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Separación entre mujer y poder está muy consolidada en universidades

  • Investigadoras reflexionaron en torno al Espacio de Mujeres Líderes de Instituciones de Educación Superior 
  • En la plenaria “A diez años de EMULIES, experiencias y retos”, en el marco del II Congreso de Políticas Universitarias de Género, Interculturalidad e Inclusión 

 

Investigadoras de diversas instituciones participaron en la plenaria “A diez años de EMULIES, experiencias y retos”

Investigadoras de diversas instituciones participaron en la plenaria “A diez años de EMULIES, experiencias y retos”

 

Claudia Peralta Vázquez 

14/06/2021, Xalapa, Ver.- Investigadoras de diversas universidades de Latinoamérica reflexionaron en torno a las experiencias y retos del Espacio de Mujeres Líderes de Instituciones de Educación Superior (EMULIES), de la Organización Universitaria Interamericana (OUI), el pasado 10 de junio, en el marco del II Congreso de Políticas Universitarias de Género, Interculturalidad e Inclusión. 

En la plenaria “A diez años de EMULIES, experiencias y retos”, transmitida por Facebook Live, se contó con la intervención de Martha Alicia Tronco Rosas, del Instituto Politécnico Nacional (IPN); Pepi Patrón Costa y Patricia Ruiz Bravo, de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), y Patricia Rojo, de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Argentina. 

Entre sus reflexiones, destacaron la separación de la mujer y el poder en las IES, el tiempo que tarda una mujer en acceder a un puesto directivo en comparación con un hombre, y la ausencia de voz y asimetría en las estructuras de poder y en la academia. 

Al inicio, Giuliana Cassano Iturri, moderadora y coordinadora de EMULIES, dio a conocer que este programa se creó en el marco de la OUI, en 2011, como un espacio de reflexión e intercambio formado por mujeres líderes de las instituciones de educación superior (IES). 

Desde su creación, dijo, este organismo ha trabajado en el fomento de la investigación y fortalecimiento del desarrollo de capacidades a partir de la formación; también ha promovido la cooperación, el intercambio, e impulsado la difusión y comunicación alrededor de las mujeres que ocupan puestos de liderazgo y toma de decisiones en las instituciones de la región. 

“EMULIES empezó a crecer y a fortalecerse, convocó rectoras, vicerrectoras, decanas, jefas, directoras y otras líderes para que compartieran sus experiencias y dificultades relacionadas al género, la toma de decisiones en las IES, y el tema del acceso al poder. Por ello, a 10 años de ese acontecimiento decidió hacerse esta reflexión sobre el camino recorrido y los retos por venir”, apuntó. 

Martha Alicia Tronco, quien es doctora en Filosofía y Ciencias de la Educación por la Universidad de Salamanca, dio un panorama de las acciones que en el IPN han emprendido con relación a temas de género. 

Señaló que derivado de una investigación se dieron cuenta que un hombre tarda entre cinco y 15 años para acceder a un puesto directivo, mientras que una mujer entre 20 y 40 años.  

“Estos datos nos hicieron repensar las estrategias que se estaban diseñando para poder hacer efectivo el posicionamiento de mujeres en puestos directivos.” 

De ahí en adelante empezaron a realizar eventos, campañas, talleres y encuentros para acercar a las mujeres a cuestiones de empoderamiento. 

Pepi Patrón, profesora principal de la sección de Filosofía del Departamento Académico de Humanidades de la PUCP y una de las fundadoras de EMULIES, destacó que la separación entre la mujer y el poder es una historia que data de hace tres mil años. 

“La pelea es larga, tenemos atrasos, retrocesos, pero creo que EMULIES es un espacio extraordinario que nos ha ayudado a pensar.” 

Expuso que la separación entre la mujer y el poder es larga, antigua y está muy consolidada en las instituciones académicas. “Las dificultades de las mujeres para acceder al poder en las IES es larga, persistente y hay retrocesos”. 

En este sentido, se pronunció por enfrentar el tema no sólo por el hecho de ser mujeres, sino por ser feministas, contar con agendas y enfoques de género. 

“Hay que tenerlo en cuenta porque esas distinciones que iniciaron tres mil años atrás, esas viejas distinciones siguen vigentes en el mundo contemporáneo y en la academia.” 

Asimismo, expuso la ausencia de voz y asimetría en las estructuras de poder y en la academia. Un claro ejemplo son los dos finalistas a la presidencia de su país, pues ninguno mantiene una agenda de género. 

EMULIES ha sido muy importante al contribuir en la construcción de agendas institucionales que, por un lado, les permita ser conscientes de lo vivido, y por el otro, de que la lucha sigue abierta, manifestó. 

Por lo anterior, propuso repensar las nociones de poder como acción colectiva que resulta de un acuerdo, de deliberaciones, de conversaciones y encuentros. 

“Dejar el poder en su versión puramente agonística, competitiva, y pensarlo como posibilidad de acción colectiva y concertada, puede ayudar a que no se congelen nuestras agendas y construir instituciones en las que cambiemos las estructuras dominantes.” 

Patricia Ruiz, doctora en Ciencias Sociales y profesora principal del Departamento de Ciencias Sociales de la misma institución, reflexionó sobre cómo evitar las culturas patriarcales y pensamientos pocos progresistas de varones en las IES cuando una mujer accede a un puesto de poder. 

“Hemos entrado, pero no somos bienvenidas y no es nuestro sitio, esta pregunta se fue desarrollando en EMULIES para lograr una presencia, liderazgo y lucha por ser reconocidas.” 

No se trata de reemplazar a los hombres, sino transformar a la institución universitaria, afirmó. 

En tanto Patricia Rojo, directora del programa Género y Universidad de la UNR, resaltó el propósito de EMULIES de fomentar y fortalecer el liderazgo femenino en las IES. 

Sin embargo, planteó que todas las IES tienen el deber de promover universidades cada vez más democráticas, inclusivas y socialmente responsables. 

“Aún falta mucho por hacer, pero destaco el esfuerzo y trabajo de cada una de las integrantes del programa, tenemos una responsabilidad institucional.”