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Eugène
Ionesco (1912-1994), el padre del teatro del absurdo,
nació en Stalina, Rumania, un 26 de noviembre. Fue un fervoroso
creyente en los derechos humanos y durante toda su vida se opuso
a la tiranía política. En su obra dio una visión
de la lucha de la humanidad para sobrevivir a una sociedad que,
a su decir, formaba barreras entre los hombres. A casi 90 años
del nacimiento del dramaturgo, un grupo de estudiantes de la Facultad
de Teatro eligió una obra suya para participar en el ix Festival
Nacional de Teatro Universitario, convocado por la unam.
El rey se muere (Le Roi se meurt), obra de Ionesco escrita en 1962,
se presentó en el foro de la Facultad de Teatro. Con su propuesta
escenográfica minimalista y funcional, el montaje involucró
directamente al público para volverlo cómplice del
acto escénico. Así, bajo la dirección de Fernando
Yralda, Laboratorio Escénico ultimó los detalles para
su actuación en la Ciudad de México, en la final del
Festival Nacional de Teatro Universitario, que ya ha ganado.
David Ramírez, asistente de dirección, relata la anécdota
de esta obra: Al inicio del día le comunican al rey
que va a morir al final del espectáculo. La historia es el
desarrollo de cómo el rey transita a través de esa
noticia, hasta que al final muere. Lo importante de la obra no es
el desarrollo de una anécdota, sino los estadios por los
que pasa el monarca a partir de que sabe que va a morir. Es una
obra difícil porque su anécdota es muy sencilla, pero
su tratamiento es muy profundo; es más filosófica
que dramática.
Acerca de su elección, Ramírez explica que fue
producto del proceso de trabajar juntos a lo largo de cuatro años.
Hemos buscado textos que nos llamen, que nos muevan en algún
sentido. Siempre nos ha llamado la muerte en los textos. Surgió
la propuesta de montar esta obra y a todos les gustó.
Los integrantes de Laboratorio Escénico, al iniciar las lecturas
del texto, entraron en una reflexión surgida de la visión
de la muerte como una realidad, y nos dimos cuenta que vivimos
como si la muerte no existiera. En el momento en que uno sabe que
va a morir, se valora la vida.
Quienes componen Laboratorio Escénico, estudiantes y egresados
de la Facultad de Teatro de nuestra casa de estudios, comparten
su experiencia de trabajar en este montaje y hablan de sus personajes.
Enrique Vásquez, el médico, opina que ha sido el personaje
más laborioso que ha trabajado. Sobre su construcción,
explica: Comencé a trabajar la propuesta corporal a
partir de la imagen de los muertos, de la reconstrucción
de restos humanos, como aquella búsqueda que permita vivir
más tiempo al rey.
En cuanto a la propuesta corporal de la producción, señala
que el nuevo teatro, el que puede resurgir, es el teatro del
cuerpo. Creo que se pueden lograr muchas cosas explorando el cuerpo,
que es el material del actor. Fuera de la iluminación, el
vestuario o el maquillaje, con lo que se queda uno es con el cuerpo.
Las actrices de la obra, cada una con un personaje de carácter
distinto, dicen quiénes son: Mi personaje se llama
María, segunda esposa del rey, y se pone triste porque sabe
que el rey va a morir... Su acción principal en la obra consiste
en salvarlo de la muerte, su esperanza es que no muera, dice
Yunuén Durán, quien encarna a ese amoroso personaje.
Lo que más me gusta de ella es su manera de ver la
vida. Las cosas que le dice al rey para que él se quede siempre
son referentes a la vida, a lo hermoso que puede ser vivir.
Margarita, primera esposa del rey, es el personaje de Centli Martínez.
Es fuerte, decidida, la contraparte de María; no se
deja llevar por sentimen-talismos, lo que quiere es ayudar al rey
a morir bien. De este personaje, a Centli le gusta que sea
una mujer entera. Cuando se queda a solas con el rey, cuando
ya nadie los ve, sale la reina que quizá algún día
fue, que de verdad le duele que su rey se está yendo. El
texto al final me gusta muchísimo, manifiesta el amor que
los unió.
Cariño Selene es Julieta, la criada, un personaje aparentemente
fácil: Pareciera secundario, último... encontré
pocos elementos para entender cuál era su función
en la obra. Sin embargo, dice que ha disfrutado este trabajo
más que nada por la propuesta del montaje, de construcción
de personajes entre todos. Significa estar rompiendo todo el tiempo
con lo cotidiano, romper con eso desde la postura física
es lo más difícil.
La escenografía y el vestuario de El rey se muere fueron
un diseño del grupo. En la producción e iluminación
trabajan Emmanuel Medrano y José Rodolfo Sánchez.
Actúan, además, Antonio Guerrero y Julián Loredo.
La música es original de Lenin Peña.
El primer montaje de Laboratorio Escénico fue Macbeth, de
Shakes-peare, obra con la que ganó el vii Festival Nacional
de Teatro Universitario. Después de ello montó El
jardín de las delicias y El círculo de tiza, obra
que lo llevó a hacer una gira por el estado de Chiapas, con
apoyo de su facultad. También hizo temporada en el Teatro
La Caja con Un tranvía llamado deseo, que presentó
en Durango. Esto sólo abarca una parte del trabajo de Laboratorio
Escénico, cuyos miembros han dado funciones en diferentes
espacios de la ciudad. |