• Ivonne Cisneros dijo que los afiliados de las zonas rurales son quienes reciben los peores servicios 

ngélica Ivonne Cisneros Luján, titular de la Comisión Nacional de Protección Social de Salud

Paola Cortés Pérez 

17/06/19, Xalapa, Ver.- Angélica Ivonne Cisneros Luján, titular de la Comisión Nacional de Protección Social de Salud, dijo que es necesario que el programa del Seguro Popular desaparezca para que pueda construirse un nuevo sistema nacional que realmente brinde servicios de salud y atención médica de calidad. 

La funcionaria federal dictó la conferencia “Proceso de transformación del Seguro Popular. La nueva política para la población sin seguridad social”, en el 5º Congreso Nacional de Educación en Salud Pública, organizado por el Instituto de Salud Pública (ISP) de la Universidad Veracruzana (UV) y la Asociación Mexicana de Educación en Salud Pública. 

En la plática llevada a cabo la tarde-noche del miércoles 12 de junio, Cisneros Luján mencionó que actualmente 54 millones de personas están afiliadas al Seguro Popular (SP), pero más de 60 millones no tienen ningún tipo de seguridad social, lo que representa un verdadero problema. 

Además, indicó, la mayor inversión del SP se ha registrado en las zonas urbanas, dejando en la indefensión a los afiliados de las zonas rurales, donde la población recibe los peores servicios de salud, pese a que representan el 70 por ciento de los asegurados. 

“No sólo es un tema financiero y de organización, se debe derribar la reforma neoliberal empleada desde 2003 que buscaba la privatización de los servicios de salud, y crear otra dirigida hacia una posición que garantice la salud y atender las enfermedades.” 

Ivonne Cisneros mencionó que el proyecto de reforma en salud propone una reorganización del sistema para construir lo que ya se conoce como el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, hasta finalmente llegar a un sistema nacional y único de salud para disminuir las inequidades en la atención a la salud. 

“Con esta reorganización se busca brindar bienestar a la comunidad y a la persona, para lograrlo debemos impulsar políticas de desarrollo económico y social, así como combatir la corrupción como una garantía de sostenibilidad financiera y eliminar la violencia.” 

Reiteró que el SP debe transformarse para dejar de ser un esquema de financiamiento y aseguramiento con una limitación en el acceso a los servicios de salud, para avanzar a la generalización de los mismos. 

El año pasado, detalló, se registraron 63 millones 335 mil 295 consultas externas; un millón 735 mil 350 egresos hospitalarios; 57 mil 783 casos de gastos catastróficos, de éstos alrededor del 70 por ciento se destinó principalmente a cuidados intensivos neonatales y cáncer de mama. 

Respecto a cómo pueden ayudar las escuelas de salud pública a alcanzar este objetivo, dijo que primero es necesario hacer una reflexión sobre sus programas educativos e investigación, posteriormente debe entenderse que el motor es la atención primaria a la salud. 

Asimismo, construir redes integradas de salud, considerar la relación interculturalidad y salud, hacer prevención desde el trabajo intersectorial, trabajar en una política farmacéutica, enfocarse más en la salud sexual y reproductiva, en la prevención del síndrome metabólico, tumores, enfermedades transmisibles, adicciones, salud mental, migración y salud, y en la formación de recursos en administración de unidades médicas.