- Abelardo Ávila, del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, impartió una conferencia en la Universidad Veracruzana
- Al participar en el coloquio “Alimentación, salud y sustentabilidad. Diálogos críticos para la acción colectiva”, destacó el valor del ecosistema de la milpa

Abelardo Ávila Curiel
Carlos Hugo Hermida Rosales
Fotógrafo: César Pisil Ramos
21/10/2025, Xalapa, Ver.- “La sindemia global –interacción y amplificación de múltiples pandemias interconectadas– de obesidad y desnutrición, agravada por el cambio climático, es la mayor amenaza para la salud humana en todas las partes del mundo”, aseguró Abelardo Ávila Curiel, del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”.
El médico impartió la conferencia magistral “Sistemas alimentarios hegemónicos. Su impacto en la desigualdad y la mala nutrición”, en el coloquio “Alimentación, salud y sustentabilidad. Diálogos críticos para la acción colectiva”, realizado por Universidad Veracruzana (UV) en la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI), en el marco del 15° aniversario de la Coordinación Universitaria para la sustentabilidad.
Abelardo Curiel comentó que el primer sistema alimentario en el continente americano lo controlaron nuestros ancestros de origen siberiano hace más de 10 mil años, quienes debieron domesticar las plantas a fin de volverlas comestibles.
“Cuando los españoles arribaron a Mesoamérica, la región contaba con alrededor de 25 millones de habitantes viviendo de la milpa, método agroalimentario fundamentalmente basado en ecosistemas y una gran interacción de especies”, afirmó.

El médico impartió la conferencia “Sistemas alimentarios hegemónicos. Su impacto en la desigualdad y la mala nutrición”
El sistema alimentario prehispánico fue reducido a prácticas productivas con autosuficiencia local precaria para la población indígena.
El expositor mencionó que dicho sistema fue sustituido por uno cimentado en trigo y ganadería según la costumbre europea, lo cual provocó un estancamiento demográfico porque no había comida suficiente.
Después, en la década de 1940 ocurrió una gran explosión tecnológica que propició la revolución verde, y un dominio de la agricultura basado ya no en saberes y pensamientos, sino en la explotación intensa de la superficie terrestre.
Abelardo Curiel declaró que la alimentación se convirtió en un negocio y posteriormente en un poder que incluso da capacidad al ejército de un país de invadir a otro.
“Hoy en día nos acostumbramos a verla como mercancía, y por ello deben articularse cadenas de producción, almacenamiento, conservación y empacado que conllevan un valor agregado”, puntualizó.
El médico destacó la importancia del ecosistema de la milpa, pues en él se favorecen interacciones ecológicas benéficas, como el control biológico de insectos, la fertilidad del suelo y la polinización, que brindan diferentes beneficios a las especies y a las comunidades humanas que la manejan.
“Los productos obtenidos de allí fomentan una dieta equilibrada y en algunas regiones del país aún es la base de su alimentación”, aseveró.
Categorías: General, Principales



