• Alumnos de licenciatura realizaron un proyecto y prácticas en distintos centros de investigación de la Universidad Veracruzana
• El programa fomenta el trabajo colaborativo entre académicos y dependencias que se sumaron a la convocatoria

Los estudiantes de seis instituciones realizaron su estancia de verano con investigadores de la UV

David Sandoval Rodríguez

09/09/18, Xalapa, Ver.- Estudiantes de licenciatura del poniente mexicano realizaron una estancia de investigación en la Universidad Veracruzana (UV) como parte del Programa Delfín, cuya finalidad es brindar a los jóvenes un acercamiento al trabajo científico en instituciones participantes.

Rossana Zepeda Hernández, académica del Centro de Investigaciones Biomédicas (CIB) de la UV, fue quien se sumó inicialmente al programa que articula a 54 instituciones de educación superior (IES) adscritas al Programa Interinstitucional para el Fortalecimiento de la Investigación Científica y el Posgrado del Pacífico; ello a propuesta de un joven que le comentó al respecto en un congreso realizado en Tabasco donde ambos coincidieron.

Del 18 de junio al 3 de agosto, investigadores de la UV recibieron a seis estudiantes de licenciatura seleccionados de un grupo de 20, para realizar con ello un proyecto que les permitió desarrollar prácticas en laboratorio.

El Programa Delfín tiene como objetivo fortalecer la cooperación entre las IES y los centros de investigación, apoyando principalmente la movilidad de profesores y estudiantes, comentó Zepeda Hernández.

“Esta iniciativa es muy importante porque fortalece su vocación de investigación y fomenta una continuidad en estudios de posgrado para quienes están en la licenciatura”, comentó.

Los estudiantes que visitaron la UV son: Anahí Radilla Serrano, Sheyla Andrea Rojas Beltrán y Ricardo Iván Martínez Guzmán, de la Licenciatura en Químico Farmacéutico Biológico (QFB) de la Universidad Autónoma de Guerrero; Alejandro Verdín Martínez, de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Baja California; Erik Márquez López, de la Facultad de Medicina de la UV en Orizaba, y María Rosario Anguiano Aguilar, de la Licenciatura en Biología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.

A la convocatoria se sumaron los investigadores: Mónica Flores Muñoz, encargada técnica del Laboratorio de Investigación en Medicina Traslacional del Instituto de Ciencias de la Salud; Óscar López Franco, del Centro de Estudios y Servicios en Salud; Claudia Juárez Portilla, del CIB, y Tania Molina Jiménez, académica de la Facultad de QFB.

Mediante su apoyo, los jóvenes pudieron trabajar en el Laboratorio de Investigación en Medicina Traslacional, donde les proporcionaron todas las facilidades, en particular Gabriela Nachón García, quien es su directora.

“Lo interesante para nosotros fue recibir estudiantes provenientes de entornos muy diversos y constatar que en otras universidades están haciendo un muy buen trabajo, prácticamente todos eran muy entusiastas y con buenas habilidades para la investigación, porque ésa es realmente la motivación del programa, fortalecer las vocaciones y que ellos puedan adquirir nuevas habilidades de investigación”, explicó Rossana Zepeda.

Su estancia les permitió aprender técnicas a las que es difícil que tengan acceso en la licenciatura, como el manejo de animales y aparatos enfocados a la biología molecular, por citar unos ejemplos.

“Como profesores, para nosotros fue muy importante motivar a la colaboración, que es indispensable para hacer investigación en nuestra Universidad, así como recibir a los estudiantes de otras instituciones durante un periodo vacacional pues además se desplaza la idea de que el trabajo de un investigador es solitario, sino todo lo contrario”, recalcó.

Claudia Juárez recordó: “Tuvimos que hacer una selección y fue un poco complicado porque estos estudiantes son destacados y sobresalientes a nivel nacional, para acceder a la beca tienen que ser buenos alumnos y estuvo un poco complicado porque no tenemos mucho espacio o recursos para todos”.

A partir de sus perfiles se planearon las prácticas en las que debían participar y en este punto la colaboración entre investigadores fue decisiva para poder utilizar los recursos con los que cuenta la UV.

El grupo visitante fue incluido en todas las prácticas, por lo cual pudieron aprender técnicas de laboratorio y de manejo de animales que no se abordan en sus licenciaturas.

“Creo que se llevaron una muy buena experiencia, de hecho la joven que trabajó muy de cerca conmigo me dijo que le pareció que nosotros teníamos mucha apertura con los estudiantes, pero al mismo tiempo poníamos mucha atención y cuidado, lo cual en su universidad esta disposición de los profesores es muy escasa, por lo que le gustaría regresar a un posgrado en la UV.”

Juárez Portilla reconoció que “fue una buena experiencia tanto para los estudiantes como para nosotros, ver que en general la UV tiene una gran proyección nacional y cuenta con recursos, que a veces pensamos que son limitados pero en realidad otras universidades tienen más limitantes, tenemos no sólo la infraestructura sino también el recurso humano para aportar algo a la sociedad”.

Tania Molina subrayó que lo importante es tener la vocación de colaborar y enseñar a los estudiantes parte de lo que se hace en la investigación, ya que esto lo vuelve enriquecedor para ambas partes.

Recordó que además de la investigación hubo una inmersión respecto a la cultura del estado porque llegaron muy interesados en conocer la música y la gastronomía, “les encantó porque muchas veces no tienen ese acercamiento en sus estados o no son tan diversos como aquí en Veracruz, creo que esa parte fue muy importante, mezclar lo cultural y lo académico”.

Molina Jiménez apuntó que “para ellos y para nosotros fue una experiencia muy enriquecedora y no estaba en el programa, surgió a partir del interés que tenían los jóvenes por la cultura veracruzana y sirvió además para que se relajaran”.

Tania Molina, de la Facultad de QFB, fue una de las investigadoras que supervisó sus prácticas