El teléfono móvil es un dispositivo muy importante para los estudiantes universitarios. No sólo porque en él socializan y se mantienen comunicados e informados sino porque también lo emplean como una herramienta para sus estudios. Sin la intención de generalizar, pero sí de reportar una experiencia cotidiana que podría guardar proporciones similares en otros casos y contextos, he organizado en este texto algunas observaciones sobre cómo usa el teléfono inteligente un grupo de estudiantes universitarios.
En la clase de licenciatura que imparto en el semestre de agosto de 2018 a enero de 2019 tengo 24 estudiantes inscritos. La dinámica semanal del curso implica la lectura de un texto. Las 11 lecturas que deben realizar los estudiantes durante el semestre tienen en promedio 40 páginas y de cada texto se ha colocado una versión en pdf en la plataforma institucional de aprendizaje distribuido. A la clase deben de asistir los estudiantes habiendo leído el texto. Ya que la dinámica de trabajo de la sesión implica la resolución de problemas basados en la lectura.
Según me comentaron los estudiantes, la forma en que acceden a los textos fuera del aula es diversa. De los 24, 18 lo revisan en el teléfono inteligente; tres lo imprimen y engargolan; dos en sus laptops y uno más usa su tableta para leer. Además, reportaron 11 estudiantes que usan el teléfono inteligente para leer que complementan su trabajo en alguna medida con una laptop.En nuestra clase semanal, 23 de los 24 estudiantes asisten al salón con su teléfono inteligente, que mantienen sobre la mesa prácticamente toda la clase. Lo toman y usan con fines varios, tales como para ver la hora, leer el pdf de la clase, atender su aplicación de mensajero instantáneo o para hacer búsquedas en Internet.
Leer intensivamente en un teléfono inteligente no es sencillo. Las pantallas de los dispositivos de manos no llegan a las 6 pulgadas; y los formatos de los textos que revisamos en el curso no fueron diseñados para pantallas pequeñas –como la Declaración de Incheón (http://unesdoc.unesco.org/images/0024/002456/245656s.pdf) o el texto de Replantear de la educación ¿Hacia un bien común? (http://unesdoc.unesco.org/images/0023/002326/232697s.pdf)–; además, cuatro de los estudiantes tienen celulares con pantalla estrellada, lo que complica la experiencia de lectura en ese tipo de dispositivos.
Leer una página de un documento de texto –de 30 renglones en promedio– en un dispositivo móvil de 6 pulgadas es como leer en una laptop de tamaño convencional –de 15 pulgadas– un texto con letra Arial 5.
El teléfono inteligente es sin duda un dispositivo valioso que se puede usar con distintos fines dentro de la clase, sin embargo, para leer textos largos –aún cuando se hagan acercamientos al texto– no es la mejor solución a pesar de que sea la favorita de los estudiantes. El teléfono inteligente entró al salón de clases y desplazó a las laptops que hace tan sólo un par de años habían ocupado el lugar del dispositivo digital más utilizado en las aulas universitarias.
Otro dato interesante de esta observación es la forma en que los estudiantes se conectan a Internet. Tres de ellos prefieren consumir sus datos a cambio de una conexión más estable y veloz mientras que 20 usan y confían en la red institucional que ha sido suficiente para sus necesidades de acceso a la información.
Entre los beneficios que mencionaron los estudiantes de leer un texto extenso en un teléfono inteligente destaca su accesibilidad y carácter práctico, economía y disponibilidad permanente del material.
- es práctico
- no tienes que imprimirlo
- no hay necesidad de imprimirlo
- no es necesario imprimirlo
- no hay necesidad de imprimir
- es accesible
- es accesible
- es accesibilidad de poder leerlo en cualquier momento
- es mucho más práctico y fácil
- es más práctico y muy fácil de conseguirlo
- no hay necesidad de gastar dinero
- los celulares no pesan y ocupan menos espacio.
- lo podemos leer en cualquier lugar
- lo puedes llevar a donde sea y leer en cualquier momento sin necesidad de llevar un pesado libro
- lo puedes leer donde sea
- es más práctico y rápido
- es más fácil de que no se olvide, porque el celular siempre lo andamos llevando
- económicamente, se evita comprar libros
- no hace falta internet para leer
- puedes leerlo en cualquier momento, donde sea
- es más accesible, se puede leer en donde sea
- puedes continuar tu lectura en cualquier lado, aún estando sin datos
Por otro lado, las dificultades que mencionaron los estudiantes de leer un texto por un periodo prolongado en un teléfono inteligente se refieren principalmente al tamaño de la letra, el agotamiento visual, la dificultad de seguir el texto, las distracciones propias del smartphone, la batería y la falta de acceso al dispositivo.
- el texto es pequeño, por lo tanto se necesita zoom, por esa razón llega a ser un poco cansado y tedioso.
- el tamaño de la letra
- algunos tenemos problemas de la visión y estar leyendo libros en pdf nos irrita la vista y causa dolor de cabeza
- cansa y desgasta la vista
- te daña la vista
- cansa la vista
- daña la vista
- cansado para la vista
- daños en la vista
- agotamiento visual
- la luz de la pantalla puede a veces lastimar la vista
- la letra es más pequeña y dificulta la vista
- la letra es muy pequeña
- las letras son muy pequeñas, te cansa la vista.
- las letras son pequeñas y al menos yo me pierdo
- cuando la letra es muy pequeña te pierdes
- me pierdo al leer 🙁
- puede llegar a ser un poco tedioso
- no se puede subrayar o marcar la hoja en qué te quedaste,
- falta de concentración
- hay más distracciones teniendo otras aplicaciones instaladas
- te distraes mucho con otras aplicaciones
- distracción
- distractores
- te distraes fácilmente
- te distraes con facilidad
- te distraes porque te llegan mensajes, o notificaciones de otras apps
- distracción inoportuna por redes sociales y notificaciones
- el uso desmedido de las redes sociales puede ser una desventaja
- la batería se agota rápidamente
- existe la posibilidad que se descargue el móvil.
- algunos tienen la pantalla rota, y no pueden leer muy bien
- te puedes distraer fácilmente por las notificaciones que llegan al celular.
- no todos tenemos la posibilidad de tener un teléfono e incluso el acceso a internet
- la economía (el no poder disponer de un dispositivo móvil
Nota: Esta es una versión para web del siguiente artículo.
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