• El connotado pintor mexicano, acompañado de su colega y amigo Jesús Miranda, desarrolló dos murales colectivos en la Unidad de Artes, junto con una treintena de estudiantes de la FAP 
• Citlaltépetl y El amanecer de nosotras, iniciarán una serie de intervenciones artísticas en entidades de la Universidad Veracruzana  

“Mi pintura es abstracta, pero hago cosas que tocan temas indirectamente” dijo Gabriel Macotela

Beatriz Sánchez Zurita inauguró dos murales colectivos en la Unidad de Artes

Karina de la Paz Reyes Díaz y José Luis Couttolenc 

Fotos: Rujiro Temis y Luis Fernando Fernández 

08/09/2022, Xalapa, Ver.- Gabriel Macotela, pintor, escultor, grabador y dibujante con reconocimiento nacional e internacional, realizó dos murales en la Unidad de Artes de la Universidad Veracruzana (UV), en colaboración con alrededor de una treintena de estudiantes de la Facultad de Artes Plásticas (FAP).  

Con estos murales colectivos –que se desarrollaron del 8 al 9 de septiembre– la Dirección General del Área Académica de Artes (DGAAA) de la UV inicia una serie de intervenciones artísticas en distintas entidades de esta casa de estudios. 

Al inaugurarlos, Beatriz Sánchez Zurita, titular de la DGAAA, explicó que este proyecto involucrará a alumnos de Música con composiciones en torno a los murales, y propiciará que la comunidad de Artes cree obras a partir de las piezas que escuchen, pues es importante que en el arte exista la retroalimentación. 

Destacó la capacidad de reflexión de las y los artistas, su sensibilidad y esa manera diferente de aportar conocimientos a las ciencias, “por ello también es importante que las comunidades de Música, Teatro, Danza, del Centro de Estudios de Jazz y Artes Plásticas convivamos y hablemos de arte, y expresar lo que pasa en nuestro entorno”. 

Alrededor de 30 estudiantes de la FAP participaron en este mural colectivo

Citlaltépetl y El amanecer de nosotras 

El primero de los murales tiene por nombre Citlaltépetl y, basado en el proyecto de Gabriel Macotela, fue elaborado con técnica acrílico sobre muro, sus dimensiones son de 2.1 metros de alto por 7.14 de ancho; el segundo, se titula El amanecer de nosotras, cuyo proyecto y dirección fue de Jesús Miranda –su colega y amigo–, también con técnica acrílico sobre muro, y abarca 2.40 metros de alto por 4.75 de ancho. 

Con la colaboración de Miranda, quien también guio al estudiantado en este proceso, concluirlos les llevó menos de 48 horas de trabajo y si bien la batuta estuvo a cargo de los maestros citados, las y los estudiantes también aportaron ideas y creatividad.  

El proceso de elaboración fue como una clase magistral. Gabriel Macotela dio indicaciones, frenó de pronto al estudiantado que miraba atento a él y al muro ya trazado, les pidió que se alejaran de ahí unos pasos, que se dieran cuenta que se estaba saturando el espacio de color, de formas, de líneas. 

Macotela con su amigo y colega Jesús Miranda

En segundos, regresó a las indicaciones, a cómo pintar, qué hacer. De eso se trata el mural colectivo, les dijo. 

En entrevista dejó en claro su desacuerdo con el arte contemporáneo conceptual. En su opinión, no tiene nada que ver el muralismo que se conoce actualmente, con el de Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco. 

“El muralismo era otra cosa, la política era otra cosa, nada que ver. Yo no soy una gente dogmática, en ese sentido, y menos los jóvenes. Ya no corresponden a eso, sino a otra visión del mundo, más abierto estéticamente; antes era muy cerrado. Es natural en la historia, va cambiando el mundo en todo, no sé si para bien o para mal –en unas cosas sí, en otras no–.” 

El artista independiente recordó que su generación emergió de la de José Luis Cuevas, Manuel Felguérez Barra, Vicente Rojo, entre otros de la llamada “Ruptura”, y según él la de hoy es la de la “Segunda Ruptura”, al hacer alusión al arte contemporáneo conceptual. 

Precisó: “Yo pertenecí a esta generación en la que ya empezábamos a hacer ‘arte conceptual’, diferente; la mayoría somos pintores abstractos, es otro concepto”. 

De esto y aquello, de la generación de la transvanguardia tienen que ver, saber e informarse las nuevas generaciones, y hacerlo “con calma”, remarcó. 

Citlaltépetl está en la entrada al recinto universitario

De pronto, dijo puntual: “Yo sí estoy preocupado por México, muy preocupado”; pero su mención no hacía referencia al arte, en un primer momento, sino a lo que como nación se vive: violencia, impunidad, el narcotráfico “adueñado del país”, los feminicidios, los migrantes, una “terrible” desigualdad social. 

“Hemos acumulado muchos años de malos gobiernos, torpeza, corrupción. No hemos tenido gente seria en la cultura. Hay una falta de apoyo terrible para la cultura, para los investigadores, científicos, creadores, estudiantes, universidades. Los dineros se van para tontería y media.” 

En ese escenario, quienes están abocados a la creación artística no debería faltarles el compromiso social, dijo. “¡Nunca! Y menos ahora. Eso es lo que no me gusta y a veces no estoy de acuerdo con cierta parte del arte contemporáneo conceptual: son muy ciegos o no quieren saber un poco de toda esta problemática y la ignoran. Hay mucha superficialidad en el contenido estético y en muchas de las propuestas”. 

Insistió en que no es posible ser ciego, al tiempo que dejó en claro: “Yo no creo en el arte panfletario. Mi pintura es abstracta, pero hago cosas que tocan temas indirectamente –como los murales que hacemos en las calles sobre la impunidad, la violencia, el feminicidio, la libertad de expresión, el humanismo, el abuso de poder–. Hay muchas maneras de manifestarnos sin ser panfletario”. 

En los murales colectivos de la Unidad de Artes “hay esa intención”. Por ejemplo, en el de la entrada al recinto universitario retomaron las cabezas colosales olmecas del Museo de Antropología de Xalapa de la UV y las combinaron con personajes de la vida actual. 

El amanecer de nosotras está al interior de la Unidad de Artes