Año 7 • No. 281 • Septiembre 17 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
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Destruidos arrecifes del norte de Veracruz por el paso de Dean
Alma Celia San Martín

De acuerdo con el equipo de buceo que realizó observaciones e inmersiones en los arrecifes Tuxpan y Pantepec, éstos sufrieron severos daños debido al paso del huracán Dean, informó Francisco Javier Martos Fernández, responsable del Laboratorio de Buceo Científico de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias de la Universidad Veracruzana (UV) en Tuxpan.

En el lado sur del arrecife Tuxpan se observa una capa de sedimentos muy finos de varios milímetros de espesor, donde 70 por ciento de las colonias coralinas fueron destruidas, dijo el biólogo.

Los resultados obtenidos no son nada alentadores, ya que para un arrecife, un huracán es como una licuadora porque el oleaje que se provoca arrasa con las especies marinas que se encuentran en el lugar; sin embargo, esto da también lugar a que la zona sea repoblada nuevamente por otras colonias, aunque subrayó que este proceso tarda no menos de cinco años en generarse.

Indicó que apenas hace un mes, junto con los biólogos Juan Manuel González y Julio Gómez, realizó un recorrido por estos mismos lugares, en donde constató en ese momento las condiciones óptimas en que se encontraban, desafortunadamente después del fenómeno natural registrado el panorama es totalmente desalentador.

Dijo que en junio pasado se realizó un muestreo en el arrecife Tuxpan, encontrándose grandes cantidades de colonias de coral “cuernos del alce” (acropora palmata), una de las pocas especies de coral protegidas por las leyes ambientales de México. El tamaño y la abundancia de las colonias le daban un gran valor a algunos sectores del arrecife y a los emergentes que se localizan en esta zona.

Sin embargo, al retornar el domingo pasado a este mismo punto se encontró ausencia de las grandes colonias de acropora palmata, además de que por la presencia de grandes cantidades de sedimento en este lugar no se tuvo mucha visibilidad, a pesar de ello se verificó la ubicación del espacio, orientándose con objetos sobresalientes del mar, tales como faros y boyas.

Manifestó que después de una intensa búsqueda sólo fue posible encontrar algunas bases de colonias y una gran cantidad de restos de coral ramificado; cabe mencionar que esta especie es una de las que tiene mayor velocidad de crecimiento; sin embargo, la recuperación de las mismas se mide en lustros, si es que no hay mayores perturbaciones.

Martos Fernández explicó que otras especies de coral también fueron afectadas por el oleaje, en tanto en el sector suroeste del arrecife la destrucción fue impresionante, ya que grandes colonias de corales masivos fueron completa y literalmente pulverizadas y sus restos arrastrados sobre la parte más baja del arrecife, llamada cresta arrecifal.
Los montículos de restos de coral alcanzan hasta metro y medio de altura, incluyendo pedacería de esta especie con más de medio metro de diámetro, lo que da una sola idea de la intensidad del oleaje.

Reveló que las aguas turbias y cálidas descargadas en el río están favoreciendo el crecimiento de algas verdes sobre los restos de coral, lo que origina que ambas compitan por el espacio, situación que puede dificultar la recuperación de los arrecifes, “será muy interesante darle seguimiento al proceso de recuperación de los arrecifes”, señaló.

Además, indicó que de entrada en esta primera inspección se observa que fueron afectados un promedio de 7.5 hectáreas del arrecife Tuxpan, aunque pudiera ser mayor la superficie dañada por el fuerte oleaje, pero esto será determinado cuando se realice una nueva visita.

En el caso del arrecife Pantepec la situación es diferente porque se encuentra a 15 metros de profundidad la parte menos profunda, el oleaje aparentemente no provocó daños importantes, aunque se registra una lluvia de sedimentos que en estos momentos mantiene turbia el agua, además de que la descarga del río Tuxpan llega de manera directa, por lo que en esta última inmersión que realizaron la visibilidad era de metro y medio.

“Todo el Golfo de México está lleno de agua de los ríos Cazones, Tuxpan, Pánuco y Tamiahua; está recibiendo las descargas de estos afluentes, que traen materiales de suspensión que van a dar a la costa, provocando el enturbamiento, lo que provoca su caída a los fondos arrecifales, de tal manera que todo está cubierto y no es posible conocer qué especies están vivas.”

Aun cuando el huracán ya pasó, la lluvia de sedimentos continúa cubriendo los arrecifes; por lo que en tanto no terminen de caer los materiales no se podrá realizar una evaluación y determinar el impacto de los daños.

Explicó que hasta ahora sólo han visitado los arrecifes Tuxpan y Pantepec, aunque tienen conocimiento de que en Lobos también se registran afectaciones, debido a información de los pescadores y algunos turistas que han visitado la zona.