Compartimos el discurso del gran escritor Fernando del Paso al recibir el Premio José Emilio Pacheco a la Excelencia Literaria Discurso Premio José Emilio Pacheco Señoras y señores, querida familia, estimado Rafael Morcillo López, director de la FILEY, estimado Jurado del Premio José Emilio Pacheco a la Excelencia Literaria, distinguida profesora Sarah Poot-Herrera, distinguidos anfitriones
Un libro muy recomendado de la Editorial Almadía Sinopsis Los cuentos de El fin de la lectura abarcan un gran abanico de temas, todos con un declarado interés en las relaciones humanas y las historias que de ellas surgen. En “Anabela y el peñón”, lo que podría ser la historia de una iniciación en los
La migala discurre libremente por la casa, pero mi capacidad de horror no disminuye. El día en que Beatriz y yo entramos en aquella barraca inmunda de la feria callejera, me di cuenta de que la repulsiva alimaña era lo más atroz que podía depararme el destino. Peor que el desprecio y la conmiseración brillando
Voy a contar la historia del niño que pidió un autógrafo a Picasso. Como todo el mundo sabe, a principios de los años 50 Picasso vivía en Cannes y todas las mañanas tomaba el sol en la playa de La California. Su pasatiempo favorito era jugar con los niños que hacían castillos de arena. Un
Ese largo y angustioso escalofrío que parece mensajero de la muerte, el verdadero escalofrío del miedo, sólo lo he sentido una vez. Fue hace muchos años, en aquel hermoso tiempo de los mayorazgos, cuando se hacía información de nobleza para ser militar. Yo acababa de obtener los cordones de Caballero Cadete. Hubiera preferido entrar en
En los buenos tiempos antiguos, cuando estaba poderoso y boyante el Arzobispado, hubo en Toledo un Arzobispo tan austero y penitente, que ayunaba muy a menudo y casi siempre comía de vigilia, y más que pescado, semillas y yerbas. Su cocinero le solía preparar para la colación, un modesto potaje de habichuelas y de garbanzos,
Una esperanza un huerto un páramo una migaja entre dos hambres el amor es campo minado un jubileo de la sangre cáliz y musgo/ cruz y sésamo pobre bisagra entre voraces el amor es un sueño abierto un centro con pocas filiales un todo al borde de la nada fogata que será ceniza el amor
Dos dudas en que escoger Tengo, y no se a cual prefiera, Pues vos sentís que no quiera Y yo sintiera querer. Con que si a cualquiera lado Quiero inclinarme, es forzoso Quedando el uno gustoso Que otro quede disgustado. Si daros gusto me ordena La obligación, es injusto Que por daros a vos