Ciencia

Inventario veracruzano de plantas medicinales suma ocho especies más 

 

  • Resultado de la investigación realizada por Leticia Cano en la comunidad tének de San Francisco, municipio de Chontla 
  • Anunció que la UV será sede del X Colapladem en 2022 

 

Leticia Cano realizó investigación de plantas medicinas en la comunidad tének de Veracruz

 

Paola Cortés Pérez 

15/11/2021, Xalapa, Ver.- Leticia Cano Asseleih, investigadora adscrita al Centro de Investigaciones Tropicales (Citro) de la Universidad Veracruzana (UV), desarrolló una investigación sobre plantas medicinales en la comunidad tének y encontró que el aporte a la herbolaria veracruzana son ocho nuevas especies que se incluyen al inventario etnobotánico de la flora medicinal del estado. 

Cano Asseleih dio pormenores de este proyecto de investigación en el IX Congreso Latinoamericano de Plantas Medicinales 2021 (Colapladem), realizado en octubre de manera virtual, al presentar la conferencia “Maestros en el uso de las plantas medicinales: los tének de Veracruz, México”. 

Mencionó que en el Citro desarrolla un proyecto sobre flora medicinal de Veracruz y una de las líneas es documentar las flores medicinales indígenas del estado. 

“La diversidad biológica y cultural de México es tan importante al grado que se cuenta con un vasto conocimiento sobre el uso y manejo de las plantas medicinales, el cual ha sido documentado desde el siglo XVI.” 

En el territorio estatal, dijo, están asentadas 12 etnias y registradas ocho mil especies vegetales, de las cuales 921 son medicinales. Los tének tienen un gran prestigio como médicos tradicionales, sin embargo, son pocos los estudios realizados sobre este pueblo asentado en Veracruz. 

“El objetivo de la investigación es contribuir al conocimiento de la cultura médica de los tének de Veracruz a través de la documentación del uso de las plantas medicinales en la comunidad de San Francisco, municipio de Chontla, mediante la investigación bibliográfica y el análisis de la efectividad de algunas especies seleccionadas.” 

La metodología usada para realizar el estudio fue primero un acercamiento con las autoridades municipales, a fin de ser el enlace con la comunidad indígena, con esto lograron entrevistar a los tres principales médicos tradicionales de la comunidad. 

También se realizaron entrevistas entre los pobladores; recorridos en la zona; colecta y fotografía de plantas para la identificación botánica; preparación de especímenes de herbario y depósito en herbarios e investigación bibliográfica. 

Como resultado se documentó a 97 especies que pertenecen a 53 familias botánicas y 84 géneros; el 75 por ciento de ellas son nativas de México o América tropical, y el 50 por ciento tienen asociado un nombre indígena. 

El 50 por ciento son hierbas, seguidas de arbustos (20.6 por ciento), árboles (14.4 por ciento) y bejucos (13.4 por ciento). De los tres médicos tradicionales, el hierbero aportó el 54 por ciento de las plantas medicinales; la partera el 25 por ciento y el sobador el 21 por ciento. 

De las partes de las plantas lo que más se usa son las hojas (40.3 por ciento); ramas (17.6 por ciento); raíces (9.2 por ciento); flores, látex, corteza y tallos (3.3-6.7 por ciento), y las plantas completas (7.5 por ciento). 

Con ellas se preparan en su mayoría infusiones, le siguen baños, lavados y enjuagues, así como cataplasmas y lo que fue denominado como MT (ramear, gotear, sobar y masticar). 

La comunidad tének utiliza el mayor número de las plantas medicinales para enfermedades de la mujer, dolores varios y para afecciones de la piel, boca y ojos. 

Dijo que el principal aporte para la herbolaria veracruzana son ocho especies nuevas que se integran al inventario etnobotánico de la flora medicinal de Veracruz: Anredera cordifolia, conocida con el nombre indígena de tullum, utilizada para torceduras; Capparis baducca L., nombrada como amalkte, para el sentimiento de la recién parida cuando hay una discusión con su pareja. 

Hymenocallis littoralis, conocida como lirio blanco, se usa para la hinchazón de pie por torcedura; Manfreda brachystachys, nombrada lakum, para cortar hemorragias vaginales fuertes; Mansoa hymenaea o ajo de monte, se utiliza cuando una persona tiene “maldad”; Mikania scandens o bigote del señor, para sobar un dolor; Senna atomaria, nombres comunes frijolillo, frijol de zopilote o chipal idtot, para el tratamiento de paperas, y Triumfetta aff. semitriloba, su nombre común es malva y se usa para curar el mal de orín. 

Por último, Cano Asseleih dio a conocer que el próximo año la Universidad Veracruzana será sede de la X Colapladem 2022, se pretende organizar el evento en modalidad mixta (presencial y virtual), lo que permitirá un mayor número de participantes. 

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