Año 15 No. 651 Septiembre 12 de 2016 • Publicación Semanal

Xalapa • Veracruz • México

Egresada cursará doctorado en Universidad de Marsella

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Elva María Novoa del Toro es becaria de excelencia Conacyt

Elva María Novoa del Toro es becaria de excelencia Conacyt

 

David Sandoval Rodríguez

Elva María Novoa del Toro, egresada de la Maestría en Inteligencia Artificial, cursará un doctorado en el Centro de Investigación en Cancerología (CRM) de la Universidad de Aix-Marsella, en Francia, al ser seleccionada en la convocatoria 2016 de las becas de excelencia que otorga el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Su tema de investigación se denomina “El uso de aprendizaje de máquinas para predecir tratamientos óptimos personalizados a pacientes con tumores de cáncer en el páncreas”, que se inscribió dentro del área temática “Ciencia y tecnología de la salud”.

La universitaria, quien cursó su posgrado en el Centro de Investigaciones en Inteligencia Artificial (CIIA) de esta casa de estudio, reconoció que oportunidades como ésta no se dan en maceta, “tienes que aprovecharlas, si tienes el promedio, si te gusta estudiar y te apasiona un tema, si encuentras una persona que te abra las puertas en el extranjero, que te acepte en
su equipo de investigación, adelante, es una bendición. Creo que valen la pena los dolores de cabeza, finalmente voy a vivir lo que ha sido mi sueño desde hace mucho tiempo: vivir en el extranjero, en este caso por tres años”.

Su investigación se enfoca en la inteligencia artificial aplicada para generar tratamientos personalizados en pacientes con cáncer de páncreas; el 1 de noviembre iniciará su formación dentro del equipo de investigadores encabezados por Pedro Ballester, científico español líder en la investigación sobre cáncer y director del CRM.

Refirió que su trabajo de maestría se enfocó a la detección temprana de la enfermedad de Alzheimer, que deriva de los estudios que se realizan en el área de inteligencia artificial aplicada a medicina.

Compartió que se enteró de las becas de excelencia del Conacyt cuando iba a ingresar a la maestría, durante su estancia en ésta logró una
beca a nivel nacional y ahora una para realizar estudios que cubren la duración de un posgrado completo en el extranjero.

Comentó que la Maestría en Inteligencia Artificial es la única en el país que está dentro del Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) del Conacyt y obtuvo el apoyo respectivo al ingresar. Su trayectoria académica fue determinante para lograr lo anterior, aseguró.

Durante su maestría realizó una estancia de investigación en la Universidad de Queen en Kingston, Canadá, donde trabajó con un grupo de investigadores de neurología para realizar una segmentación manual, la cual consistió en marcar en imágenes cerebrales las secciones para analizar. “Me dieron todos los datos para que los procesara”.

Por otro lado, precisó que el área de su investigación de doctorado se ubica bajo uno de los rubros específicos que tienen prioridad para el Conacyt, en este caso se denomina problemas de salud y enfermedades emergentes en México.

Buscaba una cura para el cáncer
Oriunda de Ciudad Guzmán, en Jalisco, Elva María estudió en el Instituto Tecnológico una Ingeniería en Sistemas Computacionales y egresó con promedio de 97.69.

“Cuando decidí estudiar una maestría, por cuestiones personales y problemas de salud muy cercanos con respecto al cáncer, me llamó la atención cómo han surgido tantos avances tecnológicos y todavía no existe una cura para esta enfermedad; entonces platiqué con algunas personas y me dijeron que tenía que formar un equipo multidisciplinario, me puse en contacto con una amiga que es médico, me hizo notar que existen diversos tipos de cáncer y cada órgano afectado requiere de una atención específica.

”Por ello me puse a revisar todos los programas dentro del PNPC para ver cuál me podía ayudar, me llamó la atención el de la Universidad Veracruzana, revisé las líneas de investigación y me di cuenta que uno de ellos había trabajado con cáncer cérvico-uterino.”

Refirió que para poder realizar un diagnóstico no es necesario un método invasivo pues es posible hacerlo mediante análisis de imágenes.

