Los documentos que se conservan en esta área forman parte del patrimonio documental de México. Cuentan con valor informativo, testimonial e histórico, por lo mismo sus características son especiales, únicos, raros y difíciles de localizar. Para su consulta en sala el usuario deberá utilizar guantes y cubre bocas. El tratamiento que se les da es especializado con temperatura y humedad controlada. El libro más antiguo data de 1491.