Octubre-Diciembre 2007, Nueva época Núm.104
Xalapa • Veracruz • México
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Descubrimiento de UV podría sugerir tratamientos médicos
Hormonas, implicadas en conductas suicidas


Edith Escalón

Testosterona y estradiol, sustancias que se elevan en sujetos que cometen suicidio, aseguró Magda Olivia Pérez Vázquez
 

Un equipo científico de la Universidad Veracruzana (UV) descubrió que ciertas hormonas que segrega el cuerpo humano, como el estradiol y la testosterona, están elevadas en personas que se suicidan, hallazgo que podría detonar a mediano o largo plazo tratamientos médicos más eficientes para evitar la propensión por la que mueren cada año en México más de tres mil personas.

“Si el suicidio es una conducta impulsiva, autodestructiva y un acto violento, pero entendemos que no sólo se relaciona con situaciones culturales, económicas o sociales de la persona, sino por mecanismos biológicos o químicos del cerebro, estaremos en condiciones de buscar otras alternativas más eficaces para tratar de evitarlo”, señaló Magda Olivia Pérez Vázquez, estudiante del doctorado en Neuroetología y académica de la Facultad de Química Farmacéutica Biológica (QFB) de la UV.

Gracias a esta investigación –que se realizó comparando muestras de la vena pulmonar de sujetos que habían muerto por suicidio con sujetos que murieron por traumatismo craneoencefálico y otras causas–, los investigadores confirmaron que el suicidio tiene relación con sustancias químicas del cerebro.

La investigación busca diseñar una batería de pruebas para establecer cuáles son los grupos de riesgo, así como desarrollar tratamientos médicos que regulen la química cerebral: “Al saber lo que se afecta en el organismo con una enfermedad determinada se puede buscar la manera de reestablecer el equilibrio químico a través de medicamentos o terapias, lo que permite además tener mayores certezas respecto de las características de esta patología”, comentó la académica.

Reconoció que desde hace años existen reportes científicos que muestran el aumento de testosterona en sujetos que cometían crímenes violentos o suicidio, pero que la participación del estradiol es un descubrimiento netamente de la UV.

Agregó que estos trabajos podrían aportar nuevos datos para continuar la investigación farmacológica, indispensable si se considera que en México –según los datos que se conocen– cada año mueren tres mil personas por esta causa, en EU 30 mil, y que los casos se presentan cada vez con mayor frecuencia en jóvenes e incluso niños.