Abril-Junio 2005, Nueva época No. 88-90 Xalapa • Veracruz • México
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Presentó su libro Horas de vuelo
Las mujeres han tomado la palabra y no la van a soltar: Eraclio Zepeda

Juan Carlos Plata y Dunia Salas Rivera

Uno de los objetivos es registrar la labor realizada con profesores de taller escénico, el sistema de trabajo que se utiliza, la manera en que se intercambia la información, el traslado de los movimientos...
 
La literatura mexicana se ha enriquecido y está en un periodo de consolidación gracias a la contribución de las mujeres y de escritores en lenguas indígenas, lo que le ha dado una gran diversidad y amplia participación social, aseguró Eraclio Zepeda, durante la presentación de su libro Horas de vuelo y el de Magali Velasco Vientos Machos, organizada por el Instituto de Investigaciones Lingüístico Literarias, a través de la maestría en Literatura Mexicana.

El destacado escritor chiapaneco, egresado de la UV, afirmó que en México siempre ha habido grandes escritoras como Sor Juana Inés de la Cruz y Rosario Castellanos, pero en los últimos años ya no se trata de casos aislados. “Ahora hay verdaderos contingentes de mujeres que escriben. Durante siglos, los hombres se atribuyeron, en forma absolutamente bestial, la capacidad de hablar y escribir en nombre de las mujeres; esto acabó para siempre, las mujeres tomaron la palabra y ya no la van a soltar”.
Mario Muñoz, Eraclio Zepeda y Magali Velasco, durante la presentación de los libros Horas de vuelo y Vientos machos. (Foto: Luis Fernando Fernández)

Para Laco Zepeda, la mexicana es ya una literatura de diversas lenguas, porque cada una de las 52 lenguas indígenas que hay en el país ya tienen una gramática y un vocabulario, y varios jóvenes han empezado a escribir en sus propias lenguas.

Comentó que la literatura indigenista es un subproducto que se les ocurrió a los críticos, pero que él nunca se consideró dentro de este género. “Escribí sobre indígenas porque eran las personas que mejor conocía, si hubiera conocido cosmo-nautas hubiera escrito sobre cos-monautas, pero mis personajes siempre fueron hombres y mujeres y como tal los traté, de ninguna manera fueron figuras de cartón o de paja”.

La insurrección zapatista y la masificación del tema indígena no ha cambiado la manera de narrar lo indígena, pero sí ha animado a mucha gente a escribir en sus lenguas originales. «El logro más importante del movimiento zapatista es llamar la atención sobre el tema de la diferencia, sobre la magnitud de la pobreza, sobre la indigna desigualdad… y eso aparece en la literatura, auque muchos de nosotros habíamos empezado a hablar de eso desde mucho antes.

Vientos machos
De Magali Velasco, autora del libro Vientos machos, ganador del Premio Nacional de Cuento Juan José Arreola, Eraclio Zepeda dijo que por delante sólo tiene el éxito.

“Es una muchacha extraordinariamente dotada, muy bien preparada, con una gran capacidad narrativa, lo que yo vi como jurado del Premio Juan José Arreola, donde me tocó descubrir su libro. Magali tiene una capacidad extraordinaria de narrar, y en su libro uno encuentra voces sumamente diversas, una serie de personajes sumamente difíciles que oscilan entre el cinismo y la santidad, lenguajes que van desde la lujuria hasta la sensualidad e, incluso, un vocabulario ríspido.

“Estoy convencido de que Magali, con este primer libro, ocupa el lugar que le corresponde en la literatura veracruzana junto con Sergio Galindo, Sergio Pitol y Luis Arturo Ramos”.