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Violencia contra la mujer no se resuelve con leyes punitivas: Adriana Rodríguez

  • Adriana Rodríguez Barraza, investigadora del Instituto de Investigaciones Psicológicasdictó la ponencia “Violencias hacia las mujeres: entre más sutiles más eficaces” 

 

Adriana Rodríguez Barraza impartió la ponencia virtual “Violencias hacia las mujeres: entre más sutiles más eficaces”

Adriana Rodríguez Barraza impartió la ponencia virtual “Violencias hacia las mujeres: entre más sutiles más eficaces”

 

Claudia Peralta Vázquez 

10/12/2020, XalapaVer.- La violencia en contra de las mujeres no se resuelve sólo con leyes punitivas, sino con cambiar aquellas ideas o creencias que las someten a estereotipos que no quierey que las ponen en riesgo, expresó Adriana Rodríguez Barraza, investigadora del Instituto de Investigaciones Psicológicas (IIP) de la Universidad Veracruzana (UV). 

El miércoles 25 de noviembre, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer, impartió por Zoom la ponencia “Violencias hacia las mujeres: entre más sutiles más eficaces”, a invitación de la Facultad de Psicología región Veracruz, como parte de las acciones propuestas en el Plan de Trabajo de la Unidad de Género para prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género. 

LDoctora en Antropología Social por la Universidad Autónoma de Madrid llamó a reflexionar, replantear y transformar esas ideas o creencias, y aprender a resolver los conflictos sin violencia desde los diversos ámbitos: familia, escuela y sociedad. 

Para dar cuenta de las violencias como fenómeno complejo, citó al sociólogo noruego Johan Galtung, quien a través del triángulo de la violencia explica la dinámica y manifestación de éstas. 

Dio a conocer que la de tipo directo es la más visible y menos letal, se da por acción, se identifica un actor y tiene una amplia cobertura mediática. 

En presencia de autoridades universitarias, señaló que la violencia cultural tiene que ver con las creencias y los introyectos que se toman como verdaderos y configuran nuestro mundo. 

“Podría equipararse de algún modo a la violencia estructural propuesta por Bordieu pues encontramos algunos elementos comunes. 

Por su parte, la violencia estructural se relaciona con el modo de operar de las instituciones, está legitimada por el Estado y alimentada por creencias personales, no puede identificarse un perpetrador. 

Sin embargo, dijo, existe una dinámica y relación entre ellas, mientras que la cultural es casi imperceptible, pero puede verse en nuestras relaciones con las demás personas. 

En tanto, la violencia directa tiene sus raíces más profundas en la estructural y la culturalde ahí la importancia de atenderlas, subrayó Rodríguez Barraza. 

Todo lo anterior puede observarse desde la atención médica, donde la mayoría de los estudios no desagregan por sexo, y sin tomar elementos diferenciales los diagnósticos no son los más adecuados. 

 Generalmente, casi en automático se seda a las mujeres con medicamentos sin atender realmente los problemas de salud que presentan como: presión arterial, ansiedad, alteraciones del sueño y ritmo cardiaco, atribuibles a extenuantes jornadas de trabajo dentro y fuera de casa. 

Dichos padecimientos también se relacionan con la precariedad laboral, donde ellas se encuentran en mayor desventaja que el varón. 

Por rol, también se les suele responsabilizar como únicas cuidadoras de las personas y causantes de las reacciones violentas de los varones. 

La especialista de la UV mencionó a la antropóloga Marcela Lagarde, quien dice: “Se cree que las mujeres y sus cuerpos son de los otros y para los otros, y están a disposición para el cuidado continuo o para ser usados”. 

De igual modo, se refirió a los estereotipos de género que atentan contra la salud de niñas, adolescentes y mujeres, con modelos que no tienen relación con la realidad latinoamericana y ocasionan desórdenes alimenticios. 

Parte de no darnos cuenta de ciertos tipos de violencias tiene que ver con la naturalización, a través de la cual consideramos el ser de determinadas cosas como natural. 

Por ejemplo, el caso de las madres de familia que no se sientan a comer en la mesa con tal de servirles a los demás; o los programas, canciones y series transmitidas en medios de comunicación y redes sociales donde se normaliza el acoso, la precarización laboral, la estigmatización por denunciar, la deshumanización que convierte a las mujeres en objetos, así como el control de los cuerpos femeninos a través de la homogenización de los modelos normativos. 

Finalmente, Adriana Rodríguez destacó cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), las cuales indican que los principales delitos cometidos en contra de las mujeres son los relacionados con el abuso sexual42.6 por ciento, y violación, 37.8 por ciento. 

De manera virtual atendieron la conferencia: Javier López González, director de la Facultad de Psicología región Veracruz; Magali Huerta Reyes, secretaria Académica de la Facultad; Vanessa Gutiérrez Cotaita, representante de la Unidad de Género; Ricardo Flores, coordinador regional de la Unidad de Género; Jesús Andrés Cruz Del Ángel, consejero alumno; y Ulises Gonzalo Aguirre Orozco, secretario Académico regional.