Octubre-Diciembre 2005 , Nueva época No. 94-96
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Confirma la OSX su nivel artístico con un repertorio de elevada exigencia

Jorge Vázquez Pacheco


Durante la Segunda Temporada de Conciertos de 2005, la OSX confirmó sus alcances artísticos con la ejecución de repertorios de elevada exigencia.
Durante la Segunda Temporada de Conciertos de 2005, la Orquesta Sinfónica de Xalapa (OSX) confirmó sus alcances artísticos con la ejecución de repertorios de elevada exigencia, así como con la presentación de destacados solistas y directores huéspedes. Todo lo anterior complementado con la labor de su titular, Carlos Miguel Prieto, quien es considerado uno de los directores mexicanos de mayor renombre en el extranjero.

Un buen ejemplo de ello fue el programa número 7 de dicha temporada, interpretado el 7 de octubre, en el que participaron, además de Prieto, Rubén Flores como director huésped y el violinista Cuauhtémoc Rivera como solista.
Flores, ex director de la Banda Sinfónica del Gobierno de Estado, se hizo cargo de la Primera sinfonía en re mayor, opus 25, denominada Clásica, de Serguei Prokofiev. Luego, el titular de la OSX tomó la batuta para dirigir el Concierto para violín y orquesta de Aram Jachaturian y la Primera sinfonía en fa mayor, opus 10, de Dmitri Shostakovich.

Sobre Cuauhtémoc Rivera cabe mencionar que es una figura muy activa en el ámbito musical de nuestro país. Fue alumno de Vladimir Vulfman, Zoria Shijmurzaeva, Gela Dubrova y Nadezhda Beshkina. Su actividad como solista se ha concentrado en la difusión del repertorio contemporáneo. En México ha estrenado obras de Alfred Schnittke, Wolfgan Rihm, Philip Glass, György Kurtag, Sofia Gubaidulina y de mexicanos como Mario Stern, Ulises Ramírez, Federico Ibarra, Héctor Quintanar y René Torres.
El regreso a Xalapa de Guido Maria Guida
En el octavo programa, la Orquesta Sinfónica interpretó el Vigésimo quinto concierto para piano y orquesta de Mozart y la Séptima sinfonía de Anton Bruckner. Con ello se dio también el regreso a Xalapa del excelente director de origen italiano Guido Maria Guida, la presentación de Luis Ascot como solista y la consumación de un proyecto largamente planeado por la dirección artística de la OSX: la ejecución de la portentosa Séptima del Genio de Linz.

Una vez más, el maestro de origen italiano, Guido Maria Guida, dirigió a la Orquesta Sinfónica de Xalapa.
Guida es una enorme celebridad como director wagneriano. Realizó estudios de Piano, Composición y Dirección de Orquesta en los conservatorios de Turín y de Milán.

Fue asistente del prodigioso Giuseppe Sinopoli en teatros como la Deutsche Oper de Berlín, el Covent Garden de Londres y la Metropolitan Opera House de Nueva York, con orquestas como la New Philharmonia de Londres y la Accademia de Santa Cecilia de Roma. Asimismo, ha dirigido las óperas Sansón y Dalila con Plácido Domingo y Carlo Cosutta; Lucia di Lammermoor y Un ballo in maschera con Ramón Vargas; Simon Boccanegra con Joan Pons; Don Giovanni con Justino Díaz; Boris Godunov con Anatoly Kotscherga, entre otras, así como conciertos con renombrados solistas, entre ellos Sumi Jo, Youngok Shin y Francisco Araiza.

Por su parte, el pianista Luis Ascot es originario de Buenos Aires, Argentina, donde realizó sus estudios musicales bajo la dirección de Poldi Mildner. Continuó con Guiomar Novaes, Magdalena Tagliaferro y Jacques Klein en Río de Janeiro, Brasil. Ha sido galardonado en numerosos concursos internacionales y ha actuado como solista con las más importantes orquestas de Alemania, Bélgica, Dinamarca, España, Francia, Grecia, Italia, Países Bajos, Polonia, República Checa, Suiza, América Latina, Canadá y Estados Unidos. Desde 1998, es miembro de la Academia Argentina de Música.

Robert Bonfiglio, “el Paganini de la armónica”
El repertorio del noveno programa, el cual fue presentado el 20 de octubre en el Teatro Clavijero de Veracruz y el 21, en el Teatro del Estado de Xalapa, estuvo conformado por la piezas Itinerarios de Silvestre Revueltas; el Concierto para armónica y orquesta de Heitor Villalobos, con Robert Bonfiglio como solista, y el poema sinfónico Una vida de héroe de Richard Strauss. La dirección estuvo a cargo de Carlos Miguel Prieto.

