• “El reto de los psicólogos es mantenerse en constante formación, a fin de generar grupos colaborativos para las personas con discapacidad y sus familias”, afirmó la especialista de la Universidad de La Guajira, Colombia 
• Participó en el 1er Foro Internacional de Inclusión en Educación Superior de la Universidad Veracruzana 

Mayeliz Pinzón destacó la importancia de crear redes de colaboración y apoyo para las familias con un integrante en condición de discapacidad

David Sandoval Rodríguez 

04/12/2020, Xalapa, Ver.- Para producir un reconocimiento y apoyo a la inclusión de personas con discapacidad, los padres de familia deben iniciar con su ejemplo, recalcó Mayeliz Pinzón Escudero, psicóloga social y académica en la Universidad de La Guajira, en Colombia. 

La profesora presentó la conferencia “La educación inclusiva empieza en casa: pautas para desarrollar la inclusión desde la familia” dentro del 1er Foro Internacional de Inclusión en Educación Superior organizado por la Universidad Veracruzana (UV). 

Señaló que, por lo general, las familias no se preparan para recibir a un nuevo integrante que tiene una condición de discapacidad y esto dificulta a su vez la inclusión del infante, primero en el núcleo familiar, luego en la escuela y por consiguiente en la sociedad. 

“Tenemos que poseer una formación basada en valores, entender el valor de la igualdad, que cada uno es diferente y que somos sujetos de derecho; es decir, que no obstante seamos diversos tenemos los mismos derechos”, dijo la ponente. 

“Enseñemos a nuestros hijos que la inclusión comienza con el ejemplo; para la condición de discapacidad debemos tener en cuenta la noción de cultura, porque cada cultura genera a su vez una noción de discapacitado a partir de sus valores, sus significados y sus costumbres.” 

En muchas culturas se considera a la condición de discapacidad como una limitante para las personas, dado que no pueden desarrollarse en la sociedad y es ahí donde la familia tiene que aplicar la enseñanza de valores para fomentar la inclusión y la comprensión de la discapacidad, subrayó. 

“La familia es la primera institución de socialización, donde se comparten los valores que formarán al sujeto para interactuar con el entorno y los hijos puedan construir sus propios significados”, recordó a los asistentes a la videoconferencia. 

Reconoció que existe miedo a la exclusión porque los padres no saben abordar la condición de discapacidad, porque hay miedo al rechazo y a la exclusión. 

“Hay una situación real que debemos enfrentar y no estamos preparados: la diversidad; en la mayoría de los casos la discriminación comienza en casa porque los estándares de la sociedad nos dicen que los niños y los jóvenes tienen características que los definen como normales, y las personas que tienen hijos con discapacidad sienten que no encajan en los estándares sociales.” 

En su caso, declaró tener un hijo con síndrome de Asperger y dijo: “Muchas veces la exclusión comienza en casa y por los miedos a adaptarnos como familia a la condición de discapacidad, por eso lo primero que tiene que hacer la familia es aceptar la condición de discapacidad”. 

El mayor reto para los psicólogos es generar autoconfianza, “tenemos que empezar por nosotros mismos, así podemos generar la confianza en el paciente, en su familia, en el entorno; en la medida que haya confianza habrá posibilidades de hacer cambios”. 

Como padres de familia, enfatizó, se debe formar una red de apoyo trabajando con los maestros, los compañeros de la escuela, los familiares y los amigos, “porque todos ellos son parte de un proceso de integración social; en la medida que se amplíe la red de apoyo se ampliarán las oportunidades para esa persona con discapacidad”. 

Otro reto para los psicólogos está en generar ambientes favorables para personas en condición de discapacidad y va más allá de rampas y accesos, tiene que haber voluntad, apoyo e interés por ayudar, apuntó. 

En el mismo sentido, se deben generar espacios de cooperación y colaboración para las personas con discapacidad, “que vean que también aportan en las áreas fundamentales de la familia y así desde casa estamos desarrollando inclusión”.