• Héctor Hernández declaró que el cine es un arte primordial en la vida porque sirve para entretener, educar, invitar a la reflexión, y conocer quiénes somos y quiénes son los otros. 

Héctor Hernández

Carlos Hugo Hermida Rosales 

Fotos: César Pisil Ramos (Foto 1), cortesía Héctor Hernández (Fotos 2, 3 y 4) 

17/06/2022, Xalapa, Ver.- “Sin humano no hay historias, y sin historias no hay cine”, manifestó Héctor Hernández, alumno de la Especialización en Estudios Cinematográficos de la Universidad Veracruzana (UV), director del cortometraje La última flor del cerezo, que se exhibirá en el Festival de Cine Oro Negro, a realizarse del 23 al 26 de junio en Coatzacoalcos, Minatitlán y Nanchital. 

El joven, quien egresó de la Licenciatura en Psicología de la UV, relató que desde pequeño supo que quería crear cine, y a los 15 años hizo sus primeras grabaciones amateur con ayuda de amigos. 

Un par de años después tomó algunos cursos y diplomados, la mayoría abordaban el cine en su parte argumentativa.  

Decidió ingresar a la Especialización en Estudios Cinematográficos de la UV debido a que conocía a varios egresados y maestros, y a través de ellos constató la gran calidad de los trabajos que se realizaban en este posgrado. 

Héctor Hernández mencionó que este programa de estudios ahonda en la cuestión del paradigma cinematográfico que representa la filosofía misma del cine, y que el buen nivel de sus docentes permite profundizar en el conocimiento teórico.  

El que los alumnos de la especialización pertenezcan a distintas áreas resulta enriquecedor, y refrenda el carácter interdisciplinario de la Universidad Veracruzana.  

El estudiante compartió que en su formación dentro del posgrado ha realizado varios ejercicios con temática abstracta, lo que da oportunidad de desarrollar diversos conceptos a través del lenguaje cinematográfico. 

El cortometraje La última flor del cerezo es resultado de una coproducción con el Reino Unido

Su proyecto de titulación es un documental que lleva por nombre Ecos desde el azulado prado, en el que aborda la historia de Itzel Guadalupe Pérez Carballo, bióloga marina egresada de la UV, quien fue la primera mujer mexicana en pertenecer a un grupo internacional de monitoreo de cetáceos.  

“Grabar en una lancha en movimiento ha representado un gran reto, pero el resultado final es un deleite a nivel visual”, aseguró. 

En el cortometraje La última flor del cerezo, Héctor Hernández muestra el tema del apego a través de la historia de una pareja que habita una casa en un mundo post-apocalíptico, y no se aventura a ver qué existe más allá de las fronteras que ellos mismos se impusieron. 

Aunque fue filmado completamente en Veracruz, la edición de audio se realizó en Londres, por lo que es una coproducción con el Reino Unido; el 13 de julio se estrenará en plataformas de streaming de este país.  

Héctor Hernández declaró que el cine es un arte primordial en la vida porque sirve para entretener, educar, invitar a la reflexión, y conocer quiénes somos y quiénes son los otros. 

“Es un medio que por definición retrata el modus vivendi del ser humano, y permite confabular a fin de romper dogmas y acercarse a historias, lugares o mundos que de otra manera no tendríamos oportunidad de descubrir”, enfatizó. 

Manifestó que es fundamental que la sociedad vea y apoye las producciones independientes, y aseguró que la Especialización en Estudios Cinematográficos de la UV es una gran promotora de ellas. 

La producción Ecos desde el azulado prado aborda la vida de una egresada UV que monitorea cetáceos en un grupo internacional