Bonfiglio ha sido denominado por Los Angeles Times “el Paganini de la armónica”, y su asombrosa técnica ha deslumbrado en salas renombradas: Carnegie Hall y Lincoln Center de Nueva York; Hollywood Bowl de Los Ángeles; Gewandhaus de Leipzig, y el Teatro Colón de Buenos Aires.

Obtuvo el grado de maestro en Música por la Manhattan School of Music. Estudió armónica con Cham-ber Huang y fue entrenado durante 12 años por Andrew Lolya –primera flauta en el New York City Ballet–, tiempo durante el cual analizó y estudió las principales obras para armónica y orquesta. Asimismo, tomó cursos de Composición con Charles Wuorinen y Aaron Copland. También es director fundador del Festival Musical Grand Canyon.

David Pozos es miembro de la OSX y director del Ensamble de Trombones y Tuba de Xalapa.

Piotr Paleczny es uno de los más renombrados pianistas del mundo.
Grzegorz Nowak y Zeferino Nandayapa con la OSX
Carnaval romano, opus 9, de Hector Berlioz; el Concierto para marimba, vibráfono y orquesta de Darius Milhaud, y la Octava sinfonía de Antonin Dvorák fueron las obras que integraron el décimo programa de la temporada que fue dirigido por el polaco Grzegorz Nowak y en el que participó como solista Zeferino Nandayapa.

Nowak, quien alcanzó la celebridad internacional al obtener el primer premio de Dirección de Orquesta en el prestigioso concurso “Ernest Ansermet” de Ginebra (1984), estudió Violín, Composición y Dirección en la Academia de Música de Poznan. Realizó el doctorado en Dirección de Orquesta en la Eastman School of Music (Rochester, Nueva York) y continuó su formación en Tanglewood con los maestros Leonard Bernstein, Igor Markevitch, Seiji Ozawa y Erich Leinsdorf. Invitado por Kurt Masur, en 1992 fue asistente de este director en la New York Philharmonic.

Ha dirigido a la Sinfónica de Londres, la Sinfónica de Montreal, la Nacional de Francia, la Nacional de España, la Ópera Nacional de Varsovia, así como la Orquesta Sinfónica y de la Ópera de Biel, la Orquesta Sinfónica de Edmonton, la SWR Rundfunkorchester Kaiserslautern y la Canadian Chamber Orchestra, entre otras. Desde 2004, es director musical de la Orquesta Filarmónica y de la Ópera de Poznan.

El maestro Zeferino Nandayapa es originario de Chiapa de Corzo, Chiapas. Estudió en el Conservatorio Nacional de Música. En 1956, fundó la Marimba Nandayapa, con la que grabó sus primeros seis discos de larga duración. De 1958 a la fecha, ha llevado la música de marimba a numerosos países de Europa, Asia y América, donde se ha presentado en eventos como las Olimpiadas Culturales de Munich (Alemania), la feria internacional Las grandes ciudades y capitales del mundo en Montreal (Canadá) y el Congreso Internacional de Juventudes Musicales, celebrado en Zagreb (antigua Yugoslavia). En 1989, actuó como solista con la Royal Philharmonia Orchestra, bajo la dirección de Eduardo Mata. En 1996, por sus 50 años de trayectoria artística, recibió el Premio Nacional de las Artes, en la rama de Artes tradicionales populares.

De Bach a Stravinski: un concierto didáctico
En la décimo primera jornada, Guigui como director huésped y el violinista xalapeño Félix Alanís Barradas fueron los protagonistas al frente de la OSX, agrupación que en esta jornada ejecutó un concierto didáctico. El listado de obras estuvo compuesto por fragmentos notables del Tercer concierto de Brandemburgo de Johann Sebastian Bach, la Sinfonía número 40 de Mozart, la Quinta sinfonía de Beethoven, la Sexta sinfonía de Tchaikovski, El pájaro de fuego de Stravinski y el Concierto para violín de Beethoven (esta obra se interpretó completa, con sus tres movimientos).

Guigui es argentino de origen y radica desde hace años en Nueva York. Fue ganador del Premio “Alice Ditson” de la Universidad de Columbia (considerado el Pulitzer Prize para directores) por su contribución a la presentación de nueva música. Ha estrenado centenares de obras en el Town Hall de Nueva York, el Carnegie Hall, el Lincoln Center y el Forum de Compositores.

