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Es urgente
la instrumentación de un banco de información sobre
la biodiversidad de Veracruz que, a partir de la compilación
de los estudios existentes y la actualización constante,
se convierta en el referente que indique nuestro avance o retraso
en la materia, aseguró Mario Vázquez Torres, investigador
de la Universidad Veracruzana reconocido en todo el mundo por su
trabajo científico en torno a las Cycadas.
Durante
la reunión celebrada para definir la Estrategia estatal sobre
conservación y uso sustentable de la Biodiversidad en Veracruz,
Vázquez Torres sugirió que este banco de información
deberá ser de fácil acceso y gratuito. |

Mario Vázquez Torres. |
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Bajo la premisa de que no son las buenas intenciones sino el conocimiento
lo que permite respaldar propuestas de recuperación de ecosistemas
degradados, el investigador habló de la importancia de este
banco de datos en la definición de la estrategia estatal
de biodiversidad, que será el eje rector de las nuevas políticas
de conservación ambiental de Veracruz.
Para dar una idea de la importancia de la información, mencionó
que estudios muy recientes indican que la flora concentrada en el
municipio de Banderilla es muy alta gracias al bosque del predio
La Martinica, y que las mil 200 especies que la conforman equivalen
al 15 por ciento de la riqueza vegetal de Veracruz, aunque viven
en menos del uno por ciento de su territorio.
Añadió que algunos estudios muestran que una hectárea
de selva alta del volcán San Martín Pajapan contiene
en promedio al menos 250 especies de plantas, y que ocho hectáreas
contienen más de 400 especies representadas con casi todos
los biotipos.
Infirió de ahí que la riqueza de cada hectárea
en esa zona representa al menos el 10 por ciento de la riqueza total
de las selvas húmedas de Veracruz, calculada en dos mil 500
especies: “por cada hectárea de selva destruida se
está devastando el potencial natural del 10 por ciento de
la flora de la selva lluviosa mexicana”.
Gracias a estos estudios de las selvas del trópico se sabe
que un número reducido de especies de árboles tiene
altas densidades, y muchas otras, proporciones bajísimas
(un individuo por cada ocho hectáreas, por ejemplo), “Sin
duda son tan importantes las especies abundantes como las raras
y con implicaciones muy concretas en programas de conservación,
restauración, remediación, reforestación y
uso sustentable.
”Si existieran al menos 50 estudios similares para lo que
aún nos queda de selvas lluviosas, tendríamos algunas
herramientas iniciales que respaldasen propuestas de recuperación,
y no sólo buenas intenciones”.
La otra opción efectiva y gratuita de regeneración
de los ecosistemas, dijo, consiste en dejarlos en paz, sin ningún
tipo de intervención humana, lo cual es simplemente imposible.
Los llamados problemas de la naturaleza, de los ecosistemas, de
los recursos naturales y, peor aún, de la ecología,
no pertenecen a entes intangibles: “Los problemas no son de
la naturaleza, son nuestros problemas y nos afectan a nosotros tanto
como al resto de los seres vivos”.
Para el investigador, quien ha descubierto y descrito científicamente
más de 20 nuevas especies de plantas, esta tremenda pobreza
de conocimiento, tanto de la flora como de la fauna, es válida
para todos los ecosistemas. “Esta realidad justifica la necesidad
de acelerar los trabajos de campo y de otra índole, relativos
a nuestros ecosistemas y su biodiversidad”.
Ante un panorama poco alentador y, en algunos casos, de franca desolación,
Mario Vázquez propuso reforzar la formación biológica
de los estudiantes, completando su capacitación con cursos
clave de las humanidades que favorezcan su desenvolvimiento en el
medio rural.
También planteó la necesidad de crear revistas especializadas
en la biodiversidad de Veracruz, tanto de alto nivel científico
como de excelente calidad en el nivel de la difusión, y señaló
que la profesionalización en cuanto a biodiversidad deberá
insistir en varios niveles, desde el técnico superior universitario
hasta el posgrado.
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