Universidad Veracruzana

Skip to main content

LA NOBLEZA DEL CAFÉ (Llegó a su final)

 

TÍTULO-NOBLEZA DEL CAFÉ

Gabriela Guzmán Gómez*

BALAZO 02Alrededor de una taza de café se tejen alianzas, cierran negocios, definen estrategias, declaran pasiones, se hacen reclamos y también se lloran tristezas, se despide a nuestros deudos.

El café ha sido testigo mudo de miles de eventos expresados en varios idiomas y en distintas latitudes. Producto cosmopolita que recorre todos los rincones del mundo, lleva en su interior el trabajo de miles de campesinos: hombres, mujeres, niños, quienes bajo la sombra que cobija a los cafetos, siembran, limpian, podan y cortan este grano.

Antes de llegar al paladar, el café pasa por varias manos: la mano fuerte y ruda del campesino que lo plantó y cuidó; la mano tierna, frágil, suave o callosa de los niños, mujeres y hombres que dejaron sus casas, pueblos y familias para ir a cortarlo; la mano unas veces oscura y otras paternal del acaparador; las manos firmes de los transportistas, industriales y bodegueros; la mano del benefactor; y, finalmente, la mano fina y tersa del exportador, que si bien nunca lo tocó, con su pluma firmó el convenio que hizo posible su llegada a la mano que lo espera con ansia para empezar el día.

En torno al café hay vida, muchas vidas. Hay trabajo, cultura, ansiedad, dinero, riqueza, contrastes, irresponsabilidad e injusticia. También hay resistencias que se tejen en las comunidades, las cuales forman redes que hacen propuestas buscando no ser despojadas.

 

La nobleza de su cultivoBALAZO 01

En el campo, el cafetal es benéfico para la naturaleza: las matas cubiertas por árboles que les proporcionan sombra asemejan un bosque, el cual protege al suelo, retiene el agua, nos da aire limpio; asimismo, en él anidan aves, es refugio de flora y fauna.

Asimismo, el café fue un “alivio” para los terratenientes, pues con el reparto de tierras se quedaron con los suelos más planos y accesibles, mientras que a los campesinos se les dotó de terrenos en laderas y montes, donde difícilmente crece otro cultivo además de éste.

Ante la miopía gubernamental de abandonar el campo, el cafetal también ha sido un paliativo para las familias de la región. A decir de sus integrantes, “el café es muy noble”. A diferencia de otros cultivos, “nosotros siempre tenemos café para vender y también siempre hay quien nos compre. A veces vendemos muy barato, otros años no tanto. Podemos vender en cereza, también le damos su beneficio y lo guardamos en café verde para esperar un mejor precio. Unos años sí sube el precio, pero otros no”.

La nobleza de esta planta se observa también cuando se abandonan las fincas por los bajos precios; entonces los cafetaleros salen semanas, meses o años a buscar trabajo, pero al momento de regresar, “con una limpiada a la finca vuelven a florecer las matas”.

La roya, punto de quiebre

café savoureuxA lo largo de muchos años ha sido posible que en la mesa del más exigente consumidor nunca falte una taza de excelente café. Sin embargo, este hecho ha encubierto los contrastes e iniquidades entre los muchos actores del mundo cafetalero.

La generosidad del cultivo de este grano tiene su contraparte en la mezquindad del mercado, en la deslealtad del gobierno, en el empobrecimiento del cafeticultor y la migración de los jóvenes; en la aridez de los suelos, en la pasividad de la universidad y la academia, y en la ausencia de tecnologías adecuadas.

La nobleza del café se desdibujó con la propagación de la roya, que este año hizo que se perdiera más de la mitad de la producción. Las fincas, como nunca antes, quedaron sólo en varetas desnudas, el verdor se fue apagando poco a poco, dejando un paisaje desolado en las comunidades.

Esta plaga sorprendió a los pequeños productores. ¿También a los grandes, al gobierno, a la academia, a los industriales? ¿Qué hicieron para enfrentar esta enfermedad anunciada?

La entrada de la roya no es sólo una infestación, implica cambios que vemos venir. El café más susceptible a ella es el que tiene mejor calidad, el que crece bajo la sombra de frutales, de encinares; el que por años han sembrado los pequeños productores. Si bien hay variedades que hasta ahora han tolerado la enfermedad, éstas no satisfacen los paladares acostumbrados a la calidad de un café de altura.

Tales variedades requieren menos sombra y tienen una vida más corta. En la actualidad un gran número de productores las buscan. ¿Qué pasará con los bosques de cafetos, con el agua y suelo que retienen, con la calidad del grano? La entrada de la roya no es sólo una infestación, es un punto de quiebre.

Ausencias que deben revertirseSTAIN 01

Estamos viendo ahora lo que no querían que viéramos, la roya se diseminó y con ella afloraron las ausencias que desde hace tiempo acompañan al aromático: un precio justo que permita el buen vivir de las familias que lo trabajan y que facilite un manejo integral de las fincas con técnicas agroecológicas; políticas públicas nacionales e internacionales que fortalezcan la cafeticultura local y regional; investigación, educación y docencia que acompañen y fortalezcan las propuestas de los cafeticultores (mujeres y hombres) y de sus organizaciones; un enfoque en la calidad del producto y un mercado justo donde los pequeños productores y sus organizaciones tengan cabida equitativa. Estas ausencias habrá que revertirlas.

La roya llegó y desnudó tanto el paisaje de los cafetales como las inequidades. Si llegó para quedarse ¿qué sigue?, ¿qué estrategias y sinergias despertará?, ¿qué resistencias veremos?, ¿qué compromisos asumiremos y asumirá cada uno de los actores? Tal vez, ante la ausencia de la taza de café en la mesa, despertaremos más pronto para ver la importancia original de los cafetaleros en esa cadena.

Descargar versión impresa

*Estudios Rurales y Asesoría Campesina A. C. (ERA); Doctora en Desarrollo Rural, ha combinado la investigación con proyectos de desarrollo sustentable en comunidades y organizaciones sociales del medio rural; actualmente es Coordinadora del Proyecto “Conservación de Aguas y Suelos para el desarrollo comunitario en el Corredor Limones-Tlapexcatl”.

Correo: gabguzgo@gmail.com

Diseño: L.D.G Francisco J. Cobos Prior

granos de café sobre fondo blanco

 

Enlaces de pie de página