• Karen Joseline Cuéllar Sánchez, estudiante de la Facultad de Enfermería UV, realizó investigación para su trabajo recepcional, que señala que aceptan este procedimiento por salud 

• En México, se calcula que una de cada tres mujeres se someterá a una histerectomía antes de los 60 años   

Karen Joselín Cuéllar Sánchez realizó una investigación sobre afrontamiento de mujeres con histerectomía

José Luis Couttolenc Soto 

Fotos: Luis Fernando Fernández 

26/06/2025, Xalapa, Ver.- En la actualidad existe una controversia en torno a la respuesta de afrontamiento y adaptación de las mujeres que se han sometido al proceso de histerectomía, de acuerdo con un estudio de tipo cuantitativo realizado por Karen Joseline Cuéllar Sánchez, alumna de la Facultad de Enfermería de la Universidad Veracruzana (UV). 

Para acreditar su experiencia recepcional, la joven universitaria realizó la investigación “Nivel de afrontamiento y adaptación en mujeres con histerectomía”, bajo la dirección de Sandra Vázquez Hernández, catedrática de esa entidad académica. 

Explicó que la histerectomía es una de las cirugías ginecológicas más practicadas a nivel mundial, considerada la segunda más frecuente después de la cesárea.  

Este procedimiento quirúrgico consiste en la resección del útero en su totalidad, incluidos el cuerpo y cuello uterino; se realiza a través de tres vías: abdominal, vaginal y laparoscópica.  

Está indicada cuando existen lesiones uterinas, endometriales, ováricas y cervicales, y se practica para tratar enfermedades benignas como miomas, endometriosis, hemorragias, dolor y masas anexiales, que afectan y deterioran la calidad de vida.   

“La histerectomía se ha relacionado con efectos adversos en salud mental e incremento en el riesgo de mortalidad por diferentes padecimientos.”

La académica Sandra Vázquez Hernández expresó que el tema de la histerectomía es poco abordado en relación con los signos y síntomas que presenta

En México, se calcula que una de cada tres mujeres se someterá a este procedimiento antes de los 60 años.  

Como parte de su trabajo de investigación, Karen Joseline realizó entrevistas con mujeres con histerectomía, quienes identificaron este proceso quirúrgico como un alivio a su estado físico, además de aceptarlo como una solución a su salud. 

Detalló que es una cirugía de alto nivel y la orientación recibida por el personal de salud es clave para el afrontamiento y adaptación, el cual es el mismo tanto para las mujeres nulíparas (que nunca han parido) como multíparas; por lo tanto, se considera de bajo riesgo y los factores afectados dependerán de la vivencia y perspectiva de cada mujer. 

Cuéllar Sánchez propone el diseño de un instrumento que mida el nivel de afrontamiento y adaptación englobando temas como calidad de vida física, salud mental, sexualidad y autoestima; fortalecimiento en la aplicación de intervenciones educativas para mujeres con histerectomía, enfocado también a las personas cercanas a ella como la pareja sentimental, familia, hijos, etcétera, según sea el entorno, así como campañas publicitarias para informar sobre cuidados de la salud integral en mujeres histerectomizadas. 

Por su parte, la directora de la tesis, Sandra Vázquez Hernández, refirió que el tema de la histerectomía es poco abordado en relación con los signos y síntomas que presenta, que en ocasiones pasan desapercibidos, pero que de alguna manera afectan la dinámica familiar. 

Indicó que hay factores que se pueden disminuir a través de la información, orientación, apoyo, promoción e identificación temprana de esa necesidad que algunas mujeres tienen. 

Precisó que la histerectomía tiene sus indicaciones específicas desde el punto de vista del área médica, y cuando se recomienda realizarla es porque hay una razón, debe actuarse de manera inmediata; sin embargo, preguntó ¿qué pasa con esas mujeres después del procedimiento quirúrgico?