La construcción del edificio que actualmente ocupan las facultades de Economía, Informática y Estadística de la Universidad Veracruzana se inició, de acuerdo con el maestro Zilli, en el mes de septiembre del año 1934, bajo el gobierno del Lic. Gonzalo Vázquez Vela, siendo Director de Educación en Profesor Gabriel Lucio.

Fachada principal del edificio		murales al interior de la facultad

La escuela contaba con una alberca de dimensiones «estándar», que fue clausurada por los años setentas y actualmente sólo se nota en el piso el cuadro que enmarca el lugar donde ésta se localizaba

Edificio ubicado en el patio central de la facultad		teatro al aire libre

La escuela contaba con campos deportivos para la práctica de frontón, basket-ball, base-ball, volley-ball, foot-ball y un teatro al aire libre,localizado al norte de la Facultad, que afortunadamente todavía podemos admirar.

Murales de la Facultad de Economía

Mural ubicado en la escalera central: «La lucha antiimperialista en Veracruz»Este mural consiste en un gran cuadro central dividido en dos partes que el maestro Vicente R. Espino Jara, como resultado de la entrevista con el maestro Chávez Morado, interpreta de la siguiente manera:En la base del mural, se representa la tierra por una mujer mestiza, característica de la nacionalidad mexicana, cuyo vientre denota embarazo como plena manifestación de la bondadosa fertilidad de los suelos nacionales; y que se encuentra amarrada de manos a la toma de un oleoducto que sustrae de ella las riquezas minerales, que se representan en la plástica a través de la succión de su cabello. Una crítica social pictórica a la explotación propiciada por las políticas del mercado capitalista, en perjuicio de naciones en vías de desarrollo y poseedoras de una gran riqueza natural.

El Salón de los MuralesEl Salón de los Murales, cubierto en sus cuatro muros con las obras denominadas»Antifascismo» del maestro Feliciano Peña, quien nació en la ciudad de Silao, Guanajuato el 25 de abril de 1915, está dedicado a mostrar los destrozos materiales, físicos y morales que el fascismo causó.

Muro este. «El nacimiento de una vida»Representa el nacimiento de una vida. Hacia la derecha, ésta vida misma maculada por todas las lacras del mundo que la produce: el capitalismo con toda su secuela de miserias morales y materiales.

Muro sur. «Los campos de concentración, la incineración de seres humanos y de libros y la bendición a los que van a la guerra»No es difícil distinguir el fascismo como enemigo de la cultura… La incineracion de libros, la silla eléctrica, los campos de concentración de conde ha salido Ossietzki, a quien le ha conferido el premio Nobel, la quema de seres humanos, la mutilación de los niños, la represión llevada a sus formas más inicuas, son un producto del fascismo… Es el Papa bendiciendo a los hombres y a las banderas que llevan a aquellos a la muerte, envueltos en máscaras para los gases; conducidos por carros blindados, tanques, autos y otros vehículos, en los que los cañones y ametralladoras segarán las vidas de los seres humanos sentenciados ya a esta muerte ignominiosa desde que nacen. La religión, al servicio del capitalismo, bendice a las víctimas adormeciendo sus conciencias que en este sueño de opio jamás encuentran la verdad.

Muro oeste. «El hombre asfixiado por los gases»La ciencia en los países capitalistas, permanece aliada fiel a este objetivo. Como resultado natural, la química no abonará los campos hasta hacerlos fructificar, sino que al servicio de la destrucción y la barbarie, producirá los gases venenosos que asfixian a los hombres y corroen sus pulmones. Generaciones de tuberculosos escaparán a la matanza y quedarán con vida para maldición de la mano que armó la batalla. Niños herederos de ésta y otras enfermedades. Inválidos, lisiados, ciegos, verdaderos despojos humanos serán el saldo trágico del crimen y la maldad. Tal es el producto de la bendición papal, mientras allá en el Vaticano, las autoridades religiosas seguirán disfrutando de los beneficios que su complicidad con el capitalismo les acarrea.

Muro oeste. «La mano del proletariado domina a la mano asesina que trata de pasaportarlo al otro mundo»Al final, la mano asesina tratando de pasar a otro mundo, pero dominándola, no permitiéndole pasar, la mano del proletariado que, producto de una nueva sociedad, jamás dejará que éstas fuerzas negras de un mundo en franca descomposición invadan los ricos jardines que él ha creado.

Muro noroeste. «Las multitudes celebran con júbilo»Allá en la Plaza Roja de aquel mundo nuevo, las multitudes celebran con júbilo la llegada del gran día. hombres, mujeres y niños, expresan en su total grandeza la alegría de vivir…. La sociedad blanca del futuro… surgiendo con fuerza irresistible del seno del proletariado. Obreros, campesinos, intelectuales, todos juntos, unidos creando la nueva vida.

Muro norte. «LA BARRERA QUE SE OPONÍA AL FASCISMO»

…Esta conciencia ha hecho brotar en todos los rincones del globo, el Frente Popular. Los seres limpios de toda mancha se congregan en él. Romain Rolland, Henri Barbousse, George Dimitrof, Largo Caballero y tantos otros que formaban la barrera que se oponía al fascismo. Y arriba de ellos, Lenin, el gran maestro de la Revolución, aquel a quien ni sus propios enemigos han podido negar su gran pureza material y espiritual.