• Alumnado e investigadores presentaron proyectos de agricultura sostenible 

• Hablaron de alternativas para la agricultura veracruzana, la conservación del entorno y el fortalecimiento del conocimiento comunitario 

Eder López habló sobre el manejo agroecológico para el control de la plaga de nematodos

Paola Cortés Pérez 

Fotos: Omar Portilla Palacios 

19/11/2025, Xalapa, Ver.- En el XI Simposio de Otoño “Crisis ambiental, bienestar social y estabilidad ecológica”, que tuvo como sede la Facultad de Biología de la Universidad Veracruzana (UV), estudiantes e investigadores compartieron resultados de proyectos que buscan alternativas más sostenibles para la agricultura veracruzana, la conservación del entorno y el fortalecimiento del conocimiento comunitario. 

Aunque cada ponencia tocó un tema distinto, todas coincidieron en que cuidar el suelo y el ambiente es clave para el bienestar de las personas y la estabilidad ecológica. 

La primera presentación, “Manejo agroecológico para el control de nematodo de fincas cafetaleras en Jilotepec, Veracruz”, a cargo de Eder López Villar, mostró una opción sencilla y accesible para combatir los nematodos, plagas que afectan seriamente las raíces del café. 

Contó que el uso de extractos de Ricinus communis (higuerilla) permitió reducir su presencia sin necesidad de químicos caros o difíciles de conseguir. En tres fincas del municipio, las poblaciones disminuyeron entre 42 % y 70 %, lo que demuestra que los métodos agroecológicos sí funcionan en campo. 

Fernanda Aguilar presentó el trabajo “Comunidades fúngicas y salud del suelo en sistemas agroecológicos y convencionales de papa”

Además, destacó la importancia de que los productores puedan aplicar estas técnicas por sí mismos, sin depender de insumos externos. Compartió que muchos cafeticultores ya están buscando transitar hacia prácticas más sustentables y este tipo de alternativas fortalece su autonomía, protege el suelo y reduce el impacto ambiental de la producción cafetalera. 

Posteriormente, Fernanda Aguilar Rodríguez presentó “Comunidades fúngicas y salud del suelo en sistemas agroecológicos y convencionales de papa”, estudio desarrollado en la comunidad Los Pescados, municipio de Perote, donde analizó el suelo de dos tipos de manejo —agroecológico y convencional—; encontró que los cultivos con prácticas sustentables albergan más hongos benéficos, mayor actividad microbiana y mejores condiciones de salud del suelo, lo cual significa que estos sistemas ayudan a mantener la fertilidad natural y disminuyen la necesidad de fertilizantes químicos. 

Explicó que muchos de los hongos encontrados tienen la capacidad de hacer disponible el fósforo del suelo, nutriente esencial para el crecimiento de las plantas. Comentó que este tipo de investigaciones abre la puerta al desarrollo de biofertilizantes basados en microorganismos nativos, lo que podría beneficiar tanto a productores como al ambiente.

Estefanía Ávila documentó las diferentes especies llamadas capulín presentes en la sierra de Chiconquiaco

La tercera ponencia fue “El complejo etnobotánico de las especies de capulín en un gradiente altitudinal del centro de Veracruz, México”, presentada por Estefanía Ávila Mendoza, en el que documentó las diferentes especies llamadas capulín presentes en la sierra de Chiconquiaco, sus usos tradicionales y la forma en que las comunidades los recolectan y comercian. 

Identificó que el capulín de mayo es el más apreciado por su sabor, disponibilidad y valor cultural; además, es uno de los que más se venden en mercados locales e incluso fuera del estado. También explicó que estas especies se siguen recolectando en zonas silvestres y forman parte importante de la alimentación y la economía regional. 

La investigación resalta la estrecha relación entre las comunidades y sus recursos naturales, así como la necesidad de seguir documentando estas prácticas para evitar que se pierdan ante cambios ambientales y sociales. 

Guadalupe Barradas presentó el avance de la investigación sobre cómo los hongos del suelo ayudan a las plantas a aprovechar el fósforo

Por último, Guadalupe Barradas Navarrete presentó el avance de su tesis “Hongos solubilizadores de fosfato: respuesta enzimática y crecimiento en presencia de metrifos”, donde detalló que ciertos hongos del suelo ayudan a las plantas a aprovechar el fósforo, un nutriente clave para su desarrollo; sin embargo, al probar el efecto del pesticida Metrifos —uno de los más usados en cultivos de papa— descubrió que, en las dosis habituales, este producto impide totalmente el crecimiento de los hongos benéficos. 

Señaló que esta situación puede tener consecuencias graves para la salud del suelo y la productividad a largo plazo, pues estos hongos participan en la descomposición de materia orgánica y en la disponibilidad de nutrientes, de ahí la importancia de promover prácticas agrícolas que reduzcan el uso excesivo de pesticidas y fomenten alternativas más sostenibles que no dañen la vida del suelo.