Universidad Veracruzana

Blog de Lectores y Lecturas

Literatura, lectura, lectores, escritores famosos



¿Leer o no Leer?

Roberto Frías


Tradicionalmente, el no leer equivale para muchos a sentirse excluidos o ser considerados como personas menos cultas, pero para el ensayista francés Pierre Bayard estos conceptos pueden ser muy relativos, pues no existen razones para establecer un «matrimonio obligado» con ningún libro.

Incluso, el asegura que prefiere vivir de diversas maneras con los libros.

«Mas que distinguir entre los libros que he leído y los que no he leído, me gusta diferenciar entre los libros con los que he vivido y aquellos con los que no», dice. «Hay muchas maneras de vivir con los libros que no tienen relación con leerlos de la primera a la última pagina».

Bayard, psicoanalista y profesor de la Universidad de París, escandalizó en 2007 con su obra como hablar de los libros que no se han leído (publicado en español por Anagrama en 2008), en el que analiza con humor el proceso de la lectura y la no-lectura.

¿Por que nos sentimos culpables de no leer?

Eso es algo que pasa mas en America; en Europa, cada vez nos importa menos. Pero en America les inculcan ese temor y esa culpabilidad por no haber leído determinados textos que, en teoría, todos deberíamos conocer.

Dice que su libro tiene como objetivo «aliviar la culpa de no leer», ¿lo considera una especie de terapia?

Ese no fue el proyecto inicial, yo quería reflexionar sobre la comunicación, que se vuelve difícil cuando tenemos que hablar de un libro que no hemos leído.

Pero comencé a ser consciente de la importancia que esta culpa tiene en las personas y, cuando el libro llegó al mercado, de lo mucho que algunos se habían beneficiado de su utilidad en el proceso de eliminación de la culpa.

En mi casa, la cultura no era muy importante, yo vivía en un contexto más popular. Cuando uno llega a ese mundo cultural con 15 O 20 años de retraso, tiene que encontrar las llaves que le permitan abreviar el acceso. Mucha gente en la misma situación que yo ha encontrado ayuda en el libro. <!–more–>

También he visto que el patrón se repite en alumnos míos que provienen de contextos po

pulares; en general, se sienten obligados a leer el libro de la primera a la última página, y luego se percatan de que muchos intelectuales solo los hojean.

¿Como definiría usted la no-lectura?

El concepto va evolucionando en mi libro, desde el lector que cree que debe leer el libro completo, de la primera a la última página, hasta los diversos tipos de no-lectores. Seguramente, le ha pasado que un amigo llega a casa y le pregunta si ha leído todos los libros que ostenta su librero. Yo respondo que no los he leído, sino que vivo con ellos. Para mi ese es el verdadero lector, el que busca uno de sus libros tan solo para corroborar una cita, o lee tan solo el final de algún otro.

Son en realidad no-lectores los que de verdad se interesan por la lectura?

La separación entre lo que se ha leído y lo que no se ha leído no es tan clara, tan limpia. Sobre todo si uno es un intelectual o un hombre de cultura, siempre se esta en una posición intermedia entre la lectura y la no-lectura.

Si la verdadera lectura, significa leer sin reglas, «aprehender» el contenido del libro, más que leer todas sus paginas, que pasa, por ejemplo, en las universidades? Me inquieta mucho ver estudiantes que pasan toda la tarde con el mismo libro. Hay una gran diferencia entre las bibliotecas francesas y las americanas, las francesas tienen las estanterías cerradas y las americanas no, uno puede ir directamente a los libros y cambiarlos por otros.

La concepción del conocimiento, de la biblioteca, es totalmente diferente, hay que tener una mentalidad que pueda jugar más con los libros, no que les tenga menos respeto, al contrario, que los respete mucho más y por eso se permita ir de uno al otro. No hay por que establecer un matrimonio obligado con ningún libro.

¿Quizá a partir de iniciativas como la suya se pueda pensar en una enseñanza diferente de los hábitos de lectura?

Por el momento, no está pasando gran cosa en Francia, pero es notorio el desplazamiento entre un soporte como el libro de papel, que desaparecerá, y otros medios de comunicación. Veo que los jóvenes establecen otro tipo de relación con el texto en Internet y me interesan mucho las derivaciones que el acto de leer pueda alcanzar allí.

Tomado de: Suplemento cultural Reforma, 23/07/2009