Seminario Antropología Económica para la Vida

Hombres y mujeres necesitamos de economía, sociedad y educación para sostener nuestras relaciones de reproducción humana para la vida. La vida es un valor incalculable, es legado de la humanidad, es un derecho natural, por lo tanto, los seres humanos debemos recrearnos en ella. Solo así podremos repensar los sistemas y las estructuras necesarias para el sostenimiento de su desarrollo. De ahí la importancia de pensar a la universidad como la estructura que promueve la educación para la vida. Se sobre entiende que la economía, la sociedad y la educación, como instrumentos, son fundamentales para preservar la diversidad de especies vivas, sobre todo la humana en el planeta.

Por todos los medios, hoy se habla de economía y de mercado, ofertándose elevar “la calidad de vida”. Considero que con grave falta de respeto el mundo de hoy toca el tema de la economía y sus ligas con los mercados, sobre todo de finanzas, sin tomar en cuenta las necesidades vitales de la humanidad y su satisfacción. El dinero se ha convertido en la principal mercancía que rige la vida de millones y millones de personas en el mundo. Como si nuestro ser humano holístico, solo dependiera para su existencia de las cosas materiales superfluas que hoy se producen sin considerar las externalidades y los impactos negativos para la vida en general. Estamos invadidos por una multitud de empresas que maquilan un sinnúmero de artículos suntuosos, sin utilidad para la satisfacción de necesidades fundamentales para la vida. Vivimos rodeados de un mercado de chácharas y chatarras.

Max-Neef habla de necesidades humanas axiológicas y sus satisfactores. Para la reproducción de la vida en el planeta es primordial satisfacer las necesidades elementales de subsistencia y protección (casa, vestido, alimentación, conocimiento del entorno, relaciones sociales) y más aún satisfacer las necesidades de tipo axiológico que tienen que ver con el ser de lo humano. Vivir con dignidad es fundamental para el ser humano, es cuestión de vida o muerte. Me refiero a la muerte óntica, dado que siempre queremos ser más que los demás, o por lo menos nos sentimos mejor que los que nos rodean. Esta “necesidad de ser” debe ser atendida con procesos educativos para la vida. Una educación que nos prepare en la ética y la solidaridad, ante todo con las personas con mayores necesidades de ser atendidas y de brindarles oportunidades. Todos estamos necesitados de amor. Pero en algunas regiones de nuestro planeta hay hombres y mujeres llenos de rencor y egoísmo, fundamentalismos. Muchos están en la cárcel purgando penas inhumanas, algunos con penas de muerte. Todo esto tiene que revisarse. La política y la educación deben prevenir la falta de cultura de responsabilidad social. Todos somos responsables de lo que ocurre en la humanidad y la naturaleza.

Retos del Seminario:

1. Asumir la responsabilidad por la generación y promoción de conocimientos desde una mirada paradigmática alternativa de la antropología económica, con análisis pertinentes y congruentes con esa realidad que tocamos con la mirada y los sentidos, más allá de la percepción y las emociones, con el ser conscientes de la necesidad de interacción en todos los sentidos y rumbos.
2. Reaprender el conocimiento de las visiones del mundo (paradigma cosmogónico) de los pueblos ancestrales, rurales e indígenas, especialmente de América Latina, para la participación en proyectos que promuevan el paradigma del buen vivir y la sostenibilidad.

José Luis Pérez Chacón

Programa

• 9:30 AM
  Bienvenida y presentación a cargo del Dr. José Luis Pérez Chacón.
• 9:45 AM
  Proyección de los minidocumentales.
• 10:30 AM
  Sesión de diálogo y reflexión con nuestros invitados especiales.
• 11:15 AM
  Cierre del evento.