Antes era más fácil culminar una maestría en Francia, y después recibirse en la Facultad de Música
«Antes del MEIF, si un chico preparaba un concierto para piano y orquesta era porque estaba a punto de titularse. En la actualidad, jóvenes como Manuel, que apenas cursaba el nivel preparatorio, pueden interpretar piezas de enorme dificultad. Él presentó examen y avanzó dos años en su carrera”: Patricia Castillo
El Modelo Educativo Integral y Flexible (MEIF) se establece como un excelente recurso para los jóvenes estudiantes en la Facultad de Música, pues quienes muestren aptitudes extraordinarias avanzarán como lo permita su talento y no con base en el transcurso de los semestres que antes eran obligatorios, declaró Patricia Castillo, académica de
esta entidad.
Agregó que este modelo permite que los estudiantes se ubiquen en el nivel correspondiente a su habilidad y capacidad de aprovechamiento, lo que también ha contribuido a los recientes logros que varios de ellos han obtenido.
Para Patricia Castillo, Xalapa es un lugar en que los jóvenes se encuentran inmersos en actividades culturales. “Ese ambiente de conferencias, conciertos, exposiciones, ballet y demás, estoy segura que les permite desarrollarse en un contexto apropiado. Además, la sana competencia es lo que ha hecho crecer el nivel.
”Cuando entré a esta Facultad, si un chico preparaba un concierto para piano y orquesta era porque ya se encontraba a punto de titulación. Hoy hay jovencitos como Manuel, que apenas se encontraba en el nivel preparatorio cuando, gracias al MEIF, preparó obras de enorme dificultad, presentó su examen y fue ubicado en un nivel que le ha permitido avanzar dos años en su carrera.”
En la actualidad, Castillo cuenta con varios estudiantes que muestran posibilidades de desarrollo importante. Ricardo Rodarte preparó dos programas obligatorios en seis días, presentó tesis y ganó mención honorífica; hoy cursa su maestría y desea hacer doctorado.
Gerardo Munguía, otro muchacho de gran potencial, es muy dedicado y ya ofrece numerosos recitales en diversas ciudades. Michel Casas ganó recientemente mención en Costa Rica y prepara un recital con obras de Camille Saint-Saëns.
“El repertorio de ellos es muy avanzado y eso surge por iniciativa propia”, explicó Castillo. “Proponen una cierta obra, ambiciosa y difícil, y aunque el maestro sugiera prudencia, ellos mismos se lo plantean como reto. No es raro encontrar jovencitos que ya están sobre obras tan difíciles como la Sonata en si menor de Liszt, la Sonata opus 111 de Beethoven, el Segundo concierto de Rajmaninov, el Concierto para la mano izquierda de Ravel y otras”.
Fuente: Universo