Se puso en contacto con Héctor Gabriel Acosta Mesa, académico del CIIA, y ya dentro de la maestría se dio cuenta de que el investigador había hecho lo que ella tenía planeado. “Entonces pensé que no tenía sentido seguir en este tema y trabajé con él la enfermedad de Alzheimer, que era algo relativamente nuevo para él pero también tiene mucha experiencia con aplicaciones de inteligencia artificial en medicina, es experto en aprendizaje automático y análisis de imágenes, ésas fueron las técnicas que utilizamos para hacer la detección”.

Se requirió de una colaboración con expertos en neurología y se sumaron a la investigación Juan Fernández Ruiz, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y Ángeles García Rodríguez, del Departamento de Neurociencia
de la Universidad de Queen en Canadá.

“Desde hace un tiempo me apasionan las aplicaciones de IA en medicina porque creo que es una manera de aportar un poco a lo que hace falta a nivel mundial, atendiendo enfermedades con el uso de la tecnología; nosotros podemos aportar desde un ámbito totalmente diferente sin necesidad de ser expertos en la enfermedad porque procesamos los datos de manera directa.”

Recordó que cuando buscaba el apoyo para obtener uno de los requisitos para ir al extranjero, una carta de apoyo en la que se invita a participar en un equipo de investigadores, muchos profesionales dudaban porque no era médico, “pero no es necesario porque yo voy a trabajar con los datos y éstos hablan por sí solos”.

Fue entonces que Pedro Ballester, investigador del CRM de la universidad francesa, con experiencia en las áreas computacional y de medicina, redactó su carta de aceptación. “Ballester elabora medicamentos y es líder en el grupo de investigación desde hace dos años”, detalló.

Comentó que su ingreso a la maestría no fue tan fácil como para el doctorado pues éste sucedió gracias a un contacto que existe con Ballester, ya que Efrén Mezura y él son colegas. Fue el especialista español quien solicitó estudiantes para investigación, entonces sugirió contactarle ya que explicó que tenía interés por continuar sus estudios con un doctorado.

El mismo día que le escribió, el investigador respondió solicitando su currículum y tuvieron una videoconferencia para conversar sobre su interés. Además, Ballester se ha dedicado a apoyarlo con todos los trámites necesarios para ingresar al centro.

Respecto de los requisitos para obtener la beca, Elva comentó que algunos son fáciles de obtener, como la CURP y el acta de nacimiento, pero lo más difícil fue lograr la carta del sector interesado en México, que debe redactarla una institución pública o privada donde destaquen la importancia de la investigación y sus aplicaciones. En este caso revivió las dudas de los especialistas al no tener una formación en ciencias de la salud, pero finalmente el CIIA pudo completar tal requisito.

Los alumnos del doctorado al que asistirá provienen de varios países, sus clases serán en
inglés pero esto no es un inconveniente, dado que la estudiante conoce el idioma desde que asistía al preescolar.

En cuanto al francés, reconoció que comenzó a estudiarlo durante este año y tendrá que utilizarlo para realizar todo tipo de trámites además de la convivencia diaria en la ciudad, “en la Universidad Veracruzana me ofrecieron clases gratuitas de francés y de inglés”.

Apoyo familiar, indispensable
Novoa del Toro compartió su emoción por la experiencia que comenzará en octubre.

Estar lejos del hogar durante la maestría también ha sido parte de su formación, puntualizó la universitaria: “En mi familia están muy contentos y muy orgullosos de que me esté fijando metas tan altas; incluso venir a la maestría no fue fácil, tuve que desprenderme de mi familia porque vivía con mis papás. Me casé e inmediatamente venimos a Xalapa, estaba acostumbrada a muchas cosas que acá no podía tener. Fue un cambio muy drástico que me ha ayudado a prepararme para lo que viene”.

En este momento su mayor preocupación es conseguir hospedaje porque para obtener la visa de estudiante residente necesita un contrato de arrendamiento y el costo del alquiler es elevado en la región.

Novoa del Toro calificó como fundamental el apoyo de su esposo para cursar la maestría y realizar los trámites de ingreso al doctorado.

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