Universidad Veracruzana

Lengua Escrita y Matemática Básica

Línea de investigación



Edgardo: Lerner, capítulo 4

Capítulo 4: ¿ES POSIBLE LEER EN LA ESCUELA?

Este libro Leer y escribir, lo real, lo posible y lo necesario es un material que en el inicio del sexenio Foxista se distribuyó para los maestros en servicio por medio de la SEP. Lamentablemente, hasta donde sé, estos libros no fueron retomados en los cursos de actualización. Creo que falto sacar provecho al máximo entre los docentes y no solo entregarles. El contenido es muy bueno y fue desaprovechado.

En este capítulo, Delia Lerner inicia con la pregunta ¿es posible leer en la escuela? Tal como ella lo señala, esta pregunta puede parecer extraña. Pero, la respuesta puede ser afirmativa, si se lleva a cabo con propósitos didácticos y comunicativos; así como con una buena didáctica por parte del docente. Creo que la respuesta, afirmativa o negativa, dependerá del profesor. Si el docente cree que no, nunca creará las condiciones para promoverla en la escuela ni en el aula. Por el contrario, si el docente tiene la iniciativa de hacerlo, lo logrará con apoyo del contexto social y de la institución.

El papel del maestro es fundamental. Sin embargo, la autora señala que no podemos acusar al maestro de todo el problema, muy contrario a las ideas de Carrasco. EL maestro forma parte de un sistema en el cual todo converge y lo orilla a realizar ciertas acciones que no son acordes con los enfoques constructivistas.

Me parece que la autora no es ilusa, aunque lo que propone fue llevado a cabo en ciertas condiciones que favorecieron su realización. En nuestro sistema educativo puede llevarse a cabo lo que ella plantea, pero con algunas limitaciones. Considera algunos elementos de los trabajos de Ferreiro en relación a la interacción del sujeto con la lectura y la escritura por la manera en que concibe a la enseñanza. Menciona que estas actividades deben tener un propósito didáctico y comunicativo. Es decir, necesita estar presente como algo académico que el alumno debe aprender, pero también, como un recurso para comunicarse. Sin embargo, le da mayor prioridad a lo social. Creo que necesitamos relacionar lo escolar con lo social, sin que se encuentre un límite establecido, sino como algo híbrido sin que el niño lo perciba.

Las tres actividades son muy interesantes. La primera que menciona apareció como parte del programa de primer grado de primaria. Sin embargo, no se tuvo el propósito claro de lo que se quería lograr con ello y pareciera que sólo era invertir tiempo en algo improductivo. Además, en un contexto multigrado fue complicado lograrlo, tanto por el equipo que se requiere como la organizar del grupo. Las demás son muy llamativas para realizar en la escuela. La descripción es muy buena para promoverlo en el aula con los niños, en cualquier grado.

También, la autora revalora el papel del docente. Las intervenciones deben ser para permitir al alumno la interacción con la lectura y la escritura. No se trata de enseñar como objeto de conocimiento, sino para mostrar la lectura, en qué condiciones, qué modos puede utilizar y la finalidad con la que se hace. Esto me parece importante porque no se enseña la lectura ni la escritura, sólo se crean las condiciones para que el niño las lleve a cabo y se apropie de estas prácticas.

En general, me parece un capítulo muy interesante. Aunque no nos responde la pregunta con un sí o no en el inicio, nos brinda elementos para que podamos responderla. Claro, al final con todos los argumentos nos da la respuesta. Creo que no es alejado de la realidad, toma en cuenta elementos como el tiempo en la escuela. Que lo mejor es flexibilizar el trabajo para que nos rinda y podamos realizar lo mejor sin saturar al alumno.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *