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Alumnos de Ciencias Agrícolas realizaron Primera Feria Etnobotánica

  • Promocionaron productos en fresco, procesados y semiprocesados, en apoyo a 17 productores de la zona centro del estado de Veracruz
  • Se expusieron diversos productos de origen mexicano elaborados a base de limón, coco, mora, nopal, chayote, lechuga y capulín, entre otros

 

Autoridades de la Facultad de Ciencias Agrícolas inauguraron la Primera Feria de Etnobotánica

 

Claudia Peralta Vázquez

 

Xalapa, Ver., 24/05/2017.- Alrededor de 85 alumnos de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad Veracruzana (UV) participaron en la Primera Feria Etnobotánica, en la cual se expusieron diversos productos de origen mexicano comercializados por 17 emprendedores de la zona centro del estado de Veracruz.

Este evento, realizado el lunes 22 de mayo en la Casa del Lago UV, consistió en la demostración, venta y degustación de panqués, vinos, tartas, saborizantes, helados, licores, ensaladas y tamales, elaborados a base de limón, vainilla, mango, coco, guanábana, malanga, mora, capulín, chayote, maracuyá, maíz, frijol, lechuga y café, entre otros.

Alumnos de las experiencias educativas (EE) Mercadotecnia y Comercialización y Calidad de Frutos y Semillas, fueron los encargados de elaborar una campaña publicitaria, así como de  procesar y darle un valor agregado a los productos, a fin de beneficiar a sus desarrolladores, quienes provienen de diversos municipios de la región.

Durante la inauguración de la feria, Andrés Rivera Fernández, director de la Facultad, resaltó que el objetivo fue mostrar que el proceso de comercialización o industrialización de los recursos agrícolas les da un valor agregado e importante, haciendo más larga la vida de estos productos, altamente perecederos.

 

 

Estudiantes de Ciencias Agrícolas expusieron productos elaborados a base de coco y chayote

 

“Si no se les da un tratamiento adecuado, las pérdidas pueden ir del 40 al 80 por ciento, lo cual es una carga económica muy fuerte para el productor, quien tiene que absorber esas pérdidas.”

Puso como ejemplo el caso del mango de manila, que si no es aprovechado en su época de producción –entre abril y junio– se pierde o agusana por el daño de algunas plagas y enfermedades. Esto hace que se demerite mucho su presentación y precio.

Por tanto, el proceso que se le da a esa fruta antes de su maduración de consumo, puede darle una larga vida de anaquel y un precio más elevado, dijo.

Recalcó que la misión de la Facultad de Ciencias Agrícolas es la formación de recursos humanos altamente capacitados en cuestiones científicas, técnicas y humanísticas, bajo un enfoque sustentable.

 

Oscar Mora Domínguez, productor de vainilla del municipio de Coatepec

 

Esto permite a los estudiantes darse cuenta de que la sustentabilidad también es un elemento importante que siempre deben tener en mente y hacerlo llegar a los productores.

“Los recursos humanos que estamos formando se van a incorporar a la vida productiva y tienen que volverse agentes de transformación del cambio.”

El funcionario indicó que la idea es que los jóvenes tengan la capacidad de participar con los productores, ver elementos de oportunidad de toda la cadena de valor y generar más riqueza para el campo, el cual actualmente se encuentra olvidado por diversas circunstancias.

Por su parte, la académica Cristina Elizabeth Zúñiga Castañeda comentó que la organización de la Primera Feria de Etnobotánica forma parte de la evaluación final de las EE Mercadotecnia y Comercialización y Calidad de Frutos y Semillas.

A los alumnos de esta última se les pidió que hicieran el manejo postcosecha de al menos tres cultivos como son: una hortaliza, una gramínea y un frutal.

“Ellos tienen contacto con los productores y se les pide que aprovechen al máximo el producto brindándoles alternativas.”

 

Integrantes del comité evaluador durante el recorrido por los stands

 

En la etapa final realizan la exposición de los productos en fresco, procesados y semiprocesados, para darles un valor agregado de forma artesanal.

La indicación para los estudiantes de la otra EE fue que tuvieran contacto con los productores, orientarlos sobre cómo vender su producto y ayudarlos en la elaboración de una marca; es decir, todo lo relacionado con manejo de mercadotecnia y comercialización, que está basado en las cinco “P”: producto, precio, publicidad, promoción y posicionamiento en el mercado.

Señaló que ésta es una oportunidad para mostrarle a la población en general el papel fundamental del ingeniero agrónomo, que no sólo es producir, sino buscar la forma de beneficiar al productor y brindarle alternativas de comercialización de su producto.

“Los alumnos se dan cuenta que no es tan pequeño su campo laboral, ya que aprenden mucho de cómo procesar y diseñar una campaña publicitaria.”

Giovanna Iñiga Lozano, alumna de cuarto semestre, habló sobre el trabajo de su equipo que consistió en la elaboración de pan de chayote y dulce de coco (cocadas). Para ello contactaron a los productores de la localidad de Ídolos, municipio de Actopan, con quienes colaboraron durante todo un semestre.

 

Público en general y estudiantes degustaron de los productos

 

“Esta experiencia nos deja el poder convivir con los productores, además de acercarnos al campo porque tuvimos que presenciar el cultivo.”

En esta labor participaron también: Luis Manzano Ramos, Joaquín Godínez Muñoz, Alexis Martínez y Jaqueline Santiago Luis.

Oscar Mora Domínguez, productor de vainilla del municipio de Coatepec, se dedica desde hace ocho años a esta labor. En entrevista, lamentó la falta de consumo de este producto en México.

Reconoció que con este tipo de eventos y con el apoyo de los alumnos de la Facultad de Ciencias Agrícolas se le puede dar un valor agregado, toda vez que regularmente el campesino no lo hace, sino los intermediarios o comercializadores.

Su empresa, por ejemplo, transforma la vainilla en: mole, miel de abeja, café tostado con vainas, licores, aguardiente, mermelada combinada con jícama, jamoncillos y cocadas.

Comentó que su abuelo y su papá lo instruyeron acerca del cultivo de la vainilla, enseñanza que la complementó con su carrera profesional de Ingeniero Químico, misma que cursó en la Universidad Veracruzana.

“Los alumnos de la UV nos ayudaron mucho, hicieron evaluaciones y detectaron algunos defectos o problemas que tenemos en la difusión y publicidad, nos orientaron en la forma de cómo poder crecer con nuestros productos, difundirlos y comercializarlos de distinta manera.”

En el marco de esta muestra, docentes de la Facultad fungieron como integrantes del comité evaluador y determinaron si los alumnos adquirieron la competencia.

 

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