Cultura

Lucha libre: una expresión de violencia aceptada

  • “Representa un fenómeno social interesante y pertinente para poder historiar”: Eker Jael González Castañeda, alumno de la Facultad de Historia 
  • Estudiantes presentaron investigaciones dentro de la Semana de la Historiadora y el Historiador 2023

 

Alumno de Historia en la UV abordó la lucha libre en México como un fenómeno social

 

José Luis Couttolenc Soto 

Fotos: César Pisil Ramos y cortesía Eker González Castañeda

14/09/2023, Xalapa, Ver.- Eker Jael González Castañeda, alumno de séptimo semestre de la Facultad de Historia de la Universidad Veracruzana (UV), calificó a la lucha libre como una expresión de violencia aceptada, al tiempo que representa también un fenómeno social interesante y pertinente para historiar. 

El joven universitario participó en el segundo día de actividades de la Semana de la Historiadora y el Historiador 2023, que del 11 al 14 de septiembre se desarrolló en el Auditorio “Jesús Morales Fernández” de la Unidad de Humanidades. 

En la Mesa 3 “Una historia en movimiento: danza y deporte”, presentó su trabajo de investigación titulado “90 años de lucha libre en México. Cultura y violencia desde la primera cuerda 1933-2023”. 

 

Eker Jael González señaló que la lucha libre es un fenómeno social interesante y pertinente para historiar

 

González Castañeda mencionó que con su trabajo pretende poner entre las cuerdas la parte cultural de la lucha libre y, al mismo tiempo, crear un espacio sobre las diversas formas de violencia que viven los actores (luchadores y luchadoras) arriba del cuadrilátero, precisando la violencia física y social que viven no sólo en los vestidores, sino también la de tipo laboral y de género. 

Señaló que las reacciones que se registran entre el público son igualmente objeto de estudio, “porque la lucha libre es un ritual en el que ocurre una catarsis por parte de la afición cuando su luchador o luchadora favorita está arriba del ring; emite gritos y palabras altisonantes que forman una catarsis colectiva que ayuda a olvidar sus problemas”. 

 

El trabajo analiza 90 años del deporte en México

 

Por su parte, Fátima Avendaño Jiménez, estudiante del tercer semestre de la misma entidad universitaria, expuso su trabajo “Hablemos de fandango y su rostro mestizo” e indicó que en la historia de este baile –a través del siglo XVI hasta la mitad del XX– surgieron hechos que marcaron su historia y la de Veracruz. 

Dijo que sin tener una definición específica se le asocia a una fiesta comunitaria que se practicaba principalmente entre la gente del campo, popularizándose en el nuevo mundo en los siglos XV y XVI. 

El origen del fandango se remonta a la época colonial del continente americano y fue traído por los andaluces, lo que hace tener influencia europea y de las culturas prehispánica y africana, a las que se involucró la caribeña, con lo que nació la imagen de Veracruz, en donde se encuentra el ritmo y verso, así como el nombre de las canciones, dando así identidad al estado. 

 

Fátima Avendaño Jiménez habló del origen del fandango

 

Mario Cortés López, de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), presentó un trabajo de investigación sobre accidentes viales en donde se han visto involucrados ciclistas. 

Explicó que entre la comunidad ciclista existe el término “bicicleta blanca”, el cual significa que cuando hay una pendiendo de un sitio es que allí un ciclista fue herido o perdió la vida; esto es un recordatorio para que exista respeto y precaución y que no se sigan registrando estos hechos que enlutan familias. 

Destacó que el problema no es privativo de la Ciudad de México, se puede observar desde Baja California hasta Quintana Roo, por lo que con su trabajo busca enviar un mensaje a las autoridades locales, estatales y federales para que se trabaje más sobre el tema.

 

Mario Cortés López se refirió al programa “Bicicleta blanca”, que pide mayor seguridad para los ciclistas

 

“Transitar por las calles debe ser una cuestión segura; en los reglamentos de tránsito hay una pirámide vial que encabeza el peatón, y le sigue el ciclista; además, la Constitución contempla respetar la jerarquía vial. 

”Seamos activos en el sentido de modificar no solamente las leyes o los artículos, sino las cuestiones viales”, concluyó.