Año 16 No. 658 Octubre 31 de 2016 • Publicación Semanal

Xalapa • Veracruz • México

Festival de Teatro Universitario, ejemplo de libertad de expresión

Contenido [part not set] de 42 del número 658
Post México, Mejor Dirección, Puesta en Escena y Escenografía, Categoría A (Foto: DGDC)

Post México, Mejor Dirección, Puesta en Escena y Escenografía, Categoría A (Foto: DGDC)

 

Del 17 al 22 de octubre se presentaron 18 obras montadas por estudiantes, profesores, egresados, trabajadores y jubilados

Paola Cortés Pérez

El Festival de Teatro Universitario, organizado por la Dirección General de Difusión Cultural (DGDC) de la Universidad Veracruzana (UV), es claro ejemplo de que esta casa de estudio pondera la libertad de expresión como un valor irrenunciable, resaltó Arturo Meseguer Lima, director de dicho evento cultural, cuya más reciente edición fue in memoriam del actor y dramaturgo Hosmé Israel Martínez Meza, y dedicada a las víctimas de la violencia que se vive en el estado.

Durante la ceremonia de clausura, celebrada el domingo 23 de octubre en la Sala “Dagoberto Guillaumin” del Teatro del Estado, Esther Hernández Palacios, titular de la DGDC, expresó que “hace 49 años la UV decidió apostar al teatro de su comunidad y para su comunidad” y recordó que en 2017 se celebrarán los 50 años del festival.

Gracias a esta trayectoria, ahora el teatro universitario puede ser una herramienta para construir una realidad mejor, lo cual se logrará porque hay jóvenes comprometidos con el arte, la escena y la realidad social. El teatro, agregó, permite al actor verse desde diferentes maneras, “nos permite desdoblarnos y conocernos, además nos da esperanza”.

En el cierre del XXV Festival de Teatro Universitario se anunció que las obras ganadoras fueron Post México, de Iván López Renteral, estudiante de la Licenciatura en Artes Visuales, que obtuvo tres de los cinco premios de la Categoría A, así como menciones honoríficas; y El Oso, de Antón Chéjov, dirigida por Roberto Benítez, ganadora en la Categoría B.

Asimismo, el 28 de octubre inició la postemporada del festival, en la cual se mostraron algunos de los montajes galardonados, así como los que recibieron mención honorífica. Además se tiene programada una pequeña gira en las regiones universitarias.

El Oso, primer lugar en la Categoría B (Foto: DGDC)

El Oso, primer lugar en la Categoría B (Foto: DGDC)

 

Esfuerzo universitario
En el recuento de este evento artístico, cultural y académico, Arturo Meseguer destacó que a lo largo de seis días, del 17 al 22 de octubre, los universitarios retomaron a los dramaturgos –clásicos y contemporáneos– o tomaron la pluma para presentar obras que develaron la realidad que actualmente viven.

“Por ejemplo, Batallas ambientales montada por estudiantes de la Facultad de Ciencias Químicas, toca el tema de la defensa de la tierra, en el que la violencia desgraciadamente también estuvo reflejada. Los chavos están haciendo dramaturgia para develar la realidad.”

Resaltó que año tras año crece la participación de estudiantes, maestros, trabajadores, egresados y jubilados de la UV; en esta ocasión recibieron más de 35 propuestas de todas las áreas académicas, de las cuales lamentablemente sólo pudieron ser seleccionadas 18, ya que se dispuso de pocas fechas para montarlas.

Por día, recordó, se presentaron tres obras. Las funciones iniciaban a las 19:00 horas, pero el público hacía fila 45 minutos antes; todas las noches la Sala “Dagoberto Guillaumin” se llenó rápidamente e incluso resultó insuficiente ante el aforo registrado.

Sobre el trabajo realizado detrás de escena, mencionó que estuvo a cargo de aproximadamente 20 técnicos, quienes tuvieron jornadas de 12 horas sin descanso, las cuales iniciaban antes del primer montaje y concluían al quitar toda la escenografía y dejar listo el escenario para el siguiente día.

“No conozco un teatro en México que realice tres montajes para tres funciones diferentes en un sólo día, nosotros hicimos 18 montajes en seis días, es un enorme esfuerzo para todos los técnicos.”

La mulata de Córdoba, mención especial por vestuario y maquillaje (Foto: DGDC)

La mulata de Córdoba, mención especial por vestuario y maquillaje (Foto: DGDC)

 

Las obras ganadoras
Post México, el montaje ganador y que pertenece a la región Veracruz, obtuvo los premios a Mejor Puesta en Escena, Mejor Dirección y Mejor Escenografía, en la Categoría A, en la que compitieron obras de alumnos, maestros y trabajadores de diferentes facultades, centros, institutos y Talleres Libres de Arte. También recibió menciones honoríficas por el mejor vestuario y a la creación en puesta en escena.

El Premio “Manuel Fierro” al mejor actor fue para José Karlo Zamudio Sánchez, por el papel de “Bombón” en la obra Dibujitos desanimados. El Premio “Guadalupe Balderas” a la mejor actriz lo ganó Alicia Villafuerte de la obra Las troyanas.

