Arturo Bocardo Valle
Veracruz entrará en una situación crítica si no se asume un papel protagónico en la vigilancia del manejo financiero
David Sandoval Rodríguez
El presente año probablemente brinde estabilidad al país, lo cual lo desplazaría de un escenario negativo, ello debido a un blindaje financiero que se ha implementado, explicó Arturo Bocardo Valle, director de la Facultad de Economía.
«México tiene reservas monetarias que pueden sostener cualquier eventualidad; por otra parte, los primeros tres meses del año siempre son difíciles para todas las economías, al ocurrir los ajustes en los presupuestos que comienzan a tomar sus dimensiones».
Entrevistado con el propósito de saber el comportamiento económico del país para este 2016 y sus repercusiones en Veracruz, el Director de Economía señaló que tomando en cuenta el panorama internacional, es posible observar deficiencias en los diversos tipos de cambio con respecto al dólar; en ese sentido, México tiene dos variables muy visibles: el tipo de cambio y el precio internacional del petróleo.
Bocardo Valle, cuya línea de investigación abarca las finanzas públicas y el desarrollo económico, así como teoría y métodos de las finanzas públicas, recalcó que la política de controlar el tipo de cambio «será lo que deberá ocuparnos para evitar que el dólar llegue a los 20 pesos a finales del año, con expectativas de que se mantenga entre los 16 y 17 pesos, ésa va a ser la batalla central: evitar un deslizamiento mayor para que nuestras compras no se vean afectadas y mantengamos el mismo nivel de consumo».
Por otro lado, precisó que el precio del petróleo no afecta considerablemente a todas las entidades federativas, y desde su perspectiva no habría efectos negativos mayores.
Controlando el tipo de cambio mediante intervenciones como las que se han efectuado será posible mantener la dimensión comercial con Estados Unidos, al ser la nación con la que se realiza el mayor intercambio comercial.
El académico refirió que México no es un país monocromático, por el contrario, es muy diverso y se debe considerar que existen entidades donde se registra un crecimiento económico extraordinario y los niveles de pobreza entre estados son muy disímiles, es decir, «no todo el país sufrirá las mismas consecuencias ni en las mismas dimensiones».
Veracruz: con deudas y elecciones
Para referirse al caso de Veracruz se debe tomar en cuenta la proximidad de un evento electoral como es el cambio en la gubernatura, ahora por un periodo extraordinario de dos años, «probablemente los primeros seis meses de 2016 veremos cuantiosas obras de infraestructura, se fomentarán las inversiones, pero debe tomarse en cuenta que todo ello sucede con miras a prevenir un cambio en la preferencia electoral, que podría presentarse a mediados del año».
No obstante advirtió: «La realidad es que tenemos un estado con una deuda considerable, como es del conocimiento público, lo cual ha generado manifestaciones de toda índole porque a los trabajadores no se les cubren sus necesidades básicas, como el pago de salarios o los aguinaldos, que por derecho les corresponden, al igual que a los trabajadores jubilados, como pudimos ver lo que ocurrió con el gremio de profesores en semanas pasadas».
Se puede observar un Veracruz con rezago y éste continuará, por lo tanto representa un serio conflicto para el crecimiento económico y afecta otras variables como el empleo y la migración, destacó el economista.
Al respecto, señaló que desde hace pocos años la entidad comenzó a aparecer en el mapa de las migraciones internacionales con una emigración significativa; este fenómeno genera una fuerte entrada de remesas a los hogares veracruzanos que reportan implicaciones económicas positivas en sus primeros años para las familias que permanecen en sus localidades.
Al final del año, cuando ocurra la sucesión gubernamental, se podrá observar a un estado que buscará recuperarse de la situación económica imperante, con un rezago económico considerable, a lo que se suma un constante incremento en el nivel de pobreza, particularmente en las zonas rurales, por lo que se presentará un gran reto.
Consideró además el manejo del presupuesto como el mayor desafío que se enfrente en Veracruz debido al proceso electoral próximo, cuyas precampañas iniciarán el 7 de febrero, tendrán la votación el domingo 5 de junio para que el 3 de septiembre el Organismo Público Local Electoral (OPLE) publique en la Gaceta Oficial del Estado el nombre del candidato ganador, quien entrará en funciones el jueves 1 de diciembre.
«En el sentir de la población está presente que se avecina un gobierno de dos años, un periodo de transición, pero esto no es así, al contrario, se trata de un lapso fundamental, no nos podemos permitir más un mal manejo en el estado, si el gobierno entrante y el actual no asumen un papel protagónico en términos de vigilar el manejo financiero vamos a entrar en una era gubernamental con una situación económica muy crítica en Veracruz.»
Bocardo Valle enfatizó que en la próxima administración estatal no deberá reducirse la inversión en un rubro fundamental como la educación, pues en la medida que exista una mayor cobertura educativa con avances de calidad en todos los niveles de instrucción, será posible una transformación de la sociedad mexicana.
Otro rubro que no debe descuidarse es la seguridad porque es lo que permite el desempeño de todas las actividades, deben ser los dos sectores primordiales de atención, seguidos de cerca por el ámbito de la salud, aseveró.
Potencial para mitigar el escenario económico
El potencial que tiene Veracruz para contrarrestar el escenario económico se puede basar en su vocación agrícola, indicó el académico, a nivel nacional destacan la cafeticultura y la citricultura, incluso en algún tiempo se tuvo el liderazgo nacional y los primeros lugares internacionales en la producción de limón persa y naranja.
«En algunos aspectos, dicha vocación ha sido abandonada o cuando menos no se ha atendido la agricultura en la dimensión requerida; por otro lado, se han impulsado otras vocaciones, una vocación industrial o productiva, sin embargo vemos que esto no ha permeado a lo largo del estado de Veracruz –que es inmenso y diverso–, también podemos ver que tiene particularidades agrícolas. ¿Dónde creo que debe hacerse un cambio significativo? En detonar estos aspectos agrícolas, cuidándolos para alcanzar mercados de calidad, esto es lo que nos ha faltado.»
Detalló que en la zona sureste hace décadas se pretendió una vocación con productores de hule, pero no se puede afirmar la existencia de una industria hulera como sucede en Tailandia o Brasil que son líderes exportadores.
«Carecemos de una política orientada al desarrollo de calidad, sin considerar cantidades masivas de producción», reconoció; «en la medida que pudiera obtenerse una posición a nivel mundial con base en la calidad productiva, Veracruz tendría posibilidades para lograrlo, además de que existen una diversidad climática y una tradición en la producción, lo necesario sería implementar políticas y la apuesta debería ser hacia el sector primario, a la agricultura, considerando generar una producción de calidad».