la evidencia de que las intervenciones cognitivo-conductuales pueden apoyar a las personas que todos los días enfrentan diferentes desafíos por las demandas del cuidado de personas con alguna dependencia.” 

Normalmente el 80% de quienes cuidan son mujeres, madres de los infantes, muchas de ellas tuvieron que dejar de trabajar para asistirlos, casi todas dependen económicamente de alguien más. 

“La gran mayoría dice que ha sido una carrera de largo alcance por el hecho de llevarlos diariamente al tratamiento, vigilar sus avances y manejar los problemas típicos de la sintomatología del TEA. 

 

Lisbeth Vázquez Rocha, alumna del Doctorado en Psicología de la UV, se forma en técnicas de análisis cuantitativo más detalladas

 

Por si fuera poco, se encuentran en una situación de alta vulnerabilidad tras haber renunciado a sus tiempos de ocio, oportunidades de desarrollo profesional o personal, es un sector olvidado y estigmatizado. 

“Creo que la intervención que les dimos ayudó a que lo resignificaran, más que como una situación adversa, como un reto a resolver, enfrentar y como una gran oportunidad para aprender.” 

De igual forma, se diseñaron estrategias de apoyo en casa, con el fin de que las y los cuidadores tuvieran acceso sin tener que salir de sus domicilios, pues muchos de ellos no tienen con quien dejar a sus hijos. 

Anteriormente había grupos de apoyo, pero no un diseño de intervención específico ni tampoco investigación al respecto, dijo Rosas Santiago. 

Por ello en la estancia los especialistas españoles apoyaron a los de la UV a discutir y entender una perspectiva más amplia de los resultados del trabajo, puesto que en ese país existen más estudios sobre el tema. 

De manera conjunta, esperan realizar una publicación y así proyectar a México como un país vanguardista donde se desarrolla investigación orientada hacia intervenciones psicológicas. 

“Hay evidencia de que la salud mental del cuidador impacta la calidad de los cuidados, y si el cuidador está bien puede ayudar a que el niño maneje mejor su síntoma y lo apoye de manera más efectiva.”