Graduado con Medalla de Oro del Conservatorio de Buenos Aires, hizo carrera como clarinetista desde su época con la Sinfónica de Buenos Aires hasta su periodo con la Filarmónica de Nueva York. En Estados Unidos, tomó cursos de Composición y Dirección en la Universidad de Boston; posteriormente, estudió con Leopold Stokowski y Karl Bamberger en Nueva York. A lo largo de su trayectoria ha impulsado el trabajo de orquestas como la Sinfónica de Vermont, la Orquesta de la Universidad de Dartmouth y la Nacional de Panamá.

Sobre Félix Alanís, joven violinista que nació en Xalapa y que inició sus estudios en el Centro de Iniciación Musical Infantil de la Universidad Veracruzana (UV), vale destacar que, desde el comienzo de su carrera, dentro de la Facultad de Música de la UV, se le otorgó una beca escolarizada por su rendimiento académico, apoyo que conservó durante su estancia en esta escuela, donde trabajó bajo la tutela del maestro Míkhail Medvid. En octubre de 2002, ingresó a la OSX para realizar su servicio social. Un año después, obtuvo el interinato, por lo que pudo participar en la gira de la Orquesta realizada en septiembre de 2004 por Bélgica, Holanda y Alemania.
Obras de Verdi, Rota y Dvorák
Dedicado a la asociación civil Cáritas de Xalapa, el concierto correspondiente al 18 de noviembre estuvo conformado por la obertura para La fuerza del destino de Giuseppe Verdi, el Concierto para trombón y orquesta de Nino Rota y la Novena sinfonía en mi menor, conocida como Del Nuevo Mundo, de Antonin Dvorák. El solista fue David Pozos y el maestro invitado fue el coreano Shinik Hahm. Hahm es un destacado director originario de Seúl, Corea del Sur. Estudió Dirección de Orquesta en la Universidad de Rice y en la Eastman School of Music.

El décimo programa de la temporada fue dirigido por el polaco Grzegorz Nowak.

Manfred Neuman es considerado un gran talento entre los jóvenes directores europeos.
 

En 2001, asumió el puesto de Director Artístico Principal de la Orquesta Filarmónica de Daejeon, en Corea. También fue Director Musical de la Sinfónica de Green Bay, de 1995 a 2000. Ha actuado al frente de orquestas de Los Ángeles, Varsovia, Praga, Nueva York, Fort Worth, Atlanta, Louisville, Toronto, Omaha, Hartford, Alabama, Memphis, Boulder, Colorado, Augusta, Hungría, Austria y Georgia.

También trabaja con agrupaciones orquestales de España, Rusia y México. Sus grabaciones con la Orquesta de la Radio Nacional Polaca han sido para las firmas Vision y Britstar.

Por su parte, desde 1987, David Pozos es miembro de la Sinfónica de Xalapa, en la que es jefe de sección. Nació en San Antonio, Texas, y se inició en el estudio del trombón con los maestros Arnold Priest y Pete VanDeputte. Más tarde, se desempeñó como trombonista principal de la Orquesta Filarmónica Juvenil de San Antonio y de la All-State Symphony Orchestra. Es sumamente activo en el renglón del recital, donde interpreta con la misma facilidad y destreza tanto la música de concierto como los géneros de jazz y pop. Actualmente, es profesor de Trombón en la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana y director del Ensamble de Trombones y Tuba de Xalapa.

El virtuosismo de Piotr Paleczny
Tanto el público del Teatro del Estado de Xalapa como el del Teatro Clavijero de Veracruz tuvieron la oportunidad escuchar el décimo tercer concierto de la temporada, donde se ejecutaron las obras Lydische nacht de Alphons Diepenbrock (estreno en México); el Primer concierto para piano y orquesta de Chopin, con Piotr Paleczny como solista, y la Quinta sinfonía de Tchaikovski, bajo la dirección de Carlos Miguel Prieto.

Piotr Paleczny es uno de los más renombrados pianistas del mundo y un profesor también afamado. Actualmente, es titular de la clase de Piano en la Academia de Música de Varsovia. Se graduó en la Academia de Música “Fryderyk Chopin”, en Varsovia, y ha sido ganador en cinco concursos internacionales de piano: Sofía, Bulgaria, en 1968; Munich, Alemania, en 1969; Varsovia, Polonia, en 1970; Pleven, Bulgaria, en 1972, y Burdeos, Francia, en 1972.

