| Aprovechar
la presencia de la UV en las distintas regiones del estado para
potenciar las capacidades y enfoques productivos, económicos
y sociales que cada una presenta, es uno de los ejes que regirá
el proceso de transformación universitaria, aseguró
el rector Raúl Arias Lovillo.
Durante la puesta en marcha de los trabajos para el diseño
del Programa Integral de Fortalecimiento Institucional (PIFI) de
la UV para 2006, aseguró que son evidentes las diferencias
productivas entre regiones como Córdoba y Coatzacoalcos o
Xalapa y Poza Rica, por lo que que sólo proyectos académicos
acordes al contexto lograrán asegurar el desarrollo regional
y la pertinencia en la formación universitaria.
Arias Lovillo dejó claro que dicha regionalización
puede ayudar a elevar la competitividad institucional y cerrar las
brechas de calidad académica que existen entre dependencias
y programas análogos situados en diferentes campus universitarios,
contrastes derivados de una centralización que hoy es necesario
terminar.
La pertinencia de las propuestas contenidas en el PIFI, que se nutre
de recursos federales de la Secretaría de Educación
Pública, permitió a la UV, tan sólo en el último
año, fortalecer su capacidad y competitividad académica
con el ejercicio de más de 53.2 millones de pesos, destinados
a perfeccionar planes, programas de estudios, formación académica,
procesos de acreditación, cuerpos académicos e indicadores
de calidad, principalmente.
“La competitividad y calidad resumen el compromiso y la visión
de futuro de la UV”, dijo el rector luego de escuchar los
compromisos asumidos por los universitarios para integrar el PIFI
2006, que suponen entre otras cosas el incremento del número
de profesores de tiempo completo, el incremento de éstos
en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y el aumento de programas
acreditados por organismos externos, entre otros puntos.
Reconoció que si bien la institución ha logrado avances
claros en los últimos años, más aún
a partir de la autonomía universitaria, y desplegado la construcción
de una infraestructura material e informática, la consolidación
de sus cuerpos académicos, la acreditación de sus
programas o la certificación de sus procesos administrativos,
aún hay retos qué afrontar para alcanzar la calidad
y competitividad total.
Se refirió así a las recomendaciones que la SEP hizo
a la Universidad Veracruzana, en función de sus fortalezas
y debilidades, y que implican elevar la capacidad académica,
la competitividad de los programas e implementar la innovación
educativa en los procesos formativos de los universitarios.
Octavio Ochoa Contreras, director de Planeación Institucional,
celebró la iniciativa del rector de incluir una fase más
en este proceso de integración del PIFI, que autoriza a académicos
a apoyar como representantes los procesos de planeación en
las dependencias a las que pertenecen.
Arias Lovillo agradeció a los 26 académicos que recibieron
sus cartas de designación, su compromiso, liderazgo y visión
de futuro, que constituyen un aporte fundamental para el éxito
de las metas proyectadas por la institución: “Saber
hacia dónde vamos a dirigir nuestro proceso de transformación
es fundamental, pero lo es aún más saber que contamos
con recursos humanos que apoyan con su compromiso y trabajo colegiado
la consecución de estos objetivos”.
Retos
para 2006
Uno de los retos más importantes para la Universidad Veracruzana
es analizar el funcionamiento e impacto de los programas y procesos
de innovación educativa en la institución.
Entre ellos destacan la incorporación de enfoques educativos
centrados en el aprendizaje, la actualización y flexibilización
curricular, la incorporación de tecnología de apoyo
al proceso educativo, el establecimiento y operación de programas
de atención individual o en grupo a estudiantes, la enseñanza-aprendizaje
de un segundo idioma, la movilidad estudiantil y la conformación
de redes de cuerpos académicos, entre otros.
De acuerdo con la SEP, la innovación educativa de la institución
se concretará con el impacto favorable en la mejora de la
calidad de los programas educativos, los resultados del desempeño
estudiantil y el funcionamiento académico institucional.
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