En la Categoría B participaron únicamente alumnos y maestros de la Facultad de Teatro. El primer lugar fue para El Oso, dirigida por Roberto Benítez; el segundo lugar, para Irse y volver en tren, de Vladimir Arzate, y el tercer lugar, para El cedro gris, de Dalia Rodríguez de Leo.

Karla Piedra, de El cedro gris, obtuvo el Premio a la Mejor Actriz; y Víctor Manuel Robles Aguilar, el de Mejor Actor.

En la Categoría C, en la que participaron egresados de la Facultad de Teatro, el premio único fue para la obra Bajo el silencio, de Oscar Liera.

Norma Baruch y Guadalupe López participaron en Princesas desesperadas

Norma Baruch y Guadalupe López participaron en Princesas desesperadas

 

En esta edición se entregaron menciones honoríficas por su compromiso, dedicación y formación integral, a las obras Princesas desesperadas y al grupo teatral Ese Perro está Enroscado.

Por su musicalización en vivo, a la obras Irse y volver en tren, El Oso y La mulata de Córdoba. Por vestuario, a Las troyanas, Cabaret trágico y Princesas desesperadas.

La mulata de Córdoba recibió mención especial por el maquillaje y vestuario del personaje “La Muerte”. Las sedes Huasteca y Totonacapan de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI) fueron reconocidas por su compromiso con el rescate de la lengua y costumbres de los pueblos originarios.

La Sala “Dagoberto Guillaumin” tuvo un lleno total

La Sala “Dagoberto Guillaumin” tuvo un lleno total

 

Riqueza cultural
El Festival de Teatro Universitario es una excelente forma de acercar la cultura a la comunidad de la UV y a la sociedad xalapeña, al presentar obras de excelente calidad y con acceso gratuito, coincidieron espectadores y participantes.

“Es bueno ver que alumnos de otras facultades están relacionados con el teatro. El festival es muy bueno porque promueve la cultura y la convivencia entre los estudiantes, ojalá se realizara en las demás regiones de la Universidad”, expresó Abril Méndez Pimentel, estudiante de las facultades de Teatro y Psicología.

Debido a la calidad de las obras, algunos de los asistentes consideraron que sería prudente cobrar una cantidad simbólica, como apoyo a los estudiantes, maestros y demás participantes, quienes dedican no sólo tiempo sino en ocasiones recursos económicos para la elaboración de vestuario, maquillaje y escenografía.

“Este Festival es muestra de la riqueza cultural que tienen la ciudad y la Universidad. No estaría mal cobrar, sería un apoyo e incentivo para los actores y para todos los que están detrás de las obras presentadas”, opinó Adrián Ricardo Velasco Reyes, estudiante de posgrado del Centro de Investigaciones Tropicales (Citro).

Griselda Cristóbal Sánchez, también estudiante de posgrado del Citro, comentó que es una buena opción de entretenimiento para los estudiantes.

Norma Beatriz Baruch Hernández y Guadalupe López Castellanos, coordinadoras de Clínicas y de la Especialidad en Odontología Infantil de la Facultad de Odontología y participantes en la obra Princesas desesperadas, expresaron que el festival les dejó una grata experiencia.

“La Universidad ofrece gratuitamente una gran cantidad de actividades culturales, el Festival de Teatro es una de ellas, pero el público las ha desaprovechado”, comentó Guadalupe López.

Abril Méndez Pimentel, estudiante de Artes y Psicología

Abril Méndez Pimentel, estudiante de Artes y Psicología

 

Un teatro propio
En los últimos años, el Festival de Teatro Universitario ha tenido una fuerte, constante y creciente participación de estudiantes, profesores, trabajadores, jubilados y egresados de la UV, no sólo en escena también como público, lo que ha hecho insuficiente la Sala “Dagoberto Guillaumin” del Teatro del Estado.

En los seis días del evento, el público mostró mucho interés en cada una de las obras presentadas, que se reflejó en el lleno total del recinto. Las personas llegaban con mucha anticipación, lo que no era garantía de alcanzar un lugar.

Fue común observar una larga fila de personas en espera de ingresar y ver, por lo menos, una de las tres obras que se exhibieron en esta edición del festival.

Ante esta situación, se le preguntó a Arturo Meseguer la posibilidad de que las obras participantes se presentaran en la Sala “Emilio Carballido”, que tiene mayor capacidad, a lo que respondió que es complicado pues como las obras son en pequeño formato, visualmente se perderían en un espacio más grande.

Además, “no debemos olvidar que los jóvenes no son actores profesionales, sino estudiantes de las diferentes áreas académicas de la UV y de la UVI, que utilizan el teatro como una forma de expresión pero no es su profesión, entonces consideramos que están protegidos en un espacio pequeño”.

Expuso que una solución sería que la UV tenga su propio teatro, adaptado a las necesidades de la comunidad universitaria, “esto buscamos desde hace mucho tiempo”.

Meseguer Lima adelantó que la titular de la DGDC, Esther Hernández Palacios, ya trabaja en un proyecto que al momento es denominado Centro Universitario de las Artes, pero por la falta de recursos económicos no se ha podido concretar.

Ricardo Velasco, Griselda Cristóbal e Irma Pacheco, del Citro

Ricardo Velasco, Griselda Cristóbal e Irma Pacheco, del Citro

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