Ha actuado como solista con las orquestas internacionales más renombradas, en salas importantes mundialmente: Carnegie Hall, Avery Fisher y Alice Tully de Nueva York; Orchestra Hall de Chicago; Suntory Hall de Tokio; Gewandhaus de Leipzig; Concertgebouw de Ámsterdam, y Royal Festival Hall y Tonhalle de Zurich. Desde 1993, es director artístico del más antiguo festival que se lleva a cabo en Polonia, el Festival Internacional Chopin, en Duszniki Zdrój.

Neuman, Russell y la OSX, en el mismo escenario
El programa número 14 se llevó a cabo con la ejecución de la Tercera sinfonía en re mayor de Franz Schubert, las Canciones de Rückert de Mahler y las Variaciones del pavorreal de Zoltan Kódaly. El solista fue el bajo Hugh Russell y la dirección se asignó al maestro alemán Manfred Neuman.

El joven barítono canadiense Hugh Russell, quien ha sido aclamado por su hermosa voz, su incisiva musicalidad y su fuerte presencia escénica, estudió en el Conservatorio de Oberlin, la Universidad de Brandon y la Eastman School de Música.
Con la Ópera de San Francisco, Russell ha actuado en Il barbiere di Siviglia, en Ariadne auf Naxos y en la célebre producción de la compañía: St. François d’Assise. Asimismo, como miembro del Pittsburgh Opera Center, ha interpretado numerosos personajes, entre ellos Malatesta en Don Pasquale, Guglielmo en Così fan tutte, Pelléas en Pelléas et Mélisande, Nick Shadow en The Rake’s Progress, Eisenstein en Die Fledermaus y Taddeo en L’italiana en Algeri. También se ha presentado en The Rape of Lucretia, Romeo et Juliette, El oso y en Candide.

En invierno de 2003-2004, regresó al Festival de Canto de Nueva York para actuar en programas ofrecidos en Washington y Nueva York. Más adelante, actuó en un concierto operístico con la Sinfónica de Winnipeg, cantó el Requiem de Fauré con la Orquesta Sinfónica de Sevilla y participó en la obra Carmina Burana con la Sinfónica de Seattle. También se ha presentado en el Schwabacher Debut Recital Series de San Francisco.

Un variado repertorio
Muy variado resultó el repertorio del penúltimo concierto de 2005, dado que la OSX ejecutó la ópera El rey de Ys de Edouard Laló, el poema sinfónico El Moldavia de Bedrich Smetana, el estreno nacional de Sevillana opus 7 de Edward Elgar y las Danzas sinfónicas de Edvard Grieg.

El director huésped fue, de nueva cuenta, Manfred Neuman, considerado un gran talento entre los jóvenes directores europeos. Realizó sus estudios de Corno y Dirección orquestal en la Escuela Superior de Música de Colonia, Alemania. Desde su primer debut profesional como director, en 1973, ha sido invitado a dirigir numerosas orquestas alemanas e internacionales, como la Sinfónica de Westfalia, la Siegerland-Orchester, la Folkwang-Orchester de Essen, la Klassische Philharmonie de Bonn y la Orquesta Sinfónica de Cuenca, Ecuador. En 1996, trabajó en Pekín con la Sinfónica Nacional del Estado Chino y, en 1988, se le otorgó la dirección artística de la Orquesta Sinfónica de Saarlouis, Alemania.

Neuman ha grabado con la Orquesta Sinfónica de Berlín, con el cantante francés Romain Didier, con la Orquesta de la Radio de Bavaria y con la Orquesta de la Radio SWR. Actualmente, es artista de los sellos Naxos y Audite.

Un concierto navideño
Para finalizar las actividades de 2005, la Orquesta Sinfónica ofreció dos conciertos el 15 y el 16 de diciembre, en el Teatro Clavijero de Veracruz y en el Teatro del Estado de Xalapa, respectivamente, donde tocó música alusiva a la Navidad.

El programa, que fue seleccionado por el director Carlos Miguel Prieto para cerrar la temporada, estuvo integrado por las obras: A Christmas Festival y Paseo en trineo de Leroy Anderson, Marcha festiva de Richard Strauss, Vals del pueblo vienés de Carl Michael Ziehrer, Rapsodia navideña de René Saldívar, polka Trish-trash y Movimiento perpetuo de Johann Strauss hijo, obertura para La bella Helena de Jacques Offenbach, Cántico de Noel de Adolphe Charles Adam, Vals Luxemburgo de Franz Léhar y The many moods of Christmas de Robert Shaw, una lista extensa, aunque representativa de un espíritu que es propio de las fiestas de fin de año.