• La UV, en coordinación con la incubadora cultural Nodo Sur, inauguraron el Primer Foro Ciudadano de Cultura y Derechos Culturales, que se realizó del 25 al 27 de septiembre en la Unidad de Humanidades

Lourdes Becerra Zavala

Carlos Hugo Hermida Rosales

28/09/2017, Xalapa, Ver.- Lourdes Becerra Zavala, coordinadora del Observatorio de Políticas Culturales de la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV), afirmó que sin una sociedad civil que se involucre en el desarrollo y gestión de la política cultural ésta no existe, ya que la idea de una política pública en general es que responda a las diversas necesidades de las personas que conforman la sociedad.

La universitaria participó en el conversatorio “Políticas culturales y sociedad civil” que se llevó a cabo el 25 de septiembre en el Salón Azul de la Unidad de Humanidades, como parte del Primer Foro Ciudadano de Cultura y Derechos Culturales, realizado por la UV y la incubadora cultural Nodo Sur.

La inauguración estuvo a cargo de Adriana Durán García, directora general de Nodo Sur, quien tras agradecer a todos los colaboradores destacó que el propósito del evento es elaborar una agenda ciudadana de cultura que permita dar seguimiento a las políticas y programas ejecutados por las instancias públicas municipales y estatales.

Lourdes Becerra expresó que una de las principales relaciones que debe existir entre la sociedad civil y el diseño de políticas culturales, es mostrar intereses particulares de grupos que requieren atención pero que poseen diferentes perspectivas.

Rodolfo Mendoza Rosendo

Relató que en México tradicionalmente el involucramiento de la sociedad civil en políticas culturales ha sido muy vertical, ya que desde principios del siglo XX se impuso la idea de que el Estado debía proponer las políticas culturales, lo cual permeo hasta finales del mismo siglo; añadió que es hasta el inicio del siglo XXI cuando la sociedad civil mexicana toma un papel más activo con una perspectiva de abajo hacia arriba.

“Hoy en día la sociedad civil ya no acepta las propuestas verticales del Estado y toma acciones que contribuyan al desarrollo, lo cual incluye el diseño de políticas culturales”, manifestó.

Lourdes Becerra enunció que es de suma importancia la multiplicación de foros culturales, ya que mediante éstos los gestores, promotores y emprendedores culturales exponen sus necesidades y logran un impacto en el diseño y planteamiento de una política cultural.

Rodolfo Mendoza Rosendo, coordinador general de la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU) de la UV, mencionó que la sociedad debe involucrarse con las políticas culturales pues sólo así éstas tendrán un avance real.

Oscar Hernández Beltrán

Comentó que la participación en políticas públicas se encuentra regida por muchas circunstancias y factores, y que aun cuando exista una voluntad social y comunitaria para realizar determinado proyecto, se debe tener en claro que ésta se transforma con el paso del tiempo

Enfatizó que las instancias gubernamentales, instituciones educativas y empresas culturales, primero deben realizar actividades culturales y después invitar a la población a que colabore dentro de ellas, ya que la participación de la gente es la que hace la diferencia y la que determina que una política cultural funcione o no.

Oscar Hernández Beltrán, gestor cultural independiente, declaró que la población mexicana atraviesa un proceso de maduración de ciudadanía política, y que actualmente se vive un boom en cuanto al surgimiento de grupos organizados de la sociedad civil en torno a proyectos culturales, ya que éstos se han multiplicado en número y ubicación geográfica.

“Los grupos culturales ya no sólo operan en los corredores culturales tradicionales como las ciudades de Xalapa y Veracruz, ahora también en áreas rurales y ciudades de menor población surgen iniciativas ciudadanas en torno a la cultura”, aseguró.

El gestor cultural explicó que esto forma parte de un proceso general de ejercicio de los derechos ciudadanos, entre los cuales el derecho a la cultura adquiere cada vez más claridad y persistencia.

Oscar Hernández destacó el papel de la cultura como herramienta para reducir actos violentos o discriminatorios, ya que parte de un supuesto básico el cual es la diversidad creativa y el diálogo interdisciplinario.

“Donde existe cultura y comprensión hay tolerancia y respeto, ya que el creador artístico y la tradición cultural siempre te muestran realidades alternas, y quien está dispuesto a aceptar distintas formas de pensar, reduce la probabilidad de desarrollar actitudes negativas como intolerancia y discriminación”, concluyó.