Estudiantes

La identidad y el género también están racializados: especialista

  • Tito Mitjans, académico y activista, impartió taller en la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana 
  • Destacó que la población afromexicana apenas comienza a autoconocerse 

 

Tito Mitjans Alayón, académico de la Universidad Iberoamericana, impartió un taller en la Facultad de Antropología

 

Texto y fotos: David Sandoval Rodríguez 

20/06/2025, Xalapa, Ver.- Las identidades se construyen a partir del género, pero también a partir de las percepciones raciales, por ello es importante reflexionar sobre la concepción que se tiene de las poblaciones africanas e indígenas, señaló Tito Mitjans Alayón, académico de la Universidad Iberoamericana y doctor en Estudios e Intervención Feministas de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas. 

El activista trans no binario, afrocubano e integrante del Colectivo para Eliminar el Racismo en México (Copera), impartió el taller “Lo que se ve, ¿no se pregunta? Críticas afrotransfeministas a la masculinidad hegemónica”, dirigido a estudiantes de la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV). 

Desde el siglo XVI se extendió la versión de que las comunidades indígenas estaban en pugna con las comunidades negras de esclavos libertos, cuando en la realidad, entre más investigaciones analizan este aspecto se descubre que en muchos lugares estas comunidades son en realidad afroindígenas, es decir, que no vivieron separadas.

 

El docente y activista mencionó ejemplos de hipermasculinización racista como Gaspar Yanga

 

En la actualidad, las nociones imperantes sobre los hombres negros se basan en una hipermasculinización, mientras que a los indígenas, también por su color de piel, se les concibe como débiles, incapaces y faltos de inteligencia. 

Sin embargo, también se ensalzó a algunos personajes negros para incluirlos en el discurso hegemónico de la historia de México, como es el caso del esclavo liberto Gaspar Yanga, quien es considerado el fundador de la primera comunidad de “cimarrones” –esclavos africanos que huían de las plantaciones y colonias para establecer comunidades– en nuestro país. 

En su caso, la hipermasculinización es acorde con una visión heroica del personaje, porque esta también es afín al discurso de Estado que reconoce la presencia africana en los orígenes del virreinato, cuando durante más de dos siglos dicha población estuvo invisibilizada, como se constata en los censos de población del siglo pasado.

 

En el pasado se mantuvo una visión que hacía enemigas a las comunidades indígenas de las africanas, comentó

 

En todos los países de Latinoamérica, cuando menos de la región Caribe, hay un reconocimiento al primer levantamiento de “cimarrones”, porque abona a un discurso nacional de inclusión, cuando en la realidad sufrieron condiciones de exclusión y discriminación. 

“Ser excepcionales por estar en la historia también es una idea muy racista”, apuntó. 

Las relaciones raciales y sus características también forman parte de la construcción de identidad de género y por ello puede decirse que tales identidades están racializadas, es decir, que se les incluyen categorías raciales.

 

Las personas morenas y negras han sido criminalizadas por su apariencia, recalcó Tito Mitjans

 

“La idea del hombre negro en México es una idea que ha cambiado, ahora decimos que la comunidad afromexicana existe, y tenerlos en un aula es casi una cuestión excepcional, pero hay una activación del racismo antinegro muy fuerte.” 

Comentó además que la población afromexicana está en un proceso de autodescubrimiento y autoidentificación. 

“Lo que sí sabemos es que hay un racismo que, a todo aquel que es moreno u oscuro, lo meten preso; si hiciéramos un trabajo de estadística podríamos ver que la mayor parte de las personas en prisión son hombres morenos, indígenas, afroindígenas, y esto se debe a un proceso de criminalización de lo que es considerado como negro.”