| Año 8 • No. 319 • Julio 21 de 2008 | Xalapa • Veracruz • México |
Publicación
Semanal
|
Centrales
Editorial
General
Entrevista
Regiones
Becas
y oportunidades
Arte
Deportes
Contraportada
Programa universitario para la transdisciplina,el diálogo
de saberes y la sostenibilidad (1 de 3) |
||
| De
forma simultánea nos damos cuenta y tenemos razones diariamente
para el optimismo al ver los deseos de aprender, las posibilidades
humanas, cognoscitivas e individuales de crecer, de articular las
experiencias y los conocimientos para contribuir al crecimiento de
los alumnos y de nosotros mismos como académicos. Observamos que hay atisbos de transformación en aspectos de la administración y las prácticas universitarias. Se gestan esfuerzos de comunicación entre las disciplinas, de apertura por parte de la Universidad y sus aulas hacia las comunidades y las problemáticas del mundo real. Las currícula se transforman lentamente hacia una mayor flexibilización que pretende dar espacios a la creatividad docente-investigativa. Siendo que al mismo tiempo la epistemología lineal y los límites del conocimiento disciplinario y racionalista, nos impiden realmente abrir y flexibilizar el currículum y el conocimiento para dar plena cabida a la educación flexible y basada en el aprendizaje. Sin embargo los académicos nos sentimos en parte atrapados en nuestros aparatos y marcos teóricos y epistemológicos, además de pedagógicos, producidos desde un racionalismo disciplinario que se evidencias, como un triste remedo de los sistemas europeos creados en el renacimiento y la ilustración. No hay espacios ni tiempos de reflexión filosófica, de pensar el pensar para poder abrevar de antiguas y nuevas propuestas que permitan enriquecer y crear una praxis académica pertinente para estos escenarios, aquí en nuestro México y en este siglo XXI. Tal como hemos expuesto en los documentos acompañantes de presentación del “Programa Universitario para la Transdisciplina, el Diálogo de Saberes y la Sostenibilidad”, existen desde hace al menos 15 años propuestas y acciones internacionales y regionales para re-pensar a la educación y en particular la universidad en el contexto de las problemáticas descritas antes. Llamamos a esto la necesidad de re-fundar nuestras instituciones de educación bajo la mirada del imperativo de sostenibilidad (Educación y Sostenibilidad). Sostenibilidad no sólo ambiental y ecológica en un sentido estrecho y disciplinar, sino sostenibilidad como un estado dinámico del sistema humano y planetario bajo el reconocimiento de la ecología generalizada (el entramado transdisciplinario de las infinitas co-dependencias y relaciones dentro del mundo real). No obstante, nuestra actual forma de vivir y actuar nuestro ser académico, poco nos ayuda y da espacios para que nuestra participación en la educación pueda incorporar estas nociones de educación y sostenibilidad, así como la reflexión y praxis epistemológica y transdisciplinar que posibilite humanizar al conocimiento. Existen múltiples instituciones de educación que ya se encuentran transformándose hacia esta indispensable re-creación de la academia bajo la oportunidad de “pensar el pensar”. La apertura hacia la incorporación de un pensamiento sistémico, complejo y transdisciplinar, permite re-insertarnos como actores de un mundo real, donde los seres humanos cognocentes son los protagonistas del aprendizaje y la transformación. |
||
|
|
||